La zozobra económica en EE.UU. socava la inversión empresarial
Las compañías estadounidenses están recortando planes de inversión a su ritmo más rápido desde la recesión, lo que augura más aprietos para la recuperación económica.
La mitad de las 40 empresas con acciones en bolsa y los gastos corporativos más altos de Estados Unidos anunciaron planes de reducir sus inversiones de capital este año o el próximo, de acuerdo a una revisión de The Wall Street Journal de documentos presentados a la Comisión de Bolsa y Valores de EE.UU. y conferencias telefónicas.
A nivel nacional, la inversión en equipo y software —un indicio de la vitalidad económica en el sector corporativo— se estancó en el tercer trimestre por primera vez desde principios de 2009. La inversión corporativa en nuevos edificios también descendió.
Al mismo tiempo, las exportaciones a mercados tan clave como China y la zona euro se están desacelerando o cayendo conforme la economía global se debilita, creando así otro obstáculo a los planes de expansión de las empresas.
Los ejecutivos corporativos afirman que están disminuyendo o aplazando los proyectos grandes para proteger las ganancias en medio de una menor demanda y una mayor incertidumbre. De hecho, la incertidumbre que hubo en torno a las elecciones presidenciales en EE.UU. y las políticas del presupuesto gubernamental también están entre los factores detrás de las restricciones a la inversión desde mediados de año. No está claro si Washington podrá evitar el llamado "abismo fiscal", que incluye una serie de aumentos de impuestos y recortes de gastos que se entrarían en efecto el 2 de enero.
Las compañías temen que si no se evita el abismo fiscal, la economía estadounidense podría volver a caer en recesión porque debilitaría el consumo, dañaría la confianza de los inversionistas y socavaría las ganancias corporativas. Un acuerdo para eludir el abismo fiscal podría incluir cambios al código fiscal, como reformas a las exenciones tributarias, que afectan a sectores específicos.
El Presidente Barack Obama llamó a un grupo de ejecutivos durante el fin de semana, incluyendo a Warren Buffett; al presidente ejecutivo de Apple Inc., Tim Cook, y a James Dimon, presidente ejecutivo de J.P. Morgan Chase, para promocionar su solución a la crisis presupuestaria. En un claro contraste con el año pasado, caracterizado por fuertes divisiones, esta vez todos los sectores de Washington han prometido trabajar juntos y se han comprometido a evitar caer en el abismo.
"Todo el mundo aguarda estabilidad y claridad de EE.UU.", dijo David Seaton, presidente ejecutivo de la empresa de ingeniería y construcción Fluor Corp.
Si la Casa Blanca y el Congreso llegan a un acuerdo para evitar el abismo fiscal, la economía podría recibir un impulso. "Podríamos ver una explosión de demanda acumulada empezando al inicio del año entrante", señala Paul Ashworth, economista jefe de EE.UU. en la firma de consultoría Capital Economics.
A menos que la desaceleración en la inversión corporativa se revierta rápidamente, podría abrumar más a los prospectos de crecimiento y a la bolsa de valores.
En su conjunto, los miembros del índice bursátil Standard & Poor’s 500 gastaron US$580.000 millones en plantas y equipo en 2011, según cálculos de The Wall Street Journal en base a información proporcionada por S&P Capital IQ. Los gastos han superado ese ritmo durante el presente año pero se han desacelerado en meses recientes. Entre las empresas que han reducido su inversión están Wal-Mart Stores Inc., Ford Motor Co., Boeing Co, Intel Corp. y Walt Disney Co.
Durante la recesión de 2007-2009, las empresas recortaron considerablemente gastos de todo tipo. Pero la inversión contribuyó a la recuperación, ya que aumentó más rápidamente que el resto de la economía desde el segundo semestre de 2009, cuando la recesión terminó, y hasta la primera mitad de este año. Esto ayudó a que muchas compañías fortalecieran su productividad y ganancias sin aumentar su personal.
El patrón cambio en el tercer trimestre, cuando la inversión empresarial cayó a una tasa anual desestacionalizada de 1,3%, según un estimado preliminar del Departamento de Comercio. La última caída incluye un descenso en inversión en estructuras, como edificios, a una tasa anual de 4,4%. La inversión en equipo y software se estancó tras crecer a una ritmo anual de 5% en el primer semestre.
"Realmente no hemos visto vientos a favor para la economía", apuntó el presidente ejecutivo de OfficeMax Inc., Ravi Saligram. "Cuando esto ocurre, las empresas estadounidenses se enfocan en productividad. Uno siempre se prepara para lo peor y si las cosas mejoran, grandioso".