La viuda de Steve Jobs podría vender sus acciones en Apple y Disney
La confirmación de la SEC de que una fundación, conducida por Laurene Powell Jobs, se hará cargo de las participaciones del empresario en Disney acrecentaron los rumores publicados en medios estadounidenses
La confirmación de la autoridad estadounidense de supervisión bursátil (SEC) de que una fundación, conducida por la Laurene Powell –viuda de Steve Jobs -, se hará cargo de la multimillonaria participación del cofundador de Apple en el gigante del entretenimiento Disney, acrecentaron los rumores que varios medios destacaron hoy en los Estados Unidos, sobre la posible venta de las acciones que, por US$ 6.790 millones, poseía el empresario en Apple y Disney.
Conforme a las leyes de ese país, los herederos de Jobs pueden vender su participación y evitar pagar US$867 millones en impuestos, ya que si el fallecido cofundador de Apple dejó su herencia a su esposa, la familia no estará obligada a abonar el impuesto a la herencia del 35% hasta que Laurene muera o dé el dinero a otros, según los planificadores patrimoniales. Por otra parte, la esposa del empresario refirió que no tiene interés, según pudo saberse, en asumir el puesto de su difunto marido en ninguna de las dos empresas.
Las acciones de Steve Jobs en Apple y Disney valen actualmente US$ 6.790 millones
"No veo ninguna razón para no vender", dijo Kacy Gott, directora de planeamiento de la firma de administración patrimonial Aspiriant, cuyos clientes tienen activos por valor de US$100 millones, a la agencia AP. "Deberían haber buscado diversificar hace años."
"Los herederos de Jobs deberían vender algunas acciones para reducir los riesgos patrimoniales", explicó por su parte Joyce Franklin, planificadora financiera de San Francisco que trabaja con ejecutivos del sector de la alta tecnología.
Steve Jobs poseía 138 millones de acciones de Disney, valuadas al último cierre en US$ 4.740 millones, y 5,55 millones de acciones de Apple por US$ 2.050 millones; y fue transfiriendo sus tenencias a fideicomisos conforme empeoraba su salud. Los fideicomisos permiten que las personas distribuyan el patrimonio a lo largo del tiempo y evitan el pago de derechos testamentarios.
Si, en cambio, hubiese vendido todas sus acciones de Disney y Apple el 4 de octubre, el día anterior a su muerte, habría obtenido una ganancia de alrededor de US$ 5.780 millones –mil millones menos- y pagado impuestos por US$ 867 millones, sobre la base de su inversión de US$ 55 millones en los estudios Pixar, ahora parte de Disney, y las acciones de Apple concedidas en marzo de 2003.
La participación en Disney
De las dos carteras, Disney sería la más complicada de vender dado que las acciones representan casi doce veces la cantidad promedio de acciones de Disney negociadas diariamente en el último año.
En 2006, como consecuencia de la venta de los estudios de animación Pixar a Disney, Jobs recibió acciones por un valor de 7.400 millones de dólares, lo que equivalía a una participación del 7,7%. Desde entonces, el empresario asumió un puesto en el consejo de vigilancia de la compañía cinematográfica que, a su vez, se convirtió en el principal aliado de Apple en el sector de los medios.
Si Jobs hubiese vendido todas sus acciones el 4 de octubre, el día anterior a su muerte, hubiera ganado alrededor de US$ 5.780 millones
Cuando Jobs murió, su participación en Disney valía US$ 4.350 millones. Excluyendo los dividendos, eso da un retorno anual de 18,5% hasta el 5 de octubre, sobre la base de los US$55 millones invertidos por Jobs hasta fines de 1986. En ese lapso, Berkshire Hathaway Inc. de Warren Buffet produjo una ganancia anual promedio de 15,4%, utilizando precios históricos de Global Financial Data y los retornos reunidos por Bloomberg.
Al revés, la cartera de Apple representa menos de un tercio de los 17,6 millones de acciones que se negocian diariamente, lo que hace que una venta en el mercado abierto sea mucho más simple.
Jobs murió el 5 de octubre a los 56 años por complicaciones de un cáncer de páncreas. Su testamento aún no se ha hecho público. Lo sobreviven su esposa y cuatro hijos, Lisa, Eve, Erin y Reed.