La soja, atada a la suerte de Europa
La crisis domina la cotización; sin embargo, pronostican precios firmes para los próximos meses
En otro momento de la historia, las lágrimas de la ministra de Bienestar Social de Italia, Elsa Fornero, al anunciar un severo ajuste en ese país, no les habrían movido un pelo a los duros hombres de Chicago. Pero en estos años de creciente dependencia de los granos de los vaivenes del mercado internacional, el anuncio hecho por la funcionaria, sumado a otras medidas de ajuste adoptadas en la zona del euro el mismo día, logró que la cotización del futuro de soja enero 2012 cayera 8% en la Bolsa de Chicago al día siguiente.
Es que, como coinciden los expertos, para saber qué va a pasar con los precios de la soja en los últimos meses los operadores del mercado están más pendientes de cómo se desenvuelve la crisis europea que de los fundamentos propios del mercado granario.
"Nosotros estamos habituados a relacionar los precios con los stocks, pero hoy los precios dependen mucho de la crisis", destacó Ricardo Baccarin, presidente de la corredora Panagrícola. "De hecho, si uno sigue la trayectoria de la caída de precios de las commodities agrícolas desde septiembre, esta caída coincide con los peores momentos de crisis en Portugal, Irlanda, Grecia e Italia", acotó el experto.
Una visión similar expresó Adrián Seltzer, de la corredora Granar. "No es que los precios cayeron porque la demanda del complejo sojero se haya desplomado. Las bajas de los últimos meses tuvieron que ver con el aumento del desempleo y la crisis en Europa, que hacen temer que pueda haber una menor demanda a futuro", explicó Seltzer.
Esto también significa que el futuro de los actuales precios de la soja no sólo depende de cuánto obtengan los agricultores brasileños, argentinos y estadounidenses en la próxima cosecha, sino también de los acuerdos a los que lleguen los países europeos para salvar su economía.
"Definitivamente, lo que vaya a pasar en los próximos meses con la soja va a estar muy relacionado con cómo se defina la crisis en Europa y cómo continúa reaccionando Estados Unidos. Por otro lado, el freno de cualquiera de estas dos economías podría afectar el desarrollo de China, y eso sería otra fuente de riesgo para nosotros, porque gran parte de nuestras exportaciones agropecuarias van a ese país", acotó Seltzer.
Por otro lado, el anunciado estancamiento de Brasil también podría tener cierta incidencia en los precios futuros, pero no con tanta fuerza como la crisis europea. "Si hay una devaluación del real, los brasileños querrán vender rápidamente su soja. Entonces si Brasil devalúa la moneda puede afectar nuestros precios", dijo Baccarin.
Precios firmes
Más allá de lo que sucede en Europa, para el analista Gustavo López, director de la consultora Agritrend, en los próximos meses pueden esperarse valores firmes para la soja, sin nuevas caídas abruptas, debido a ciertas particularidades del contexto local y al menor stock en Estados Unidos. "En primer lugar, Estados Unidos redujo su superficie sembrada y su producción, lo que lo obligó a hacer un ajuste fuerte en las exportaciones: ese país venderá 5 millones de toneladas menos al exterior", destacó López.
Como segundo factor está el hecho de que en la Argentina, con la inauguración de una nueva planta de molienda (de la firma Glencore), la capacidad de procesamiento de soja va a crecer a 190.000 toneladas diarias, lo que va a significar un 35% de la capacidad de molienda ociosa. "Esto me hace pensar en un año con una puja fuerte entre la industria y la exportación por la mercadería", acotó López.
Como tercer factor, López apuntó el valor que tiene la oleaginosa para el productor ante los mercados deprimidos del trigo y el maíz. "La moneda de cambio, el resguardo hoy para el productor, es la soja, y de hecho hay 5 millones sin vender y 10 millones sin fijar precio, y faltan tres meses para el nuevo ciclo. Esto muestra que hay una actitud de retener el grano como resguardo o seguro contra la inflación", explicó el director de Agritrend. "Sumado a estos factores, tenemos una situación del mercado estructuralmente mucho más sana y sólida que la que había en la burbuja de 2008, con lo cual, me imagino valores firmes para la oleaginosa", finalizó López.
Seltzer, por su lado, prevé meses de precios para la soja más estables y un mercado en general menos volátil. "Como con la crisis los especuladores salieron, lo que produjo la caída de precios, mientras no haya situaciones de riesgo que permitan esperar subas fuertes, los especuladores no van a tomar posiciones y el mercado va a estar más tranquilo", dijo.