La represa de Salto Grande dejaría de producir energía
Hoy sólo funciona una de sus 14 turbinas, que sería detenida
PARANA.- Sólo una de las 14 turbinas que producen electricidad en Salto Grande está en funcionamiento, y podría ser detenida transitoriamente para permitir que las ciudades entrerrianas y uruguayas establecidas al sur de la represa puedan abastecerse de agua potable.
Cuando el caudal de agua es normal, la central hidroeléctrica de Salto Grande tiene una capacidad de generación de 24.000 mW/hora diarios, casi un 15% de la producción hidroeléctrica total que es capaz de generar la Argentina si sus ríos están en un buen nivel. Como casi todas sus turbinas están fuera de funcionamiento, en estos días la central que está en el límite entre la provincia de Entre Ríos y la localidad uruguaya de Salto apenas aporta unos 1000 o 1500 mW/hora diarios, lo cual es un nivel demasiado bajo, por lo que casi no incidiría su salida total de servicio.
El río Uruguay, que posee un caudal medio de 4600 metros cúbicos por segundo sólo está aportando 600 m3 en el norte entrerriano, un volumen que alcanza para que gire sólo una turbina, de manera que la ausencia de lluvias por fenómenos naturales en el norte de la Argentina y el sur de Brasil está complicando la ya difícil situación de la provisión de energía.
El delegado argentino ante la Comisión Técnica Mixta (CTM) de Salto Grande, Néstor Berterame, explicó que las ciudades de Concordia, en Entre Ríos, y Salto en el país vecino necesitan un mínimo de 400 m3 para permitir el funcionamiento de las tomas de agua potable. Dijo que si el río sigue bajando, la CTM tiene previsto dejar de generar electricidad y abrir las compuertas para asegurar esos 400 m3 imprescindibles, mientras esperan que el lago se recargue con nuevas lluvias en el sur de Brasil.
"Estamos evacuando sólo 600 m3 de agua por segundo y eso es el producido para una sola máquina, más allá de que a veces funcionen las 14 turbinas, pero la potencia lograda que es lo que interesa, es la correspondiente a una sola", aclaró Berterame a la prensa.
Como no se esperan lluvias torrenciales en el sur brasileño para las próximas horas, la habilitación completa de la empresa hidroeléctrica tardará varias semanas. Las autoridades de Salto Grande recordaron que también los lagos de Brasil están bajos, de modo que la generadora argentino-uruguaya deberá esperar que se recarguen primero los embalses del Norte.
La bajante que mantiene el lago de Salto Grande con menos de 30 metros, 5 por debajo del nivel óptimo, es un fenómeno natural que depende del régimen pluvial, aunque las sequías generalmente se producen con mayor intensidad en enero y febrero.
El régimen actual difiere de uno de los últimos récords en producción energética en esta represa registrado en el primer semestre de 2001 con 7183 giga Wats/hora, cifra que prácticamente duplicó la media histórica para ese período del año (3769 gW/h).
La productividad fue posible entonces gracias a que el caudal medio que aportó el río Uruguay fue de 7101 m3/s (el volumen actual multiplicado por diez), de modo que el complejo contó con materia prima abundante, si se considera que el promedio histórico es de 4.600 m3/s. En este abril de 2004 sólo está aportando 600 m3/s.
Bajas y altas
En épocas de creciente, el Uruguay ha llegado a extremos de 36.000 m3/s, y en tiempos de sequía a mínimos de 109 m3/s. La empresa binacional está equipada con 14 generadores accionados por turbinas tipo kaplan, de procedencia soviética, dispuestos en 2 salas de máquinas gemelas con sus correspondientes salas de mando, y un vertedero central de 19 compuertas de accionamiento hidráulico.
Posee dos descargadores de fondo, uno en cada margen, para crecidas excepcionales, de modo que la capacidad de evacuación de la represa es de 64.000 m3/s, cien veces el caudal actual.
Las centrales hidroléctricas generan, en épocas normales, un 60% de la energía eléctrica, pero ahora, dada la falta de lluvias, está aportando sólo el 30%, y ésa es una de las causas por las que aparecieron problemas de suministro de otras fuentes, como el gas.
Es malo no cumplir
- El ministro del Interior, Aníbal Fernández, reconoció ayer que "es muy malo" para el país no cumplir con los pactos de exportación de gas a Chile, y calificó esa situación como "no deseada". El funcionario culpó a las empresas privatizadas por la falta de inversión en el sistema, y dijo que "ninguno hubiera querido tener que perjudicar a ningún país vecino, ni particularmente a Chile".