La producción industrial sufrió el tercer mes consecutivo de caída en la actividad

Luego de que la industria manufacturera pyme sufriera dos meses consecutivos de fuertes caídas (26,9% en diciembre y 30% en enero, en ambos casos en la medición interanual), febrero marcó otra retracción, aunque en niveles menores, ya que el mes pasado la caída fue del 9,9% en la comparación con el mismo período del año pasado.

Los datos surgen del último informe difundido por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), que también observó que el 32,7% de las industrias continúan sufriendo problemas para reponer stock, aunque “son dificultades de mucho menor escala que meses anteriores”, asegura.

Según la CAME, una de las mayores preocupaciones en el sector fueron los aumentos de servicios y combustibles durante febrero, sectores que estuvieron congelados durante la gestión anterior. De hecho, las industrias consultadas para el relevamiento que realiza la confederación explicaron que resultó difícil trasladar a los precios esos incrementos, y que hay incertidumbre por cómo puede afectar en el sector la apertura de las importaciones que anunció Manuel Adorni, vocero presidencial, el martes pasado.

Al dato del descenso en la industria se le suma que cinco de los seis sectores relevados sufrieron caídas respecto del año pasado, y solamente el rubro de Indumentaria y Textil creció un 10,5% anual en febrero (aunque también tuvo una baja del 2,4% respecto del mes anterior).

De todas formas, se observó en este sector un repunte en la producción, ya que las industrias operaron con un 72,6% de su capacidad instalada, 4,4 puntos porcentuales por encima del registro previo. “El inicio del ciclo lectivo y de actividades deportivas levantó la demanda de las pymes orientadas a este segmento, que habían tenido un enero de muy poca demanda”, especifica el informe.

A pesar de esto, según los empresarios consultados por la CAME, las ventas siguen bajando, en contraposición con el constante aumento de los gastos.

Alimentos y bebidas, un rubro sensible en las mediciones de precios y consumo, cayó solo 0,3% interanual y acumuló, en lo que va del año, una baja de 14,6%. Aunque los precios en febrero fueron volátiles, con momentos de aceleración y desaceleración, pero siempre manteniendo las subas, el informe asegura que se normalizaron las entregas. Sin embargo, la caída se basó, según las empresas, en los aumentos de energía y transporte.

Otros sectores con bajas fueron los de Maderas y muebles, con una retracción del 10% interanual, y Metálicos, maquinarias, equipos y material de transporte, que se contrajo un 15,2%. En el caso de los primeros, las empresas del sector de obra pública, que se vio paralizada tras la asunción del nuevo gobierno, atravesaron la situación más difícil, tanto por la parálisis como por la complicación para conseguir insumos. En el caso de la fabricación de muebles, el precio de la madera “hace inviables los presupuestos que se pasan”.

Por otro lado, el sector más afectado fue el de Papel e Impresiones, con una merma del 24,6% interanual, y un descenso acumulado en los primeros dos meses del año del 26%. “Hubo un deterioro significativo en la cadena de pagos y más problemas para cobrarle al cliente. Eso, sumado a los incrementos en los costos operativos, deterioraron la rentabilidad de la actividad”, detalla el informe. Es que, en consonancia con la caída del consumo, se hizo aun más difícil el traslado a los precios del incremento en los costos.

A este sector lo siguió de cerca el de Químicos y Plásticos, que cayó un 23,1% anual, con lo que acumuló una baja de 31,2% en el primer bimestre, comparado con el mismo período del año pasado. Una de las dificultades que señalaron las empresas importadoras de estos productos fue la dificultad para cancelar deudas con el exterior. A pesar de esto, también estiman que la situación puede mejorar, ya que algunos comercios relevados aseguraron que se está estabilizando la entrega de materias primas, tanto nacionales como importadas, y que algunos precios están bajando.

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