La paralización del gobierno está asfixiando el comercio en EE.UU.
El cierre parcial del gobierno de Estados Unidos está comenzando a ahogar el comercio del país.
Todas las importaciones de pesticidas en EE.UU. han sido detenidas, según la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés), que tiene que aprobarlas pero en esto momento más de 90% de su plantilla se encuentra en vacaciones forzadas. Un creciente número de empresas estadounidenses de tecnología no pueden cumplir pedidos del exterior ya que no pueden recibir la autorización del Departamento del Comercio para exportar sus productos. Al mismo tiempo, las importaciones de acero están en depósitos de aduana en espera de cumplir los trámites correspondientes.
"Es un desastre", dijo Marianne Rowden, presidenta de la Asociación Estadounidense de Exportadores e Importadores.
Más de 40 agencias gubernamentales, incluyendo la EPA, el Departamento de Agricultura (USDA, por sus siglas en inglés) y el Departamento del Comercio, participan en los envíos comerciales y la mayoría tiene algún tipo de autoridad regulatoria sobre los mismos, afirmó Rowden. Catorce agencias tienen jurisdicción sobre las importaciones y exportaciones, agregó.
Sin embargo, mientras que la aduana tiene suficientes empleados durante el cierre parcial, muchas de las otras agencias han reducido su personal y suspendido sus sitios web.
No está claro cuán extensos son los problemas o cuántas industrias están siendo afectadas. Lo que es indiscutible es que el comercio es un motor cada vez más importante de la economía estadounidense de más de US$15 billones (millones de millones). El año pasado, las exportaciones estadounidenses aumentaron 4,4%, a US$2,196 billones y las importaciones crecieron 2,7% a US$2,736 billones.
El Departamento del Comercio estima que cerca de 10 millones de empleos estadounidenses están vinculados a las exportaciones.
Applied Materials Inc., uno de los mayores fabricantes de equipos para producir semiconductores, cree que la falta de aprobaciones rutinarias de exportaciones a raíz del cierre del gobierno podría afectar la habilidad de la empresa de enviar productos a ciertos mercados, apuntó su vocero, Kevin Winston. "Las solicitudes en proceso y futuras están en pausa", dijo.
El jueves pasado, un sitio web operado por una oficina del Departamento del Comercio de repente dejó de funcionar justo cuando Beth Peterson, presidenta de BPE Global, solicitaba aprobación de exportación para un cliente.
"Nos percatamos de inmediato" que la empresa enfrentaba un problema, dijo Peterson, cuya compañía asesora a importadores y exportadores sobre el cumplimiento de las regulaciones.
El sitio de la Oficina de Industria y Seguridad informó que ya no aceptará solicitudes para licencias de exportación ni realizará otros trámites similares.
El sitio es utilizado por exportadores de productos de alta tecnología sujetos a controles de exportación, particularmente los que tienen capacidad de codificación que podrían interferir con las medidas de inteligencia del gobierno. Asimismo, se requiere de licencias para exportar equipos usados en la fabricación de semiconductores, especialmente chips avanzados que puedan tener aplicaciones militares
Al mismo tiempo, la EPA ha dejado de aprobar la importación de pesticidas.
"Sin la revisión de la EPA y la aprobación de los formularios que demuestran que los pesticidas han sido debidamente registrados, los productos no podrán entrar a Estados Unidos", indicó en un correo electrónico Alisha Johnson, vocera de la agencia.
Los gastos anuales de EE.UU. en pesticidas llegan a unos US$12.000 millones, según la EPA.
Los problemas también han comenzado a afectar las importaciones de acero.
Lisa Goldenberg, presidenta de Delaware Steel Co., una distribuidora y operadora de acero de Pensilvania, dijo que el acero se está quedando en bodegas de las aduanas en Maryland y Nueva Jersey, en espera del permiso para ingresar al país.
En el estado de Alabama, un ejecutivo de transporte y almacenamiento dijo que no puede liberar una carga de madera destinada para fabricar muebles, ya que no logra encontrar a un inspector del USDA que certifique que no tiene insectos.
Betsy Morris, Don Clark y Mike Esterl