La omisión de Cristina disparó la acción

Al filo de las 15, luego de tres horas de discurso, Cristina Kirchner comentó que "finalmente" iba a hablar del tema Malvinas. Ya no había espacio para anunciar ninguna estatización. En esos dos minutos, la cotización de la acción de YPF pasó de 135 a 142 pesos.

Ese fue el centro de una jornada que mostró una fuerte recuperación en la cotización bursátil de la empresa que más factura en la Argentina. La acción cerró finalmente a $ 146, un 16,8% por encima del cierre anterior. De esta manera, la ausencia de medidas concretas contra YPF en el discurso presidencial permitió a los inversores recuperar casi la totalidad de lo perdido durante el jueves (había caído de $ 147 a $ 125), cuando crecían los rumores sobre una posible estatización o intervención en la petrolera.

Con 393.312.793 acciones emitidas, la suba de ayer equivale a una recuperación de la capitalización bursátil del orden de los 8260 millones de pesos (casi US$ 1900 millones) en una sola jornada.

De todos modos, la cotización sigue muy por debajo del pico alcanzado a fines de enero ($ 188,50 por acción). Desde ese momento, y en medio de una seguidilla de acciones y declaraciones del Gobierno en contra de YPF, el papel perdió el 22,5% de su valor, pese a la recuperación de ayer.

"Todavía es una acción que sigue fuertemente castigada -explicó el analista Gustavo Ber-. Hoy [por ayer] hubo una especie de alivio, pero los inversores todavía se muestran un poco incómodos respecto del plan de negocios y la relación con autoridades. La cotización actual refleja incertidumbre."

En Wall Street, la cotización de YPF recuperó ayer un 12,43% de su valor, pero sigue un 15% abajo del precio que tenía la acción cuando comenzó el año.

En parte, esta sensación de que todavía no ha culminado la pelea entre el Gobierno y la principal petrolera del país es compartida en el sector energético. Ayer, la empresa no quiso hacer comentarios (pese a que la Presidenta la mencionó directamente en su discurso) y puertas adentro estuvieron lejos de festejar.

"Vamos a tomar, como Poder Ejecutivo, todas las medidas que siempre hemos tomado para asegurar el abastecimiento a los argentinos de combustible", dijo la Presidenta, luego de mencionar la caída de la producción de YPF desde su privatización. Y anticipó su gobierno podría aplicar la ley de abastecimiento.

La amenaza de sanciones por el tema del desabastecimiento, si bien menor de lo que se esperaba, estuvo acompañada por otros anuncios de los gobiernos de provincias petroleras.

El gobernador de Chubut, Martín Buzzi, le dio a YPF un plazo de 7 días para que presente "un plan de trabajo convincente" en materia de producción de hidrocarburos, y le exigió que cumpla con sus "compromisos contractuales". A través de un comunicado, el mandatario -que también preside la Organización Federal de Estados Productores de Hidrocarburos- sostuvo que "la intimación por decreto es el paso previo a dar por terminadas las concesiones si la empresa no presenta un plan de trabajo convincente en los próximos siete días".

Si bien tiene relativamente pocos pozos en esa provincia, YPF opera los yacimientos de El Trébol-Escalante, Campamento Central-Bella Vista Este-Cañadón Perdido, donde "se detectó que la empresa no habría cumplido con obligaciones a su cargo", según el informe oficial.

También el gobernador de Santa Cruz, Daniel Peralta, fustigó a YPF y respaldó la política energética de la Nación. "Hay una involución en la actividad petrolera. Falta de inversión", dijo durante la apertura de sesiones de la legislatura provincial.

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