La jugada de los teléfonos celulares
Las operadoras ofrecen tentadoras promociones, anticipándose al ingreso de servicios más baratos.
Como si de un novio esquivo se tratara, aunque no quiera, el desprevenido transeúnte igual terminará firmando. Con batería de repuesto, estuche haciendo juego y la promesa de que todo, o casi todo, será gratis, no hay nada tan promocionado ni tan tentador en los últimos tiempos como acceder a un teléfono celular.
Viene incorporado al auto 0 kilómetro o con una entrada al circo de Moscú. Se puede comprar en los locales exclusivos, a la entrada de Paseo Alcorta, en Galerías Pacífico o en la góndola de los artículos de bazar de cualquier supermercado medianamente abastecido.
En casi todas las esquinas y a toda hora habrá un amable vendedor que, con la ansiedad de un cazador de mariposas, intentará convencer acerca de las ventajas que representa estar comunicado full time.
La estrategia para ampliar el mercado de las comunicaciones celulares pasa por demostrar que un teléfono es accesible a todo el mundo. Movicom y Miniphone, las operadoras de telefonía celular en el Area Metropolitana Buenos Aires (AMBA) sacaron toda su artillería a la calle.
Promociones gancho
La realización de promociones relámpago, presencia insistente en todos los puntos de venta -sean o no los canales tradicionales para la venta de telefonía celular, facilidades de pago, además del gancho que significa no pagar todas las llamadas entrantes, han acercado a ambas empresas y a sus marcas al público masivo.
Ser una persona celularmente conectada es fácil, lo difícil parece ser dejar de serlo. "Cuando uno quiere rescindir el contrato te dicen: "Todavía no venció, déselo a alguien".Yo lo convencí a mi hermano, si no hubiera tenido que seguir pagando aunque no lo usara. Me salía más caro pagar para que le den de baja. Nadie lee la letra chiquitita del contrato, pero lo que hacen es transferir al cliente el tema de la venta, así la empresa mantiene la línea en la calle", dice Patricio Campos, usuario de telefonía celular desde hace tres años.
"Yo pagué el aparato, la línea, el abono por mes. Ahora que lo regalan, por lo menos deberían darnos alguna bonificación a los que fuimos los primeros en usar celular y hacer las primeras inversiones. Por lo menos, que nos den más minutos libres", se queja.
El 14 de abril último, y con diez días de plazo para su puesta en marcha, la Secretaría de Comunicaciones aprobó el reglamento general de clientes de los servicios de comunicaciones móviles.
Entre otras cosas, se establece que a un usuario que decide rescindir el contrato, le corresponde pagar el 40 por ciento del monto de los abonos correspondientes a los meses que restan hasta el vencimiento acordado, pero nada más. Desde el mes de abril en que entró en vigencia el sistema "Calling Party Pays" (CPP), por el cual los usuarios de telefonía celular no pagan las llamadas que reciben, se ha incrementado la cantidad de clientes. También, paralelamente, las promociones y facilidades ofrecidas por las compañías para acceder a los teléfonos celulares.
Los presupuestos publicitarios de las dos compañías que operan en el AMBA oscilan entre los 5 y 7 millones al año. Con excelentes resultados, si se atiende a los datos recabados por la consultora Total Research.
En Buenos Aires, Tucumán, Mendoza, Córdoba y Rosario, 5 de cada 100 personas de más de 18 años poseen teléfono celular.
Sin embargo, el 61 por ciento de los argentinos está familiarizado con la marca genérica de este sistema de telefonía y se siente capacitado para opinar sobre él, lo que habla a las claras de la eficiente política de comunicación desarrollada por Movicom. Quien pega primero, pega dos veces, dice el refrán, y la compañía conformada por Bell South, Motorola y el grupo Macri supo imponer su marca como genérico al abrir el mercado.
La nueva competencia
La urgencia para vender más líneas tiene fecha: 13 deagosto, cuando se licite la banda que corresponde a Personal Communications Service (PCS), un celular de última generación.
Ese día comenzará otra etapa en la competencia, con nuevos jugadores. Aunque las actuales operadoras insisten en aclarar que no habrá sustanciales cambios tecnológicos, el elemento diferencial serán los nuevos precios que arrastrarán a los actuales.
Sin embargo, Oscar del Río, director de Operaciones de Miniphone, empresa que este año tiene presupuestado 7 millones de inversión en publicidad, no traduce este acoso sobre los clientes como una guerra de celulares, sino como "una política agresiva de ventas".
"La llegada de las PCS no nos quitará clientes sino que ampliará el mercado", dice Del Río. Para algunos analistas del negocio, las empresas de telefonía celular debieron desarrollar una intensa política comercial, no sólo para posicionarse frente a la pronta irrupción de las PCS, si no para soportar las pérdidas de tráfico que les ocasionó el Calling Party Pays.
Más morosos
Los analistas también observan que, indefectiblemente, el gran crecimiento en número de abonados que provocó el CPP, también disparó los índices de morosidad.
Consultado sobre este punto, Fernando Rebagliati, gerente de Comunicaciones de Movicom, señaló que "el índice de morosidad es una cifra marginal, ya que Movicom toma especiales recaudos en realizar una venta prolija, que da como resultado una base de clientes sana". Por su parte, Maximiliano Von Kesselstatt, director de Planeamiento Estratégico de CTI, afirmó que "desde que se instrumentó el Calling Party Pays, CTI incrementó un 85 por ciento el número de usuarios. Pero siempre nos cuidamos de brindar el mejor servicio y no aumentó el índice de morosidad. La industria sigue en crecimiento".
El verdadero costo de caer en la tentación
Cara y cruz: cada vez es más fácil tener un teléfono celular, pero siguen surgiendo sorpresas al solicitar el corte de línea.
A la hora de acceder al servicio de telefonía celular, los únicos privilegiados no son los niños, sino los que cuentan con tarjeta de crédito, ya que pueden obtener en el acto y sin cargo alguno un aparato Movicom y Miniphone, las dos operadoras del Area Metropolitana Buenos Aires, han instrumentado el sistema de contrato en comodato, por el cual, por medio de la tarjeta de crédito, el usuario recibe en préstamo el teléfono y sólo debe pagar el abono, seguro y gastos administrativos.
En Movicom, el contrato se extiende por 36 meses, y su costo total es de $ 54, que, obligatoriamente, se debitan en el resumen de la tarjeta. Incluye 120 minutos libres en horas no comerciales, que van desde las 21 hasta las 8, en días hábiles, y durante todo el día durante los sábados, domingos y feriados. Los minutos excedentes de ese máximo tienen un costo de 15 centavos más IVA, mientras que cada minuto en horas comerciales cuesta 45 centavos más IVA. No existen muchas diferencias con lo que ofrece Miniphone. El contrato comodato se extiende por 2 años y también es obligatorio abonar el servicio con la tarjeta de crédito en débito automático. Uno de los planes más solicitados es el Premio, cuyo valor total es de $ 26,5 mensuales, y no ofrece minutos libres. El nombre del plan se debe a que, si bien cada minuto cuesta 49 centavos más IVA, este valor desciende a medida que crece el consumo registrado.
Existen numerosas opciones para distintas modalidades de consumo, y algunas llegan a ofrecer 1000 minutos libres en cualquier horario.
Letra chica
Las sorpresas llegan cuando el cliente desea cortar el servicio antes de terminado el contrato en comodato. En cuanto a Movicom, si el usuario solicita el corte del servicio, debe abonar $ 220, más el 40% del consumo promedio multiplicado por la cantidad de meses que restan para la caducación del contrato. Sin embargo, existe un plan -denominado 0Km- por el cual aquellos que hayan adquirido un auto cero kilómetro desde el año 1993 en adelante, pueden obtener una unidad sin firmar contrato, y así desistir del servicio en cualquier momento.
En Miniphone, si el cliente desea abandonar el sistema antes de finalizado el primer año del contrato, debe abonar $ 266 por la desconexión, más el 40% del abono por la cantidad de meses que no se cumplirán del contrato. Si en cambio desea abandonar el servicio después del primer año, no debe abonar los 266 pesos.
Confusión
Esta es la información brindada por las casas centrales de ambas compañías. Sin embargo, al recorrer los stands en shoppings o en la vía pública surgen algunas diferencias entre los vendedores, según los cuales en ciertos casos el cliente no debe pagar nada por cortar su línea, mientras que otros aseguran que existen plazos mínimos para solicitarlo. En el contexto de esta agresiva campaña, se puede escuchar por parte de los vendedores que Miniphone factura las llamadas no concretadas (línea ocupada o sin respuesta), o que el servicio de Movicom es un 40% más caro que el de su competidora.
Esto justifica las quejas de quienes se acercan a los stands. "Todo tiene su trampa, uno queda enganchado, no te dicen todo", aseguró Juan, luego de consultar en un local de Movicom, en un shopping. "Te vuelven loco, parece que te lo regalan, pero después te llevás las sorpresas", se quejó Roberto luego de ser atendido por un vendedor de Miniphone en un puesto callejero.
Un empleado de la casa central de esta empresa explicó que "existe un vacío legal con respecto al corte del servicio. Nosotros informamos lo vigente hasta ahora, pero aún no está definido".
Alquilo o vendo
Otra opción son los alquileres, sobre los que las empresas no cobran tarifas por seguro. Alquilar una unidad con una línea de Miniphone cuesta $ 11 mensuales, a los que deben sumarse los gastos administrativos y el monto del abono elegido. El contrato es por 3 años, y si el usuario corta el servicio durante los dos primeros años, debe abonar lo mismo que en el caso de contrato en comodato. Pero si lo hace en el tercer año, el monto por la desconexión se reduce de $ 266 a $ 186, pero de todas formas debe pagar el 40% del abono no facturado por la empresa.
En Movicom, el costo del alquiler asciende a $ 7 más gastos. El monto final varía según el abono escogido y el contrato pactado es de 3 años. Si el cliente decide cortar el servicio, deberá abonar 220 pesos.
En los últimos meses ha crecido el número de compradores de teléfonos celulares, lo que permite evitar los costos por abandono del servicio.
En ambas compañías operadoras del servicio existen planes de hasta 24 cuotas sin interés para adquirirlos, y los precios van desde los 250 pesos en adelante.
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