La historia del fabricante de mochilas con plásticos de desechos que hoy se reunirá con Macri

"Una familia tipo genera un kilo de basura por día y el 50% es plástico", se puede leer en el reverso de una mochila Swahili, para tomar conciencia automática sobre la problemática de la sustentabilidad. Este es uno de los lemas de Iván Pavelic,el emprendedor que hace tres años creó un pequeño negocio de fabricación de fundas y mochilas, y hoy se reunirá con el presidente Mauricio Macri .

Iván tiene 27 años y vive en Gonnet, un barrio de la zona norte de La Plata. Estudia Sociología y Diseño industrial y ese paso por la universidad le dio el puntapié inicial para comenzar con el emprendimiento que lo mantiene en movimiento desde 2015. "Un día tenía que entregar una maqueta y se largó a llover. La tenía que cubrir con algo, así que encontré un banner de un político y lo use", contó a LA NACION.

La idea surgió primero para confeccionar fundas de surf y luego se amplió a mochilas, nécessaires y bolsas para supermercado. Iván puso un taller en el barrio Los Coquitos, en la zona de Melchor Romero, a 12 kilómetros de La Plata, donde se instalaron tres máquinas para el lavado, corte y confección de los productos. Las maquinas son rectas de doble arrastre, para el manejo de telas pesadas, que cuando llegan, se observan, se combinan y se bordan para hacer el producto final.

"Cambiamos lonas habituales por lonas de publicidad y bolsas de alimentos para perros", dijo Pavelic y explicó que esos elementos se consiguen a través de campañas de donación en veterinarias y organizaciones que quieran ofrecer sus banners en desuso. "En épocas de elecciones es divertido porque tenemos a todos los políticos en el taller", bromeó.

La comercialización de los productos empezó a través de las redes sociales Instagram y Facebook, en un local de ropa de La Plata y a través de venta directa – puerta a puerta.

El costo de una mochila es de $550, las bolsas para supermercado están $100 y cada producto lleva impreso un mensaje relacionado al cuidado ambiental. Por ejemplo, una funda para una tabla de surf tiene escrita la frase: "Del plástico que hoy usamos son arrojados a los océanos entre 6 y 8 toneladas por año".

El volumen de venta ronda en 500 bolsas por mes y 300 mochilas. "Trabajamos con pedido y un stock permanente: de lunes a viernes hacemos 15 mochilas, 100 bolsas, 50 nécessaires y 5 fundas de surf", afirmó Pavelic, quien está gestionando la certificación de su emprendimiento como Empresa B.

Dentro de los objetivos de economía sustentable, Swahili también busca generar inclusión laboral. Es por ello que junto a Ivan trabajan personas del barrio, que luego brindan talleres en escuelas y cárceles de la zona. "Somos cuatro en un taller: Uno cose, otro corta, una ecóloga y una diseñadora. Después damos talleres de oficio (de corte y confección) en colegios y cárceles", dijo. La primera vez que se acercaron a la Unidad Penitenciaria N°10, sólo tres internos se acercaron. Luego, se sumaron más de 25.

Para estos proyectos, la marca cuenta con embajadores que apoyan la iniciativa, entre los que se encuentran músicos, surfistas, artistas y emprendedores que acompañan en los talleres y las distintas campañas de recolección de materiales y difusión.

Esta práctica va en coincidencia con el significado del nombre, que hace referencia a un dialecto africano perteneciente a una comunidad que se mueve y produce en conjunto. "Nosotros tenemos mucho de eso porque trabajamos para el barrio, que es cerca pero está muy excluido", sostuvo.

El encuentro con Macri comenzó a gestarse el año pasado, cuando funcionarios de la Subsecretaria de Juventud del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación conocieron su taller durante una recorrida. Allí lo convocaron. "Me dijeron que iba a ser una charla. Voy a ir a contarle mi proyecto y las necesidades que tenemos. Me gustaría dar más trabajo para el barrio", dijo y agregó: "Pensé que voy en representación de esa gente, así que lo voy a invitar a Macri a que vaya al taller".

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