La empresa ratificó el cierre y comenzó a importar desde Chile
Aseguran que la importación será "temporal"; PepsiCo facturó el año pasado $ 4800 millones en el país; en un comunicado lamentó que hubiera personas heridas
El cierre de la planta de la empresa PepsiCo , en Florida (Vicente López), desató la protesta de sus empleados que terminaron tomando la fábrica y fueron desalojados por la policía. Mientras tanto la compañía, líder en snacks, sigue con su actividad y empezó a importar productos desde Chile para compensar la merma en la producción local.
Según fuentes del sector, PepsiCo importa papas fritas, palitos, chizitos, nachos y otros snacks chilenos por un volumen equivalente al 5% de su fabricación mensual en la Argentina. "Son productos de vencimiento corto. Es algo temporal y puntual hasta que se estabilice la situación", aclaran fuentes cercanas a la empresa que, según sus datos, exporta el 25% de su producción local.
"No está dentro de los planes de la compañía la sustitución de producción nacional por importaciones", sostuvo la empresa en un comunicado oficial, difundido hoy tras el desalojo de la planta y los enfrentamientos entre trabajadores y la policía.
Además de su planta en Florida, PepsiCo tiene otro establecimiento productivo en Mar del Plata, donde anunció que relocalizará parte de la actividad que realizaba en la cerrada fábrica del norte del conurbano. Allí fabrican snacks (nachos, papas fritas) y galletitas con chips y otras variedades de la marca Toddy.
A su vez, la empresa tiene otro establecimiento en Barracas, donde elabora la línea de productos de la marca Quaker, y otra operación en La Rioja, especializada en la producción de polvos chocolatados.
Por otra parte, en marzo de 2017, la empresa le vendió a Tía Maruca la planta Dilexis, un establecimiento en San Juan donde se fabrican algunas variedades de las galletitas Toddy y otras galletas. Como parte de la operación, la multinacional cedió a la compañía fundada por Alejandro Ripani las marcas Argentinas, Dale y Pindy, y al mismo tiempo acordó que esta firma continúe fabricando las Toddy -siguen en manos de PepsiCo- por un lapso de tres años.
En el país, PepsiCo Alimentos está activa desde 1993. Esta compañía comprende marcas como Lay's, Pep, Cheetos, Doritos, Twistos, Pehuamar, 3D's, Bun, Tostitos, Pop Korn, Quaker, Toddy y Zucoa, entre otras, y controla cerca del 80% del mercado de los snacks.
Su avance se consolidó en la década del 90, con un agresivo proceso de compra de compañías, que incluyó la adquisición de la marplatense Pehuamar, de la marca Bun y la rama de snacks de Kellogg's.
El año pasado, PepsiCo facturó $ 4800 millones en la Argentina, según datos difundidos por Mercado, con un incremento nominal del 26% frente a 2015, es decir, por debajo de la inflación.
En tanto, el negocio de las gaseosas en la Argentina no está en manos de PepsiCo. Se trata de una licencia para fabricar y distribuir los productos de las marcas Pepsi, 7Up, Mirinda, Paso de los Toros, H2Oh, Gatorade y Tropicana, que ahora pertenece al grupo Quilmes.
A nivel global, PepsiCo facturó US$ 62.799 millones en 2016, según su último balance. Dentro de su negocio, América latina representó un 10,9% (US$ 6820 millones). En tanto, las ganancias mundiales de la compañía el año pasado fueron de US$ 6329 millones.
Luego del conflicto, tras el cual algunos trabajadores resultaron heridos, desde la compañía emitieron un comunicado en el que expresan lamentar los hechos y ratifican la decisión de cerrar la fábrica.
"Lamentamos profundamente que algunas personas hayan resultado heridas. PepsiCo respeta la ley y las decisiones tomadas por el fiscal y la jueza con respecto a un pequeño grupo que ilegalmente ocupaba nuestra planta", expresaron.