La empresa de Galuccio se quedó con los activos de Sinopec en el país, tras una oferta de US$ 600 millones
Fuentes del mercado confirmaron la operación; se impuso a YPF, a Pluspetrol y a Madalena Energy; resta la aprobación legal de la compra
La petrolera Vista Oil & Gas , creada en marzo pasado por el ex CEO de YPF Miguel Galuccio y que tiene su base de operaciones en México, ganó la concursa para quedarse con los activos argentinos de la china Sinopec y ahora solo restan detalles legales para que se concrete la compra. Según fuentes del mercado la oferta rondó los 600 millones de dólares.
Sinopec había hecho público su interés de vender sus activos en el país. Los altos costos operativos en Santa Cruz- aseguraban en la empresa- eran mayores que los exhibidos por otros mercados internacionales. Por lo bajo, culpaban a los gremios al señalar que para un trabajo de seis personas, por ejemplo, se veían obligados a contratar más del doble.
Vista Oil & Gas se impuso a la petrolera estatal YPF, que ofreció un Swap para hacerse de la empresa, a Pluspetrol y a la canadiense Madalena Energy que se presentó junto al grupo argentino Werthein. “Fue el que más fuerte jugó”, resumieron quienes siguieron la operación.
La empresa liderada por Galuccio es una “Special Purpose Acquisition Company", lo que en la jerga se conoce como SPAC, por lo que no cuenta con operaciones ni activos iniciales. Por eso recurrió a la Bolsa de valores de México, en agosto pasado, y consiguió en la oferta pública inicial (OPI) una recaudación de 650 millones de dólares, 30% más de lo proyectado inicialmente.
Fuentes del mercado recordaron que en un período de 24 meses la compañía petrolera debe completar la adquisición de una empresa o una fusión, paso que busca completar con la adquisición del 100% de Sinopec en la Argentina.
“Ayer la petrolera china informó a las empresas interesadas que Vista Oil & Gas sería quien la compre. En los próximos meses la transacción se completaría y mientras tanto se abre un período de exclusividad y de discusión contractual de los detalles finos”, resumieron las fuentes que siguieron de cerca la venta.
El monto de la transacción es muy inferior a los US$2450 millones que Sinopec pagó en 2010 por comprar los activos argentinos de la estadounidense Occidental Petroleum Corp., una estrategia que en ese momento marcó un agresivo plan para diversificar sus fuentes de crudo. Por entonces China -el segundo consumidor mundial de crudo- buscaba recursos naturales para alimentar su despegue económico.
La compañía creada por Galuccio busca tener operaciones además de en la Argentina, en México, Colombia y Brasil y hacia allí apuntarían futuras adquisiciones o fusiones. Para completar su proyecto, el ex CEO de YPF tiene a varios hombres de su confianza en el equipo ejecutivo, que también tuvieron un paso por la petrolera estatal argentina.
La empresa está respaldada por Riverstone, uno de los mayores fondos de inversión del sector energético a nivel mundial. Desde su creación en el año 2000, comprometió 35 mil millones de dólares en más de 130 transacciones en once países y levantó 36 mil millones de capital a través de nueve fondos privados.
“Nuestra estrategia de creación de valor consiste en identificar, adquirir, y luego de consumar nuestra combinación inicial de negocios, desarrollar y operar una empresa pública líder en el sector de exploración y producción de petróleo y gas en Latinoamérica", explicó la empresa en su último borrador de prospecto de colocación de acciones, como parte de su solitud de listado para cotizar en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).
Sinopec es el cuarto productor de petróleo de la Argentina y contrató al banco de Escocia Scotia Waterous para vender sus activos que se concentran mayormente en Santa Cruz, donde tiene 15 áreas petroleras. En el país tiene 400 empleados contratados de manera directa y 3500 de forma indirecta. Consultado al respecto de la operación por LA NACION, en la petrolera dijeron que no harían comentarios.
En enero de este año Sinopec había anunciado una inversión de US$ 300 millones para elevar su producción de petróleo y gas en la zona norte de la provincia de Santa Cruz. “Tenemos muy buenas perspectivas para 2017 en un contexto donde la crisis del precio del petróleo y la intención del Gobierno nacional de llevar su valor a precios internacionales hace que todas las empresas del sector tengan que reajustarse y rever sus planes", sostuvieron entonces. Los tiempos cambian, a veces, rápidamente.