La carrera por liderar la Fed está encabezada por Summers y Yellen
La carrera para convertirse en el próximo líder de la Reserva Federal se parece cada vez más a una competencia entre dos economistas: Lawrence Summers y Janet Yellen.
Summers pertenece al círculo interno del gobierno de Barack Obama. Estuvo al lado del presidente de Estados Unidos durante la crisis financiera de 2009 y se mantiene en contacto con él y sus principales asesores.
Debido a que es conocido en la Casa Blanca, Obama podría sentirse más cómodo eligiéndolo.
Yellen, vicepresidenta de la Fed, ha trabajado de cerca con el actual titular, Ben Bernanke, formulando programas de estímulo durante los últimos tres años y participó en las decisiones de política monetaria del banco central durante la peor parte de la crisis financiera.
Debido a que es bien conocida al interior de la Fed, la institución podría sentirse más cómoda con ella. Asimismo, tendría el respaldo de algunos senadores demócratas, que han estado circulando una carta en la que piden a Obama que nomine a Yellen.
Desde hace meses, observadores han considerado a Yellen, de 66 años, como la favorita para reemplazar a Bernanke, cuyo mandato termina en enero. Pero durante las últimas semanas ha quedado claro que en la Casa Blanca se considera que Summers, de 58 años, es un rival serio, según comentarios de ex y actuales funcionarios.
Ambos son economistas con doctorados —Summers de Harvard y Yelen de Yale— y con orientación política de centroizquierda. Ambos trabajaron para el gobierno de Bill Clinton, cuando la economía de EE.UU. estaba en auge. Ambos son conocidos por sus arraigadas opiniones que no tienen problema en defender públicamente y los dos probablemente pondrán mucho énfasis en reducir el desempleo en un ambiente de inflación baja.
Obama ha visto de cerca lo importante que es el líder de la Fed durante una crisis financiera global y podría elegir a Summers si lo ve como un gestor de crisis con más experiencia y mayor perfil, además de cierta experiencia con los mercados financieros.
Yellen ha pasado buena parte de su carrera en la Fed. Fue miembro de la junta de la Fed en Washington durante los años 90, cuando era dirigida por Alan Greenspan. También fue presidenta del Banco de la Fed de San Francisco en la década pasada y desde 2010 ha sido la lugarteniente de Bernanke. Yellen conoce bien las políticas poco convencionales que la Fed ha adop-tado tras la crisis financiera y la recesión. También está familiarizada con el peculiar funcionamiento interno del banco central.
Si Obama desea un funcionario que pueda dirigir la entidad a través de lo que podría ser una transición desestabilizadora, po-dría elegir a Yellen. También podría verse en los mercados como una continuación de las políticas de Bernanke, las cuales tienen el beneficio de reducir la incertidumbre de los inversionistas sobre la dirección de las tasas de interés. La perspectiva de Summers sobre la política monetaria es mucho menos conocida en los mercados.
Ambos candidatos tienen manchas en sus carreras que serían sacadas a la luz en sus audiencias de confirmación. Summers fue un defensor de la desregulación financiera antes de la crisis y fue obligado a dejar la presidencia de Harvard en 2006 tras hacer comentarios controversiales sobre las mujeres. Todo eso podría afectarlo con la base de centroizquierda de Obama y atraería más ataques durante su audiencia de confirmación.
Yellen es una defensora de las políticas expansivas de la Fed, lo que hace que algunas personas en Washington y los mercados financieros cuestionen su determinación a la hora de combatir la inflación cuando sea necesario.
Yellen y Summers se abstuvieron de hacer comentarios.