Renault condiciona la incorporación de 500 empleados en Córdoba a que le dejen importar más
La terminal pasaría de producir 220 unidades diarias a 340 en setiembre. Viene haciendo gestiones ante el Gobierno. Para 2022 pide unos US$50 millones más de cupo para autopartes.
- 5 minutos de lectura'
CÓRDOBA.- Renault Argentina tiene buenas perspectivas de producción para su planta cordobesa de Santa Isabel, pero están condicionadas por las posibilidades de importación de partes. El presidente de la automotriz, Pablo Sibilla, se reunió con el gobernador Juan Schiaretti y le planteó que a partir de setiembre podría incorporar 500 trabajadores directos, a la vez que su red de proveedores sumaría igual número de nuevos empleados.
El ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, visitó ayer la fábrica de Toyota Argentina, en Zárate, y aprovechó para insistir en que no hay problemas con las importaciones: “Más del 95% de los sectores productivos importaron sin inconvenientes”. Dijo que hubo “algunos problemas asociados a la pandemia, otros asociados a una economía que tiene problemas en el sector externo, no de ahora sino desde hace cuatro años. No hay un problemas generalizado”.
Las automotrices tienen cupos asignados para la importación de vehículos terminados y de piezas; los de este año son similares o menores a los de 2020, y con una mejora en las ventas reclaman un aumento de la disponibilidad de importaciones para producir más.
Si se autoriza el ingreso de insumos importados para la producción de autos, la planta de Santa Isabel podría avanzar en un segundo turno de trabajo; se pasaría así de 220 unidades por día a 340 en setiembre. Son varias las partes que vienen desde el exterior.
En diálogo con LA NACION, Sibilla indica que hace unos dos meses comenzaron con las primeras charlas con el Gobierno sobre este tema: “En el contexto de cómo fue 2020, es una excelente noticia que se pueda producir más. Queremos aumentar el volumen de fabricación de vehículos nacionales, donde somos un actor privilegiado con seis modelos hechos en la Argentina; la mitad de nuestras ventas son nacionales y queremos producir más, pero parte de nuestros componentes son importados y para que crezca el nivel de producción necesitamos certidumbre sobre que tendremos los insumos necesarios”.
El ejecutivo explica que hubo una fuerte reducción de los cupos para vehículos terminados y que para autopartes este año la suba tendría un impacto menor porque se arrancaría en setiembre. Estima que para 2022 serían unos US$50 millones adicionales a lo ya asignado. “Tenemos la capacidad de producir más y todo es un círculo virtuoso porque podemos ofrecer esta solución, generar más empleo, sumar proveedores. Para el Gobierno, más producción también es más recaudación”.
La integración nacional de los vehículos de Renault es de alrededor del 30% en la pickup Alaskan y algo por arriba del 20% en el Kangoo: “El flujo de vehículos es superavitario, el déficit está en los componentes, por eso es clave desarrollar proveedores fuertes y competitivos”, apunta Sibilla, y cuenta que la empresa le presentó al gobierno nacional un programa para aumentar la intengración del Kangoo y recuperar herramentales.
En esa línea, elogia el Programa Nacional de Desarrollo de Proveedores, que otorga un subsidio no reembolsable. “Funcionó muy bien el año pasado y pedimos que se repitiera con más recursos; lo están por lanzar nuevamente”, dice.
Desde la Asociación de Fábricas de Automotores (Adefa) también hace tiempo se viene planteando la necesidad de ampliar la disponibilidad de dólares para importaciones. Las restricciones del mercado de divisas explican las disposiciones del Gobierno.
En los últimos días, en varios sectores industriales coincidieron en que hay “reticencia” por parte del Gobierno para aumentar los cupos de importación, aun cuando esa decisión pueda impactar negativamente en los niveles de producción. La Unión Industrial Argentina (UIA) alertó que esas trabas para ingresar insumos ya generan problemas en la actividad manufacturera.
Ramón Ramírez, tesorero de la Cámara de Industriales Metalúrgicos de Córdoba, planteó a este diario que el sector automotor tiene, en general, un componente nacional “bajo”. Toyota, con algo más del 45%, es la terminal mejor posicionada. “Varios autopartistas están con problemas para importar componentes, con lo que afecta su producción y la de las automotrices, complicando a toda la cadena valor”.
Además, mencionó que siguen los problemas de pago de operaciones anteriores a junio pasado, operaciones que se hicieron bajo un régimen especial. La circular se prorrogó hasta el 31 de diciembre y eso genera complejidades en las relaciones con los proveedores del exterior.
Eduardo Accastello, ministro de Industria de Córdoba, quien estuvo en la reunión con los ejecutivos de Renault, dice que fue “positiva porque marca la potencialidad que está teniendo la industria automotriz cordobesa y del país, después de la etapa pandémica”. La provincia se comprometió a brindar capacitación a la red de proveedores para que aumente la participación de partes nacionales.
Sibilla confirma que parte del diálogo con los funcionarios cordobeses se centró en el apoyo también a los proveedores: “La provincia subvenciona la formación de nuevos operadores que ingresan a la planta, pedimos que lo extendiera a los autopartistas y lo aceptó”
Otras noticias de Córdoba
- 1
PAMI: 10 preguntas y respuestas sobre el cambio en la cobertura de medicamentos
- 2
Giorgia Meloni, el Papa Francisco, un gobernador peronista y un “ídolo” libertario: el podio de quienes le hicieron regalos a Javier Milei
- 3
Real hoy: a cuánto cotiza la moneda brasilera oficial y blue este viernes 20 de diciembre
- 4
Premio: un reconocido toro Angus argentino se coronó subcampeón del mundo