Fujitsu y el reto de sobrellevar las múltiples crisis de Japón
El brutal terremoto que azotó a Japón el 11 de marzo ha dejado a decenas de miles de muertos o desaparecidos.
El sismo y el tsunami no solamente interrumpieron las comunicaciones y los sistemas de transporte, sino que dañaron seriamente una central de generación nuclear en el noreste de Japón, donde el peor desastre atómico desde Chernobyl, en 1986, aún no concluye.
Masami Yamamoto, de 57 años, tiene la misión de guiar a Fujitsu Ltd. ante este desafío, casi exactamente un año después de asumir la presidencia del grupo tecnológico al que se incorporó hace 35 años.
Fujitsu, que fabrica computadoras, chips y brinda servicios de tecnología de la información, es una de las numerosas compañías japonesas que sufrió daños en sus instalaciones. Los consiguientes problemas de energía afectaron a nueve de sus plantas. Pero el lunes todas habían vuelto a operar, al menos parcialmente. En una entrevista en Tokio, Yamamoto habló de cómo la empresa afronta la crisis.
WSJ: ¿Dónde estaba cuando ocurrió el terremoto?
Yamamoto: Estaba en Australia en medio de una reunión con nuestro equipo local cuando me llamó mi secretaria desde Tokio. Intenté regresar a Japón inmediatamente, pero no había un vuelo directo disponible.
Así que tuve que viajar a Singapur y luego a Tokio. En Fujitsu utilizamos teléfonos móviles satelitales, por lo que en Australia no tuve problemas para comunicarme con nuestra gente en Japón. De todos modos, la información inicial fue limitada y no fue posible captar inmediatamente el impacto...
WSJ: ¿Cómo ha enfrentado la crisis Fujitsu?
Yamamoto: Debido a que hubo otros grandes terremotos en el norte de Japón en los últimos años, Fujitsu estaba relativamente bien preparada.
El primer paso fue asegurarnos que todos los empleados estuvieran sanos y salvos. Seguimos procedimientos internos de emergencia para cerciorarnos de su situación.
Tras confirmar el estado de la mayoría de los empleados, comenzamos a ver las condiciones en las que habían quedado nuestras plantas en la zona golpeada por el terremoto... Para los sismos y otras situaciones inusuales, Fujitsu tiene planes de contingencia... Si tenemos que cerrar una planta, por ejemplo, sabemos exactamente a dónde trasladar su producción. Por eso no demoró mucho tomar la decisión de traspasar parte de nuestra producción de computadoras personales de la prefectura de Fukushima a la de Shimane. Pero aun cuando la decisión fue rápida, debido a que el sismo dañó la logística y causó una escasez de gasolina, el cambio real de la producción resultó más difícil y requirió más tiempo.
WSJ: ¿Cómo se ha comunicado con los empleados desde el terremoto?
Yamamoto: Normalmente envío un correo electrónico a todos los empleados una vez por semana. Pero desde el terremoto lo he estado haciendo cada dos días. En cada mensaje habló de cosas específicas que tienen que ver con los acontecimientos del día y de lo que Fujitsu está haciendo para afrontar la crisis.
Y muchos trabajadores me han enviado ideas y propuestas...
WSJ: ¿Cuál es el principal desafío de las empresas japonesas?
Yamamoto: La recuperación inicial del daño físico causado por el terremoto será bastante rápida. Pero el mayor reto es la esperada escasez en el suministro de energía. Japón debería asegurar el suministro para la gente en las zonas afectadas por el sismo para ayudar a mejorar sus condiciones de vida. La siguiente prioridad sería el suministro a las empresas. Si la producción industrial sigue débil, surgirán el desempleo y otros problemas sociales.
Eso retrasaría seriamente la recuperación. La tercera prioridad deberían ser los hogares en las regiones no afectadas. Sé que poner a las compañías primero molestará a mucha gente, pero una recuperación de las industrias es esencial para asegurar el empleo...
WSJ: ¿Cómo afectará la crisis el entorno global de negocios?
Yamamoto: Lo que está ocurriendo hoy puede tener un impacto duradero en la cadena global de suministros. Si ciertos productos dependían mucho de Japón, las compañías podrían reconsiderar su dependencia y comenzar a diversificar sus suministros. Pero otras partes del mundo tampoco están exentas de riesgo. La diversificación de los riesgos será un tema fundamental...
WSJ: ¿Cuál es su percepción del accidente de la planta nuclear de Fukushima?
Yamamoto: Tenemos que dejar a los expertos lidiar con los problemas. No es útil que los funcionarios del gobierno u otras personas de afuera que no entienden realmente la tecnología den sus opiniones y se involucren. El gobierno debe concentrarse en lo que puede hacer, como minimizar los riesgos de la contaminación radioactiva para los productos japoneses.
WSJ: ¿Qué ha aprendido de la crisis?
Yamamoto: Es demasiado pronto para mirar atrás... Por ahora... tengo que proteger los negocios de Fujitsu de posibles daños y pensar sobre lo que puede hacer la compañía para ayudar a la recuperación de Japón.