La nueva gestión de la empresa de criptomonedas y los deudores emitieron un comunicado conjunto en el que solicitaron que los beneficiarios del joven exCEO retornen el capital donado antes del 28 de febrero
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FTX, la empresa estadounidense de criptomonedas que quebró tras un escándalo que involucra denuncias de estafa, requirió a los políticos y a quienes recibieron donaciones durante la gestión de Sam Bankman-Fried que devuelvan el dinero. El joven exCEO solía hacer contribuciones a personalidades de distintos distritos y partidos, con especial vínculo con el sector demócrata, de acuerdo con las operaciones que trascendieron desde su caída.
Ayer, a través de un comunicado, la empresa -que intensifica la búsqueda de los “capitales perdidos” bajo la nueva gestión de John J. Ray III- dijo que enviará “cartas confidenciales” a los beneficiarios para que recompongan el capital antes de que la compañía los lleve a la justicia. De esta manera, uno de los incentivos es que podrían preservar su identidad.
Según las estimaciones difundidas por distintos deudores en redes sociales, el dinero donado a distintas personas ascendería a un monto total de US$93 millones. La empresa, sin embargo, no puntualizó de cuánto se trata. De acuerdo con un informe del portal especializado Coindesk, uno de cada tres miembros del actual Congreso de Estados Unidos había recibido una contribución de Bankman-Fried.
“FTX Trading Ltd. y sus deudores afiliados (conjuntamente, los “deudores de FTX”) han anunciado que los deudores de FTX están enviando mensajes confidenciales a figuras políticas, fondos de acción política y otros receptores de contribuciones u otros pagos que fueron realizados por o bajo la dirección de Samuel Bankman-Fried u otros oficiales o directores”, detalló el comunicado.
FTX puso una fecha límite: solicitó que lo hagan antes del 28 de febrero de 2023. El 19 de diciembre de 2022, la empresa estableció acuerdos para que dichos receptores devuelvan los fondos voluntariamente. “En la medida en que dichos pagos no sean devueltos voluntariamente, los deudores FTX se reservan el derecho de iniciar acciones ante el Tribunal de Quiebras para exigir la devolución de dichos pagos, con intereses devengados desde la fecha en que se inicie cualquier acción”, continuó la carta.
Mientras tanto, Bankman-Fried se enfrenta a un proceso con múltiples cargos. Los fiscales federales en Nueva York acusaron al exCEO de usar ilegalmente los depósitos de los clientes de FTX para financiar su otra firma de criptomonedas, Alameda Research, comprar propiedades y gastar millones de dólares en donaciones políticas.
En diciembre el emprendedor salió en libertad bajo fianza y continúa bajo arresto domiciliario mientras espera el juicio en EE.UU. por la presunta estafa millonaria que habría cometido a través de su compañía. Un juez estadounidense dictaminó que el exmultimillonario de 30 años podría permanecer bajo arresto domiciliario con sus padres, que pusieron su casa de California como garantía de la fianza de US$250 millones establecida por el magistrado.
FTX se declaró en bancarrota en noviembre, dejando a miles de sus clientes sin la posibilidad de retirar sus inversiones. En su mejor momento, Bankman-Fried fue visto como una versión joven del legendario inversionista estadounidense Warren Buffet.
Hasta fines de octubre tenía un patrimonio neto estimado en más de US$15.000 millones. Bankman-Fried renunció como director general de FTX el 11 de noviembre. Según documentos judiciales presentados a principios de este mes, FTX actualmente les debe a sus 50 mayores acreedores casi US$3100 millones.
Con información de EFE y del sitio Coindesk
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