Florencia Castleton: “Hay oportunidades para los que se animan a un cambio”

"Hay expectativas de contratación para este año, pero con moderación." Esa afirmación resume el análisis que realiza Florencia Castleton sobre la incorporación de empleados en la industria petroquímica durante este año. Como directora de Recursos Humanos de Dow Argentina, con responsabilidades en la región sur de América latina, desde hace un año tiene a cargo el desafío de reclutar profesionales para la compañía y generar estrategias para retenerlos.

La directiva admite que la empresa busca –sobre todo– ingenieros industriales, químicos y agrónomos. Y ahí viene el problema. Según la ejecutiva, la falta de ingenieros recibidos es una gran problemática, por lo que, para atraerlos, la compañía debe ofrecer un amplio paquete de beneficios.

–¿Cómo observa el mercado laboral en la actualidad?

Varía según la industria y la zona geográfica donde nos ubiquemos. Ahora estamos en un momento moderado. Para Buenos Aires, por ejemplo, 2014 no fue un año con enormes expectativas de contratación, aunque esperamos que el mercado se reactive este año. Sin embargo hay oportunidades para aquellos que se animan al cambio. Un buen destino es la Patagonia. Allí hay una gran expectativa de contratación por parte de la industria petrolera que se ocupa de la exploración y perforación. Buscan jóvenes que estén dispuestos a mudarse al interior.

–¿Están contratando empleados nuevos en este momento?

–Sí, estamos contratando y lo vamos a seguir haciendo, aunque con moderación. Siempre observamos lo que pasa en el mercado para tomar decisiones. Las contrataciones dependen además del tipo de negocio. Dow es una compañía con una enorme cantidad de productos, por lo que la velocidad de crecimiento y desarrollo de cada una de esas partes es distinta. Hoy tenemos dos grandes focos de contratación: el negocio del packaging y la venta de polietileno, y el agropecuario. Además esperamos un crecimiento en la industria del shale.

–¿Qué perfiles buscan?

–Generalmente contratamos ingenieros industriales, químicos y agrónomos, incluso para actividades que no son excluyentes para esa profesión, como la manufactura y las cadenas de suministros. Pero también somos flexibles y salimos de ese perfil. Nos interesa que la persona sea curiosa, que se quiera autocultivar, que sea determinada a la hora de lograr sus objetivos. Si alguien cumple con esas condiciones tiene las puertas abiertas en la empresa. De hecho, nuestro presidente general [Gastón Remy] es abogado. Es parte de la diversidad que fomentamos.

–¿Les cuesta encontrar ingenieros en el mercado?

–Hacemos mucho para no tener escasez de ingenieros, pero el problema existe. La proporción de graduados con respecto a la de otras carreras siempre es menor. Los de especialidades técnicas o de ciencias exactas son los más difíciles de encontrar. Pero Dow es un excelente empleador y ofrece un paquete de beneficios atractivo en el marcado, así que eso ayuda para atraerlos. También tenemos un programa de jóvenes profesionales, participamos en ferias, tenemos contacto con las universidades. Por ejemplo, en Bahía Blanca, que es nuestro polo más importante, tenemos un contacto muy fluido con las universidades locales. Queremos fortalecer nuestros lazos con las escuelas técnicas para nutrirnos de empleados.

–¿Cómo hacen para atraer y retener a estos profesionales?

–Para retenerlos ofrecemos un paquete de beneficios amplio, como intercambios internacionales para los más jóvenes. Además buscamos trabajar por proyecto. Así nos corremos de la estructura jerárquica tradicional para orientarnos a una más celular. También incorporamos ideas de afuera para poder mejorar.

–¿Qué es el programa reverse mentoring que aplican?

–La idea surgió hace algunos años. Inicialmente fue un taller para que los líderes conozcan cómo piensan los profesionales jóvenes. Pero luego tuvimos un encuentro de líderes de América latina, y ahí apareció la necesidad de una integración de la diversidad generacional, sobre todo considerando que el 35% de los empleados de Dow Argentina tiene menos de 33 años. Eso nos planteó un desafío y empezamos a pensar ideas. Así surgió el proyecto en el que un grupo de 15 chicos mentoreó a otro de líderes, entre los que estaban el presidente de la región. El programa duró cuatro meses y el resultado superó las expectativas. Las dos partes pudieron entender el pensamiento del otro y muchos mantienen hoy una relación. Por eso vamos a replicarlo este año.

–¿En qué consiste el programa de diversidad de Dow?

–Intentamos que los empleadores de la compañía sean un reflejo de nuestra sociedad. Si se incluyen más miradas surgen mejores ideas. Por eso tenemos un programa de mentoring para mujeres que se propone potenciar sus carreras, entro otros planes.

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