Fiat no encuentra socios para su propuesta de consolidación automotriz
TURÍN, Italia—El presidente de la junta directiva de Fiat Chrysler Automobiles NV, la menos rentable de las principales automotrices en Estados Unidos, afirmó que su empresa contactó a General Motors Co. y otras compañías para instarlas a realizar una consolidación en esa industria.
John Elkann, presidente del directorio y un heredero de la familia Agnelli que fundó Fiat hace más de un siglo, confirmó los acercamientos en una conferencia de prensa en esta ciudad italiana tras la asamblea anual del holding familiar. Sus declaraciones reforzaron las del presidente ejecutivo de Fiat Chrysler, quien durante meses ha estado instando públicamente a prestarle una renovada atención al exceso de capacidad en la industria automotriz.
"El email a General Motors no fue el único", dijo Elkann en respuesta a un artículo de The New York Times de la semana pasada según el cual el presidente ejecutivo de la empresa le había escrito en marzo a su par de GM, Mary Barra, para proponer una alianza. "No es una sola conversación", dijo Elkann.
El ejecutivo no dio detalles sobre la amplitud o el contenido de la iniciativa del séptimo mayor fabricante mundial de autos. Sergio Marchionne, presidente ejecutivo de Fiat Chrysler, lleva meses argumentando que el exceso de producción —en especial en Europa— y los costos duplicados en ingeniería y otros rubros, requieren una nueva mirada a la consolidación para impulsar la rentabilidad. Un vocero de GM no confirmó si Barra recibió un email de Marchionne, y dijo que la empresa con sede en Detroit no está interesada en una alianza.
Además de GM, Ford Motor Co. y Toyota Motor Corp. han rechazado los intentos de Marchionne de hablar sobre una posible consolidación.
Marchionne sugirió el mes pasado que el bajo rendimiento sobre el capital debería ser solucionado con fusiones. Las grandes automotrices, sostuvo, reportaron en conjunto un retorno de 7,8% sobre el capital en 2014, comparado con 10% para el sector de petróleo y gas, 16% para el aeroespacial y de defensa y 19% para las industrias farmacéuticas.
"El alcance total de la consolidación, si se ejecuta adecuadamente, curará todas las dolencias", señaló en ese momento. "Pero hay que concretar la iniciativa".
Analistas señalan que las débiles ganancias de Fiat Chrysler la convierten en un socio poco atractivo. Su margen operativo en América del Norte fue de 3,7% de las ventas en el primer trimestre, la mitad de las de GM. La alemana Volkswagen AG y la japonesa Toyota, las dos mayores fabricantes del mundo, obtuvieron ganancias netas alrededor de 30 veces más altas que las de Fiat Chrysler en sus reportes más recientes.
En EE.UU., las ventas, ganancias y participación de mercado de Fiat Chrysler han estado en crecimiento desde que Marchion-ne combinó exitosamente ambas empresas.
Sin embargo, el auge en América del Norte podría estar llegando a su techo, señalan analistas. Creen que Marchionne está bus-cando una solución antes de que sus márgenes ya magros se reduzcan más o simplemente desaparezcan.
El año pasado, Fiat Chrysler, la única de las grandes automotrices que tiene deuda neta, pagó casi 2.000 millones de euros (US$2.190 millones) en intereses y otros gastos financieros, lo suficiente para financiar el desarrollo de por lo menos dos modelos nuevos de autos.
No está claro si alguna automotriz ha acordado mantener conversaciones con Fiat Chrysler, y los analistas señalan que no les resulta fácil identificar un candidato apropiado para una fusión.
Ejecutivos de la industria han dicho públicamente que creen que pueden sacar más jugo a colaboraciones en proyectos específicos, como desarrollar en conjunto motores y sistemas de transmisión, que a fusiones como las que propone Marchionne, las cuales pueden ser problemáticas y absorber mucho capital.
El presidente del directorio de Ford, Bill Ford, dijo en mayo que los argumentos para una consolidación en el sector no son nuevos. En los años 80, la opinión que prevalecía entre las automotrices era que en los siguientes 10 años habría sólo seis empresas en el rubro: dos estadounidenses, dos europeas y dos japonesas, sostuvo.
"Todos pensaban que esta industria se encaminaba claramente a eso", dijo Ford. "Por supuesto, luego aparecieron los coreanos y ahora los chinos. El número (de fabricantes) ha aumentado en lugar de encogerse".
Inversionistas interpretaron el llamado a la consolidación que hizo Marchionne a fines de abril como una señal de debilidad, y las acciones de Fiat Chrysler cayeron 15% en los días posteriores. Desde entonces, las acciones han recuperado la mayor parte del terreno que perdieron y se cotizan a más de 50% por encima de su valor a fines del año pasado.
Marchionne ha negado una y otra vez que Fiat Chrysler necesite una alianza para sobrevivir a una eventual caída del mercado. Sin embargo, la firma enfrenta varios desafíos.
Sus ganancias en Europa son insignificantes, llegó tarde a la producción de vehículos en China, y en Brasil, donde Fiat Chrysler es el líder del mercado, la venta de automotores está cayendo en picada.
Su desempeño en América Latina ha estado de capa caída. En el primer trimestre de este año, la automotriz reportó una pérdida de 71 millones de euros (US$77,5 millones) en la región.
La situación en Brasil, que representa alrededor de dos tercios de las ventas de autos en Sudamérica, es particularmente preocupante para Marchionne.
Fiat Chrysler factura 10% de sus ingresos globales en ese país sudamericano y el mes pasado la empresa inauguró allí una fábrica que ha calificado como su mayor emprendimiento industrial.
"Tenemos demasiada capacidad en la industria, así que debemos ir a una consolidación, porque en algún momento los vo-lúmenes globales bajarán y todos se quedarán con capacidad extra", dijo el analista de autos de Morningstar Richard Hilgert.
Para reducir su costo por unidad, Fiat Chrysler necesita aumentar los volúmenes —especialmente en lugares donde es relativamente pequeña como India y China— pero eso no necesariamente debe hacerse a través de una fusión, señaló Hilgert.