Fernando Marengo: “La decisión de Máximo Kirchner es una pésima noticia para generar confianza”

CORDOBA.- Para el economista Fernando Marengo es clave que desde el kirchnerismo “no minen” el preacuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). “Esperemos que no destruyan esa probabilidad; la decisión de Máximo Kirchner es una pésima noticia para la necesidad de generar confianza”, sostuvo. También remarcó que la oposición queda en una “posición incómoda”. Igual, aclaró que el Congreso “aprueba leyes, no planes económicos”.

Socio y economista jefe de Arriazu Macroanalistas, Marengo calificó de “absoluta irresponsabilidad” el paso dado por Máximo Kirchner. Interpretó que un ala del Gobierno quiere el acuerdo con el FMI y “la otra también, pero no quiere dejar la huella”.

“El principal frente opositor de Alberto Fernández está dentro del Gobierno -agregó-. La incógnita es cómo sigue esa interna”. Marengo siempre vinculó el contexto político a la confianza que debe generar un acuerdo con el Fondo para que no sea recesivo.

Disertó en Córdoba invitado por el Comité de Inversiones de S&C Inversiones. Analizó que el déficit primario normalizado de 2021 fue del 4,3%, por lo que el ajuste requerido para cumplir con la meta acordada con el FMI es de 1,8 puntos del PBI, es “muy elevado para lograr esa reducción solo con crecimiento, es extremadamente ambicioso”.

En esa línea repasó que el FMI aclaró que el ajuste de tarifas es clave. “Es un desafío político muy importante”, caratuló, y describió que en un país “empobrecido” subir las tarifas es una tarea a realizar, pero compleja. Apuntó que casi la mitad de los hogares ingresa menos de $70.000 por mes, por lo que allí no podría ir el ajuste.

Tres puntos del gasto son subsidios económicos, dijo, por lo que de ese segmento “debe venir gran parte del ajuste”; sobre las erogaciones previsionales y sociales, planteó que si la actividad económica crece esa porción de gasto le puede ganar a la inflación pero, a la vez, bajar en términos del PBI.

Marengo avanzó también sobre otros aspectos de los anuncios y detalló que entre el impacto de la sequía (ingresarían U$S2000 millones menos del campo este año con respecto a 2021), la suba de la energía y la sustitución de gas de Bolivia por Gas Licuado que es más caro, habrá un deterioro del superávit comercial que llevará a que “casi desaparezca” el de cuenta corriente. “Así, acumular reservas es otro desafío”, graficó.

A la política cambiaria la definió como “incierta”, y estimó que habría una aceleración del crawlling peg (pequeñas devaluaciones). “Se insiste con el déficit estructural de divisas, pero acá el déficit estructural es de confianza. Se habla de subir exportaciones, pero no se habla cómo de mejorar competitividad; es mucho aspiracional, enunciativo”.

Marengo proyectó que si el acuerdo se firma y no genera mejoras en la economía por falta de confianza, en un año electoral el Gobierno podría empezar a incumplirlo y el FMI a dar waivers: “No está dispuesto a inmolarse y sin financiamiento empezaría la emisión y de nuevo toda la rueda”, sostuvo.

También se refirió a que al Gobierno le cuesta “enormemente” la decisión de que las tasas sean positivas. Fue una “exigencia” del FMI, apuntó; genera diferencias entre el Banco Central que sí está dispuesto y Economía, que no.

Sostuvo que los precios de activos argentinos “solo se justifican” por la “desconfianza”, al igual que la brecha entre el tipo de cambio oficial y el dólar libre. “Nadie quiere activos argentinos en situación de extrema desconfianza”, resumió.

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