España cuestiona el éxito de su sector textil
Zara y Mango reevalúan su producción tras los accidentes en Asia y la crisis económica
MADRID—Marcas de moda españolas como Zara y Mango son inusuales historias de éxito en un país que se encuentra sumido en una profunda depresión económica. Pero ahora una serie de accidentes mortales en plantas textiles en el extranjero están provocando cierta reflexión sobre el costo de lucir bien, especialmente cuando la propia industria textil española está siendo dilapidada por importaciones y la tercerización, mientras los consumidores españoles tienen cada vez menos dinero para comprar ropa nueva.
Entre los escombros del edificio Rana Plaza que se derrumbó en Dhaka, Bangladesh, donde más de 1.100 trabajadores textiles perdieron la vida el mes pasado, los investigadores encontraron formularios de pedidos y prendas de Mango MNG Holding SL, de Barcelona, y de la cadena española de tiendas por departamentos El Corte Inglés SA. Un español, David Mayor, que sigue en paradero desconocido, aparece en los registros como el director general de una fábrica del Rana Plaza. Inditex SA, matriz de la marca Zara (que tiene 174 tiendas en América Latina), era cliente de la fábrica Smart Export cerca de Dhaka, donde siete trabajadores fallecieron en enero en un incendio.
Estos accidentes han desatado preguntas sobre los costos de la "moda rápida", una tendencia de diseño encabezada por marcas españolas que rotan colecciones sin parar para llevar estilos nuevos a las tiendas. Esa estrategia de recambio constante ayudó a transformar a Inditex, un negocio que comenzó en un garaje en los años 60, en una potencia global, y a su fundador, Amancio Ortega, en uno de los hombres más ricos del mundo.
Algunos líderes sindicales españoles afirman que el éxito de la moda española les ha traído más beneficios a los accionistas y los consumidores extranjeros que a los trabajadores de España u otros países. "Es muy sencillo: muchos empleos se trasladaron a países con bajos salarios y bajos estándares laborales, y ahora como resultado se están viendo accidentes", indicó Montserrat López García de la Torre, secretaria de relaciones internacionales de la Unión General de Trabajadores de España.
El otro lado de la moneda, afirmó, es la recesión económica de cinco años que sufre España y la tasa de desempleo de 27%. El declive de la industria textil y de confección, donde el empleo ha caído a 136.000 puestos frente a los 243.000 de 2004, precedió los problemas más amplios del país, conforme las importaciones de Asia comenzaron a suplantar la producción local. Entre 2002 y 2011, alrededor de 7.000 firmas españolas textiles y de ropa, aproximadamente 43% del total, cerraron sus puertas, según un estudio realizado por la Escuela de Negocios EAE, de España.
El éxito global de las empresas insignia de moda españolas presenta una paradoja. En la última década, las ventas globales de Inditex se han cuadruplicado a casi US$20.650 millones en 2012. En tanto, la recesión interna ha reducido el gasto per cápita en ropa de los españoles en 22%, entre 2007 y 2011, según el estudio de la Escuela de Negocios EAE.
Algunos analistas sostienen que los proveedores de moda rápida son los últimos a quien culpar por los problemas económicos españoles. "Para la moda rápida hay que producir cerca de casa", afirmó Ángel Asensio, director de la Federación Española de Empresas de la Confección. La idea, sostuvo, es precisamente reducir el tiempo que toma llevar la mercancía desde la fábrica hacia los centros de diseño y distribución en España.
Inditex, por ejemplo, indicó que alrededor de la mitad de su producción total proviene de España y países cercanos, como Portugal y Marruecos. La cantidad de empleados de Inditex en España aumentó 46% a 39.098 en los siete años previos a 2011, aunque la mayoría de los empleos pertenecen a los rubros minorista, logística o administración, y sólo unos 1.100 son puestos de fábrica que son propiedad del grupo. Inditex también tiene 6.500 proveedores españoles que, el año pasado, facturaron 3.000 millones de euros para la empresa.
Alrededor de 6% de la mercancía de Inditex proviene de Bangladesh, una porción que no ha cambiado significativamente en los últimos años, afirma la compañía. Alrededor de 4% de las compras de Mango en 2011 llegaron desde Bangladesh, comparado con 0,64% en 2007, reportó la empresa. Bangladesh produce "productos muy básicos de bajo costo para empresas de ropa en todo el mundo", no moda rápida, dijo Asensio.
lan Brat y David Roman contribuyeron a este artículo.