En julio cayó 2,6% la industria y la construcción tuvo un leve repunte de 2,1%

Dos sectores claves de la economía local mostraron un contraste en julio, respecto de junio de este año: mientras que la construcción creció 2,1%, la industria cayó 2,6%. En tanto, como era de esperar debido a que la base de comparación coincide con los peores meses del año pasado, la interanual exhibió avances en los dos casos: 19,8% en el primero de ellos, y 13% en el segundo.

Estos datos surgen del Índice de Producción Industrial Manufacturero (IPI) y del Indicador Sintético de la Actividad de la Construcción (ISAC) que difundió hoy el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), de los que también surge que en el acumulado de enero a julio de 2021 la industria creció 21% respecto de igual período del año anterior, y que la construcción avanzó 53,3% en el mismo lapso.

Según el Indec, en el cotejo interanual, catorce de las dieciséis divisiones de la industria manufacturera presentaron subas, entre las que se destacaron “Industrias metálicas básicas”, 39,8%; “Prendas de vestir, cuero y calzado”, 60,9%; “Maquinaria y equipo”, 30,5%, y “Vehículos automotores, carrocerías, remolques y autopartes”, 47,0%. Claro que el organismo estadístico no ofrece el mismo análisis sectorial en la comparación intermensual, por eso no se pueden observar las principales caídas.

Natalia Motyl, economista de la Fundación Libertad & Progreso, comentó que en los últimos meses se observa un estancamiento de la producción industrial. “Uno de los sectores más afectados es el automotor, que debido a que por las vacaciones otorgadas en varias plantas se redujo la producción y esto se vio reflejado en las estadísticas del mes”, señaló la especialista.

Otro de los sectores afectados en el último mes, según indicó Motyl, es la industria aceitera, debido a que la baja del caudal del Paraná y la reducción del calado incrementan los costos operativos y de exportación. “También los sectores de la carne por las medidas implementadas por el Gobierno a las exportaciones están marcando una caída interanual”, afirmó.

Con vistas a agosto, la economista de Libertad & Progreso espera una mejora de los índices de producción con un mayor fogoneo por parte del Gobierno en tiempos electorales que favorecerían la actividad y la aceleración del ritmo de vacunación, con una flexibilización de las restricciones sanitarias.

En lo que respecta a la construcción, Motyl analizó que los avances positivos de julio se debieron principalmente a que hubo mayores licitaciones en obras públicas y a que la construcción privada también logró recuperarse a los niveles prepandémicos. “Para el tercer trimestre se espera que la obra pública mejore como resultado del incremento de nuevos proyectos, reinicio de obras y reactivación de la actividad en general”, concluyó.

Por su parte, Camilo Tiscornia, director de C&T Consultores, remarcó que hubo una evolución dispar, porque construcción siguió creciendo, y bastante fuerte, mientras que la industria cayó. “Yo siempre observo la medición intermensual desestacionalizada, porque la interanual no aporta mucho. En construcción todos los componentes tienen buen desempeño y de hecho el nivel de actividad del sector es bastante alto, similar al de fines de 2018. En el caso de la industria, da la sensación de que tanto alimentos como autos se frenaron bastante, por lo que son esos dos sectores lo que explican la caída”, destacó el economista.

Para Tiscornia, el resultado del IPI publicado hoy por el Indec anticipa que el Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) de julio no será tan bueno como el de junio. “En junio hubo un repunte muy fuerte, porque se venía del cierre de mayo, pero evidentemente el índice de julio ya no va a ser tan bueno”, opinó el economista.

Daniel Schteingart, director del Centro de Estudios para la Produccion del Ministerio de Desarrollo Productivo de la Nación, opinó que el dato de industria demuestra un crecimiento superior a 5% contra igual mes de 2019. “Incluso julio de 2021 es mejor al de 2018. Si se mira la desestacionalizada da una caída de 2,6% contra junio, pero el dato de junio había sido extraordinariamente alto en parte porque justo después del cierre de mayo se había dado la reapertura de las fábricas”, dijo el especialista.

Schteingart subrayó, asimismo, que la mejora industrial se nota en el plano del empleo, con trece meses consecutivos de creación de empleo industrial, 20 de los 24 sectores con más empleo que en 2019 y 18 de las 24 provincia por encima de los niveles del año previo a la pandemia. “Repuntaron particularmente Maquinarias y equipos, industria química, alimentos y automotrices”, detalló.

En tanto, Nadin Argañaraz, director del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf), prefirió destacar la mejora de 5,9% que tuvo el IPI respecto de igual mes de 2019, es decir, previo a la pandemia. “Además, alimentos y bebidas, productos químicos y cemento fueron los tres sectores que inclusive lograron superar los niveles de julio del año 2017. El desafío es que el nivel de actividad también traccione al nivel de empleo, idealmente al formal”, opinó.

En el caso de la construcción, Argañaraz observó que el sector, a diferencia de lo que ocurre con la industria, está generando un aumento del empleo, clave para consolidar una masa salarial creciente en términos reales. “Y, además del crecimiento intermensual e interanual, mostró un avance de 4,4% respecto de julio de 2019″. especificó el especialista.

Según Schteingart, la tendencia tanto en industria como en construcción es que hay más empresas que van a contratar empleados que las que dicen que los van a despedir. “Yo estimo que se va a dar una recuperación más acelerada en la construcción que, dicho sea de paso, tiene que terminar de recuperar lo perdido durante los primeros meses de la pandemia”, concluyó.

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