Dólar. El plan para bajar la brecha debutó ampliándola al liberar negocios en espera
El plan oficial que busca achatar la brecha entre el dólar oficial y las variantes alternativas legales debutó hoy ampliando esa distancia
El resultado, explican en el mercado, estaba en la génesis de la medida, dado que, al acortar a 3 días los plazos de parking y homogeneizarlos para inversores residentes y extranjeros (hasta ahora estaban diferenciados), permitió que se acelere la liquidación de activos locales ya comprometidos para comprar dólares financieros, en un contexto de baja o nula demanda para el riesgo argentino, lo que golpeó las cotizaciones de los bonos o acciones utilizados y disparó más del 4% los precios de los dólares implícitos que surgen de estos negocios.
"Al entrar en vigencia la medida se juntaron las ventas de los que estaban aguardando el plazo de 15 días para transferir títulos al exterior pero quedaron automáticamente autorizados para operar porque llevaban más de 3 días de espera con los que estaban haciendo la espera de 5 días, en un momento en que casi no hay compradores de riesgo argentino. Esto se notó por el diferencial de precio que mostraron los títulos afuera -que venían mucho más golpeados- y los locales, que estaban más sostenidos por la demanda para salir", explicó a LA NACION Santiago López Alfaro, de Delphos Investment.
"Luego de los anuncios realizados a última hora de ayer, los bonos en dólares se mostraron dispares: los globales quedaron prácticamente sin variaciones, mientras que los bonares estuvieron más ofrecidos, para retroceder 1,5 dólares en promedio", certificó en su informe diario el Grupo SBS, lo que explica la estabilidad que mostró la tasa de riesgo país en la jornada al cerrar en 1433 puntos básicos, 2 menos que en la clausura previa.
"La renta fija soberana vio caer nuevamente sus cotizaciones, pero esta vez de una manera mucho más fuerte de la que venía experimentando en las jornadas anteriores: se vieron bajas superiores al 5% en algunos casos. Con la flexibilización del parking puede haberse generado una venta masiva de títulos, buscando cerrar el tipo de cambio y haciendo que estos bonos caigan de sobremanera", opinó Joaquín Candia, analista de Rava.
El dólar oficial mayorista cerró hoy a $77,68 (tras subir 10 centavos en otra rueda negativa para el Banco Central. De este modo, la brecha cambiaria "legal", la que separa el valor del tipo de cambio oficial con los precios promedio que surgen de las operaciones para conseguir dólar Bolsa o MEP (cerró a $160,90) o contado con Liquidación ($171,85), se amplió de 97% a 107%, en el primer caso y de 107% a 121% en el segundo.
Así, al menos en un principio, las medidas para flexibilizar el acceso al dólar a través de los mercados financieros provocaron que las cotizaciones del dólar que surgen de operaciones bursátiles alcances nuevos récords.
Sin embargo, los analistas explican que para medir mejor sus efectos habrá que dejar pasar algunas jornadas para que el mercado descargue las operaciones "atascadas", aunque recuerdan que no creen que cambien diametralmente una situación dominada por la desconfianza.
"Los diferentes plazos de parking condicionaron mucho la operatoria del día y emparejaron los precios de los bonos para abajo. Para medir el impacto de las medidas habrá que esperar algunas ruedas más. Pero nadie espera que reconstruyan la confianza: para eso se necesita que sean acompañadas con un plan integral con metas", insistió López Alfaro.
"Para que el peso pare de destruirse hay que dejar de emitir, y para dejar de emitir hay que ir al equilibrio fiscal. El resto de las medidas son como el papel picado de adentro de la piñata", juzgó Alejandro Kowalczuk, economista director en Argenfunds.
En la evaluación de Consultatio Investments, las medidas podrían ayudar a bajar levemente brecha cambiaria, aunque no lo suficiente para licuar las presiones devaluatorias. "Podrían hacer que caiga algo, pero para que vuelva a niveles tolerables el Gobierno debería mostrar que cuestiones como el déficit fiscal y la situación monetaria están en su agenda", señaló.
La apuesta del Ministerio de Economía es que el canal financiero para llegar al dólar sea menos engorroso, reconociendo las fuertes restricciones para el acceso que tiene la plaza cambiaria oficial ante la escasez de reservas. La idea es que un volumen mayor de operaciones ayude a estabilizar primero y bajar luego esas cotizaciones.
De allí que también rehabilitó la posibilidad de dar salida en dólares a los fondos de inversión globales posicionados en títulos en pesos, algo que proyecta permitir con una subasta de bonos con ley local por US$750 millones, que se efectuará los días 9 y 10 de noviembre.
"Al favorecer el proceso de intermediación –que había sido trabado mucho más con la normativa pasada– busca incrementar la liquidez de los instrumentos locales para impulsar una caída en la brecha, algo que esperamos suceda", evaluaron en Portfolio Personal Inversiones (PPI). Por lo pronto, en el debut el efecto fue el contrario.