El PBI creció 1% en el segundo trimestre del año, según el Indec

El producto bruto interno (PBI) creció 1% en el segundo trimestre del año, en términos desestacionalizados, y tuvo un incremento de 6,9%, respecto de igual período del año anterior, pero, según analistas ya empieza a mostrar signos de debilitamiento que hacen proyectar una desaceleración en lo que queda del año.

En efecto, según publicó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), en su “Informe de avance del nivel de actividad”, el dato desestacionalizado del segundo trimestre de 2022, con respecto al primer trimestre de 2022, “arroja una variación de 1,0%, mientras que la tendencia ciclo exhibe una variación positiva de 1,4%”.

Asimismo, el organismo estadístico oficial señaló que, “en cuanto a la demanda, todos los componentes mostraron un incremento respecto al primer trimestre en términos desestacionalizados: la formación bruta de capital fijo creció 7,8%; el consumo público aumentó 0,2%; el consumo privado, 1,8%; y las exportaciones, 3,5%”.

En este sentido, entre los componentes de la demanda, el mayor incremento se observó en la formación bruta de capital fijo, con 18,8% interanual (ia). Por el lado de los sectores de actividad, se destacaron los incrementos en Hoteles y restaurantes (53,9% ia), Pesca (24,1% ia) y Explotación de minas y canteras (15,5% ia).

Este dato del segundo trimestre informado por el Indec está arriba de lo que esperaba el mercado según el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM), que realiza el Banco Central (BCRA), que en su última revisión había estimado +0,7% para este período, tras revisión al alza del 0,2% general y del 0,4% entre el Top 10.

Lorenzo Sigaut Gravina, economista de la consultora Equilibra, indicó que los datos del segundo trimestre muestran una expansión mayor a lo que daba el Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE), que hablaban de un crecimiento de 0,8% desestacionalizado y 6,5% interanual. “Un 1% es buen crecimiento, pese a que se trató de un trimestre en el que ya se empezaron a notar algunos problemas, como la escasez de divisas, la falta de energía y una aceleración de la inflación”, acotó.

En tanto, Agostina Myronec, economista de la consultora Ecolatina, señaló que los datos del PBI del segundo trimestre fueron a grandes rasgos positivos. Pero aclaró: “No obstante, se desacelera un poco la mejora respecto del 1,2% del primer trimestre, del 1,6% del cuarto trimestre de 2021, y del 3,9% del tercer trimestre del año pasado”.

Para Myronec, tanto el consumo como la inversión y las exportaciones mostraron cifras positivas en un contexto en el que la aceleración de la inflación todavía no había impactado tanto en el deterioro del poder adquisitivo. “Fue un primer y segundo trimestre de mejora del consumo privado, que ya se veía claro en las cifras de turismo, hoteles y restaurantes, y esparcimiento, todo lo que había sido reprimido durante la pandemia”, agregó.

Matías de Luca, economista de la consultora LCG, opinó que el dato a destacar es la recuperación de la inversión: creció 19% a/a. “Si bien es verdad que la economía seguía vapuleada en aquel entonces, lo que podría distorsionar el análisis año a año, lo relevante es que la inversión representó el 21% del PBI. De este modo, acumula tres trimestres por encima del 21%, lo cual está bastante por encima del promedio de 2004 para acá que es 19% del PBI. Esto es importante porque la inversión es lo único que permite aumentar la renta en el largo plazo”, afirmó.

Para la segunda parte del año y para el total del año en particular Ecolatina proyecta una suba de 3,8%, similar a la mediana de 3,6% que arrojó el último REM, del BCRA. “Esa estimación del REM esconde caídas desestacionalizadas en el segundo semestre del año, porque para que se de esa cifra, el PBI debería caer en términos desestacionalizados un poco menos de 2% tanto en el tercero como en el cuarto trimestre”, analizó Myronec.

Según los analistas, esta desaceleración que proyecta el mercado para el segundo semestre del año está fundamentada en el hecho de que en ese período empezará a sentirse el impacto del del deterioro del poder adquisitivo, de la restricción a las importaciones y de un contexto internacional poco favorable.

Claudio Caprarulo, economista de la consultora Analytica, dijo que los datos del segundo trimestre fueron buenos y estuvieron en línea con lo que se proyectaba sobre la base de otros indicadores. Pero añadió: “En el margen la tasa de crecimiento continuó reduciéndose, en particular producto de un consumo menos dinámico. Un resultado que proyectamos empeoró en el tercer trimestre ante el salto de la inflación en julio y agosto.

Con vistas a la segunda parte del año, De Luca concluyó por su parte: “La incertidumbre política que se dio a partir del segundo semestre atenta principalmente contra este componente, por lo cuál habrá que seguirlo de cerca”.

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