El lento proceso de ventas complica los planes de Citi
Se trata, probablemente, de la mayor venta de objetos usados de la historia: tarjetas de crédito, hipotecas, operaciones de corretaje, un negocio de seguros puerta a puerta, incluso un refugio de esquí, acumulados cuando Citigroup Inc. trató de construir un supermercado financiero por todo el mundo.
Ahora que el sueño se ha desvanecido, la compañía neoyorquina trata de desprenderse de activos que ya no quiere y que la siguen perjudicando cuando ya han pasado más de dos años desde el inicio de la crisis financiera. Catorce meses después de haber comenzado el proceso de venta, está claro que aún queda un largo camino por recorrer.
Citigroup, el tercer conglomerado financiero estadounidense por activos después de Bank of America Corp. y J.P. Morgan Chase & Co., se ha deshecho de una cuarta parte de los aproximadamente US$715.000 millones en activos que, en enero de 2009, trasladó a una división llamada Citi Holdings. El volumen total de los activos de Citigroup al 31 de diciembre pasado cayó 4,2% frente al nivel de un año antes, a US$1,8 billones (millones de millones), comparado con una baja de 6,6% en el caso de J.P. Morgan Chase.
La lentitud del proceso complica los esfuerzos del presidente ejecutivo de Citigroup, Vikram Pandit, por sanear el balance de la compañía y frustra a algunos inversionistas.
Los analistas esperan que el negocio principal del banco logre una ganancia de US$16.000 millones este año, pero las pérdidas crediticias de los activos en venta alcanzarán probablemente los US$13.000 millones. La diferencia le daría a Citigroup su primera utilidad anual desde 2007, pero aún quedaría muy lejos de los US$21.540 millones logrados en 2006.
La estrategia de la empresa parece ser "capearemos la tormenta y, a la larga, mejoraremos", dijo Moshe Orenbuch, analista de banca de Credit Suisse Group. Algunos inversionistas, sin embargo, desean "ver más celeridad de su parte", añadió.
Las autoridades reguladoras también están presionando a Citigroup para que actúe con mayor agilidad, indican fuentes cercanas.
Si bien se han vendido 15 negocios, deshacerse del resto llevará al menos hasta finales del próximo año, dijeron ejecutivos del banco.
Rescatar a la compañía de sus errores pasados es una parte importante de la campaña de Pandit para convencer a los escépticos en Wall Street y en Washington de que no hay necesidad de un desmembramiento forzado de Citigroup.
"¿Por qué no dividirlo?", le preguntó Elizabeth Warren, presidenta del Panel de Supervisión del Congreso estadounidense-que inspecciona a las instituciones financieras que recibieron ayuda del gobierno- a Pandit en una audiencia este mes.
"Estamos vendiendo 40% de la compañía", respondió el ejecutivo. El presidente ejecutivo de Citi Holdings, Michael Corbat, ex ejecutivo de Salomon Brothers a cargo de la venta de activos prescindibles, dijo que Citigroup quiere venderlos, pero que no va a aceptar cualquier precio.
Incluso algunos críticos alaban la paciencia de Citigroup. "Prefiero que se demoren más y obtengan valuaciones más altas", dijo William Smith, presidente de la administradora de fondos SAM Advisors LLC, propietaria de 90.000 acciones de Citigroup.
Los US$168.000 millones en activos ya vendidos por Citigroup equivalen al tamaño de Capital One Financial Corp., el decimosexto holding bancario de EE.UU. al 31 de diciembre. La operación que acaparó más titulares fue la venta a Morgan Stanley de 51% en su negocio de corretaje Smith Barney, que le reportó una ganancia de US$6.700 millones.
El principal obstáculo para vender muchos negocios de Citigroup es un entorno adverso. "No hay peor momento para vender negocios de servicios financieros al consumidor", manifestó un inversionista.
CitiFinancial, una entidad de préstamos al consumidor, tiene un modelo de negocio similar al de CIT Group Inc., que pasó serias dificultades cuando se contrajo el financiamiento y se acogió a las leyes estadounidenses de bancarrota el año pasado, quiebra de la que salió en diciembre.
CitiFinancial se llamaba Comercial Credit Corp. y era la piedra angular del imperio que Sanford Weill transformó en Travelers Group antes de fusionarlo con Citicorp en 1998 para formar Citigroup.
Como compañía independiente, CitiFinancial podría tener dificultades para acceder a crédito barato, dijeron algunos analistas.
Otro negocio en venta es una cartera de tarjetas de crédito con un estimado de US$40.000 millones en cuentas por cobrar y tarjetas que se comercializan a través de cadenas minoristas como Sears
Holdings Corp. Citigroup está tratando de vender la cartera completa, en lugar de dividirla por marcas, según personas familiarizadas con los planes del banco.
Eso reduciría el número de compradores potenciales, ya que hay muy pocas compañías tan grandes o atrevidas como para absorber un negocio tan grande.