El ingreso de los argentinos mejoró en 2021, pero aún es el más bajo desde 2006
La elevada inflación y la pandemia mostraron la particular situación que vivieron los ingresos de los argentinos al cierre del año pasado; un dato clave que mira el Gobierno mejoró sustancialmente
- 5 minutos de lectura'
Frente a lo peor de la pandemia y en meses marcados a fuego por la necesidad electoral, los ingresos de los argentinos crecieron en términos reales a fines de 2021 con relación a un año atrás, pese a que en la comparación con 2019 todavía hay segmentos que perdieron. Además, mejoró sustancialmente la distribución del ingreso en el país.
Sin embargo, el principal ingrediente de la discordia en la interna entre Alberto Fernández y Cristina Kirchner volvió a mostrar los dientes en los datos oficiales: tras las cuarentenas y la acumulación de temporadas con precios acelerados, el ingreso per cápita promedio actual es el más bajo desde 2006 para un cuarto trimestre.
En ese marco –y agregando más leña al fuego a la grieta abierta en el Frente de Todos tras el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI)– analistas advirtieron que el rebrote inflacionario de los primeros meses de este año ya anticipan que el poder adquisitivo de los hogares se seguirá erosionando.
El Indec presentó hoy su informe sobre Evolución de la distribución del ingreso (EPH). En ese documento –la contracara del informe sobre el mercado laboral conocido días atrás–, el ingreso medio de la población total fue en el cuarto trimestre de $32.192 (el estrato bajo llegó a los $12.444; el medio, a $30.118; y el alto, a $75.838). El ingreso medio de la población que tiene ingresos (el 60,4% de la total) fue de $52.553 ($60.132, los varones; y $45.154, las mujeres).
Para los 9,2 millones de asalariados, el ingreso medio fue de $55.823 (con descuento jubilatorio fue de $68.879, y sin el mismo, $28.592). Entre los 3,4 millones de no asalariados, el ingreso medio fue de $54.658 a fines de 2021.
En ese marco, informó que en los hogares el ingreso per cápita familiar (el ingreso total familiar dividido por la cantidad de integrantes del hogar) promedio fue de $32.305. Según la consultora LCG, se trata de una mejora de 9% real con relación a un año atrás.
“Esta tendencia se registró transversalmente en todos los deciles de ingresos. Se aprecia una mejora relativa de los ingresos de los deciles más bajos (+22% y +19% real año a año en los deciles 1° y 2°) respecto de los más altos (+3% y +4% real anual en los deciles 9° y 10°), en línea con la política de ingresos impulsada por el Gobierno”, estimó un informe de Matías De Luca en LCG.
Importante mejora en la distribución personal del ingreso en el cuarto trimestre de 2021.
— Daniel Schteingart (@danyscht) April 6, 2022
El coeficiente de Gini llegó al menor valor en más de 4 años. pic.twitter.com/uMtCgBkTbp
Sin embargo, el Gobierno sembró dudas sobre la transversalidad de esta mejora, por lo menos en la comparación entre 2019 y 2021, la más honesta porque excluye la pandemia. El coordinador del Plan Argentina Productiva 2030 y director del CEP en el Ministerio de Desarrollo Productivo, Daniel Schteingart, escribió en su cuenta de Twitter: “No todos los deciles le ganaron a la inflación. El 30% de menores ingresos le ganó tanto a la canasta básica, a la alimentaria y al IPC. En contraste, el 40% de mayores ingresos perdió contra ambas canastas y contra el IPC. El 30% restante (deciles 4 a 6) le ganaron a la canasta básica total, pero no a la canasta básica alimentaria”.
El peor escenario
No obstante, el dato más doloroso sobre el ajuste que promueve la inflación lo dio De Luca. “A pesar de la mejoría en el ingreso medio de la población, el del cuarto trimestre de 2021 todavía resulta el más bajo desde 2006 en términos reales, exceptuando el año de pandemia”.
Vale tener en cuenta que la canasta básica total para un adulto equivalente en noviembre fue de $23.921,62; mientras que canasta básica alimentaria fue de $10.266,79. Según los expertos, el mejor cruce con el número que se conoció ayer es noviembre porque el dato de ayer de distribución del ingreso es trimestral.
En LCG marcaron dos claves que llamaron la atención y dejaron una conclusión final. “Los ingresos no laborales dentro de los hogares del 1° decil ascendieron al 38,6% del total (casi 10 puntos menos que un año atrás cuando la asistencia a raíz de la pandemia estaba a pleno); refiere a niveles comparables con los de 2019, pero 7 puntos superiores a los de 2017, último año de crecimiento económico”, estimaron.
“Por otra parte, los ingresos no laborales del decil más alto (20% del total) retroceden 6 puntos porcentuales, producto de menores rendimientos de inversiones en un contexto de nominalidad más alta”, sugirieron con relación a la inflación. Sin embargo, otros expertos indicaron que este último fenómeno puede estar relacionado al ajuste oficial en las jubilaciones altas.
“Una mayor nominalidad de la economía, con tasas de inflación núcleo que superan el 65% anualizado, seguirá erosionando el poder adquisitivo de los hogares, fundamentalmente los de los más bajos. Así, entendemos que la mejora del cuarto trimestre de 2021 debe ser entendida como temporal, ya que probablemente será revertida durante este año”, cerraron.
“El numero que más llama la atención es el coeficiente de Gini, que baja de 0,441 en tercer trimestre a 0,413 en el cuarto. Este último es muy bajo. Es igual al del cuarto trimestre de 2017, que fue el último año bueno. Que haya bajado significa que disminuyo la desigualdad”, afirmó el especialista de Idesa Jorge Colina. “El salario informal entre el 30% de menor salario subió 15% entre entre trimestre, mientras que los salarios registrados entre el 30% de mayores salarios crece por debajo de 10%. El salario en el decil 10 prácticamente no crece”, explicó.
Otras noticias de Comunidad de Negocios
Más leídas de Economía
Vino de Yugoslavia. Murió el pionero que hizo una obra que lo convirtió en leyenda y creó un oasis donde había un desierto
“Es un escándalo”. Un intendente bonaerense apunta a recaudar $16.000 millones con una polémica tasa portuaria
“Se habla solo de Vaca Muerta, no de la Vaca Viva”. Inquietud en el sector privado por una ley que impulsaría el Gobierno para los biocombustibles
Inversiones millonarias. Expectativa por el arranque del proyecto que permitirá duplicar las exportaciones de petróleo