El imperio de Batista sufre un nuevo golpe
La petrolera OGX, la joya de la corona, anuncia otra vez que no cumplirá sus metas
SÃO PAULO—Las penurias financieras del multimillonario brasileño Eike Batista se profundizaron el lunes cuando la firma insignia de su grupo volvió a decir que no alcanzaría sus metas de producción, poniendo más presión sobre el magnate para que salve su imperio industrial.
OGX Petróleo e Gás Participações SA indicó el lunes que suspendió el desarrollo de los tres pozos petroleros —Tubarão Tigre, Tubarão Gato y Tubarão Areia— e indicó que podría tener que suspender la producción en Tubarão Azul, el único pozo que está produciendo dentro del portafolio de la petrolera. La empresa indicó que no podía sostener sus metas de producción. También canceló pedidos de cinco unidades de producción en altamar que le hizo a su empresa hermana OSX Brasil SA y que pagará de inmediato una indemnización de US$449 millones.
Se incrementan los pedidos para que Batista decida si realiza una inversión extra de US$1.000 millones en OGX que había prometido antes. Sin ese dinero, OGX podría tener problemas para cumplir con sus compromisos financieros, según analistas.
"O Batista cumple con (o al menos parte de) su promesa de US$1.000 millones o la empresa se queda sin efectivo", señaló HSBC en un informe al mercado el lunes. Sostuvo que la partida reciente de algunos de los principales miembros del directorio de OGX ha generado sospechas de que Batista no planea cumplir su compromiso.
Batista, el otrora hombre más rico de Brasil, últimamente se ha apresurado a vender activos de su imperio industrial Grupo EBX para cumplir con obligaciones financieras de la firma luego de que se desató una crisis hace un año cuando OGX reportó que sus niveles de producción estaban muy por debajo de las expectativas. Desde 2011, el valor neto de todas sus empresas se había reducido al equivalente de alrededor de US$25.000 millones.
Los efectos se están sintiendo en todos los negocios de Batista. En los últimos años levantó miles de millones de dólares de inversionistas para incursionar en industrias pesadas como petróleo, gas, minería y puertos.
"Las perspectivas de OGX son cada vez más negativas; esto termina reflejado en todo el grupo", afirmó Eduardo Carlier, un administrador de portafolio de valores de Schroder Investment en São Paulo. La firma supervisa un portafolio de 500 millones de reales (US$224 millones).
"Aún creo que hay algunos activos buenos en el grupo, pero algunas de las empresas están en una situación muy complicada", sostuvo.
OGX ahora se concentrará en su pozo Tubarão Martelo, que comenzará a producir petróleo en el cuarto trimestre de este año, según dos personas familiarizadas con la compañía. La empresa quiere concentrar el efectivo que le queda en lo que cree es su mejor activo, para entonces poder desarrollar los otros pozos más adelante, indicaron las fuentes.
"No tiene sentido invertir dinero para perderlo", sostuvo el analista del banco alemán Deutsche Bank Marcus Sequeira, en una entrevista telefónica desde Nueva York.
Las acciones de OGX se derrumbaron el lunes, al caer 27,85% a 57 centavos de real (unos 26 centavos de dólar). Las acciones de la empresa de construcción naval OSX bajaron 5% a 1,33 reales (60 centavos de dólar). Los bonos de OGX que vencen en 2018 se derrumbaron a 20,25 centavos por dólar. Un corredor indicó que hubo grandes pedidos para vender el bono por la mañana.
"El mercado ya no le dará a OGX el beneficio de la duda", indicó Guilherme Figueiredo, gerente de un fondo en la firma brasileña de administración de activos M.Safra & Co., con 3.400 millones de reales en activos.
The Wall Street Journal