El Gobierno quiere cerrar esta semana el acuerdo para congelar el precio de los medicamentos
Luego de 10 días económicamente agitados, que incluyeron los anuncios de "reperfilamiento" de la deuda pública, las restricciones a la compra y transferencia de dólares y la alta volatilidad en el precio de la moneda norteamericana, el Gobierno y los laboratorios (nacionales y extranjeros) retomarán esta semana las negociaciones para llegar a un acuerdo que permitiría congelar el precio de los medicamentos por algo más de dos meses.
Las conversaciones venían bien encaminadas hasta hace unos 15 días, pero luego de que el ministro de Hacienda, Hernán Lacunza, anunció la reprogramación de algunos pagos de la deuda, el dólar saltó a $62 y los encuentros quedaron en suspenso, aunque el intercambio de propuestas y contrapropuestas continuó por vía telefónica, confirmaron fuentes oficiales y privadas. Ahora, con el dólar nuevamente en torno de $58, la intención de la Secretaría de Salud es acelerar los tiempos. Los medicamentos tienen un alto componente importado que depende de los vaivenes del dólar y que impactan en los precios finales al consumidor. Para tomar en cuentas esas oscilaciones, el Gobierno propuso fijar una franja "razonable" como referencia para el acuerdo. Si se superara, quedaría sin efecto.
El último borrador del convenio habla de un congelamiento de precios de una canasta básica de medicamentos (un 70% del universo) hasta el 30 de noviembre próximo, con la inclusión de un aumento acotado de 10% promedio respecto del nivel de precios anterior a las PASO del 11 de agosto, cuyo resultado disparó una ola de inestabilidad financiera que aún perdura. En el caso de los remedios que hayan superado ese porcentaje de aumento, la intención oficial es que los laboratorios retrotraigan los precios a ese nivel. Se trata del punto más discutido, pero no es el único.
En la negociación también se coló otra discusión casi permanente: los precios de los medicamentos que los laboratorios proveen al PAMI, la obra social de los jubilados y pensionados. El acuerdo vigente entre la industria y el organismo, que empezó a regir el 1° de abril y que se extiende hasta marzo de 2020, prevé ajustes de precios trimestrales con un tope: la inflación del período. Los "precios PAMI" no pueden superar en su aumento el índice de precios al consumidor, de allí que son más baratos que para el común de los compradores ya sea particulares o con otras coberturas. La brecha con los mismos medicamentos se ubicaba entre un 22 y un 25% hasta mediados del mes pasado, pero tiende a ampliarse, confirmaron las fuentes consultadas.
En el primer trimestre del acuerdo (abril, mayo y junio) no hubo mayores problemas y tampoco en el primer mes del segundo trimestre, julio, que mostraba una inflación de 2,2% y en un proceso de desaceleración. Pero todo cambió luego de las PASO y ahora se espera una inflación alta en agosto y septiembre, de al menos 4,3% y 5,8%, respectivamente, según el último relevamiento de expectativas de mercado (REM) del Banco Central, lo cual hace que el desfasaje entre los precios PAMI y los otros se amplíe. Achicar esa brecha es uno de los objetivos de los laboratorios.
Paradojas de la crisis. Apremiado, el Gobierno tiene que acercarse a las cámaras de laboratorios a las que el año pasado excluyó del acuerdo con el PAMI y a las que incluso denunció ante la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC). En la industria no son pocos los que ironizan con esta situación, pero aclaran que están dispuestos a "colaborar".
Temas
Otras noticias de PAMI
- 1
Giorgia Meloni, el Papa Francisco, un gobernador peronista y un “ídolo” libertario: el podio de quienes le hicieron regalos a Javier Milei
- 2
El Gobierno oficializó la poda a la obra pública y el Tesoro le pidió a la Secretaría que devuelva 1 billón de pesos
- 3
PAMI: 10 preguntas y respuestas sobre el cambio en la cobertura de medicamentos
- 4
Real hoy: a cuánto cotiza la moneda brasilera oficial y blue este viernes 20 de diciembre