El Gobierno intimó a LAN a dejar un hangar en Aeroparque y peligra su operación en el país
La línea aérea dijo que de no poder funcionar en la terminal porteña dejará de volar a 14 destinos nacionales; peligran 1500 puestos de trabajo
En los pasillos del aeroparque metropolitano se esperaba el Día D para LAN Argentina. Y ayer llegó. ¿Qué sucedió? El Gobierno, mediante uno de sus organismos de control, intimó a la compañía aérea a abandonar el hangar que tiene en Aeroparque y prácticamente selló el fin de las operaciones de cabotaje de la empresa aérea.
Todo se desencadenó con una cédula de notificaciones que el Organismo Regulador del Sistema Nacional de Aeropuertos (Orsna) le envió a la compañía, en la que se adjunta la resolución 123. La norma establece un plazo 10 días hábiles para desalojar las instalaciones que LAN Argentina tiene en la plataforma Sur de la estación aérea. El hangar por desalojar fue construido por la empresa en un viejo terreno que utilizaban los bomberos. La compañía firmó en 2008 un contrato con Aeropuertos Argentina 2000 (AA 2000) para alquilar el espacio hasta 2023 y desembolsó US$ 5 millones para levantar el edificio que hoy hace las veces de taller de apoyo para los vuelos de la aerolínea.
El director de Asuntos Corporativos de LAN Argentina, Agustín Agraz, fue el encargado de fijar la postura de la empresa: "Recurriremos a la Justicia para hacer valer nuestros derechos, tenemos un contrato firmado por el hangar y nuestra base de mantenimiento hasta el año 2023 con una inversión de 5.000.000 de dólares y un canon mensual de 20.000". ¿Qué pasaría en caso de que la Justicia no hiciera lugar al requerimiento de LAN?, se le preguntó. "La operación es inviable sin el hangar; si nos lo quitan nos veríamos obligados a dejar de volar a los 14 destinos de la Argentina."
Además de la consecuencia para los usuarios, alrededor de 1500 empleados de la compañía podrían ver en peligro sus fuentes de trabajo. "Esa es la plantilla que tienen afectada a los vuelos de cabotaje. No hay ninguna manera de mantenerla si dejan de volar esas rutas", dijo un conocedor del mercado aerocomercial argentino.
Un viejo anhelo de la gestión estatal de Aerolíneas Argentinas es desplazar a toda la competencia de la estación aérea porteña. LAN Argentina ya no dispone prácticamente de mangas para embarcar a sus pasajeros, además de no operar vuelos internacionales desde esa terminal y de soportar continuos problemas con los servicios de tierra que le presta Intercargo.
El sistema aerocomercial argentino es uno de los grandes bastiones de La Cámpora. Además de manejar Aerolíneas Argentinas y Austral, con Mariano Recalde como presidente, tiene el control de Intercargo mediante la interventora María Cecilia García y del Orsna, cuyo titular es el camporista Gustavo Lipovich. A su vez, la agrupación sentó a dos directores en AA2000 y propició la salida del anterior presidente de la empresa, Ernesto Gutiérrez, y la llegada del actual, Rafael Bielsa. También obedece las políticas de los jóvenes K el número uno de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), Alejandro Granados.
Cuestiones políticas
Los argumentos esgrimidos en la resolución se reducen a cuestiones políticas. "LAN Argentina no pertenece al Estado nacional, ni es una línea aérea que opera vuelos regulares internos e internacionales desde Aeroparque, ni es una empresa que ofrece servicios de rampa en el aeropuerto". La ANAC ya había resuelto sacar de Aeroparque a todos los aviones de bajo porte. Justamente de ellas, Aerolíneas Argentinas sumará 10.000 metros cuadrados de hangar, que se agregarán a los 17.500 que actualmente tiene. El hangar de LAN posee 2500 metros.
Recalde no estuvo ajeno a la noticia: "LAN tenía una posición de privilegio que no le correspondía y que está empezando a perder. Se estableció un sistema un poco más justo de distribución proporcional y de prioridad para Aerolíneas Argentinas por ser la línea aérea de Argentina", dijo el ejecutivo militante.
El tema ya golpeó la relación con Chile. Fuentes del Palacio de la Moneda confirmaron que el presidente de Chile, Sebastián Piñera -ex socio de la empresa- enviará a su canciller, Alfredo Moreno, para iniciar un canal de diálogo con las autoridades argentinas.