El fortalecimiento del dólar ayuda a las mineras a capear el temporal
Las mineras, que se han visto golpeadas por el derrumbe de las materias primas, han prometido en los últimos días que no reducirán su producción, señalando que el fortalecimiento del dólar está amortiguando el impacto del declive de los precios.
Empresas que van desde los gigantes anglo-australianos BHP Billiton y Rio Tinto hasta firmas más pequeñas como Lonmin PLC, con sede en Londres y operaciones en Sudáfrica, se están beneficiando de la fortaleza del dólar debido a que reciben esta moneda a cambio de su oro, cobre y mineral de hierro, y usan divisas locales para pagar a sus empleados y cubrir muchos otros costos.
El alza del dólar está repercutiendo en la economía mundial, al dividir a las empresas entre ganadoras y perdedoras a lo largo de líneas geográficas y reconfigurar la próxima fase de la cotización de los commodities. En 2014, el dólar se apreció frente a prácticamente todas las divisas y lo ha seguido haciendo este año, conforme algunos bancos centrales toman medidas para devaluar sus monedas en busca de nuevas formas de reactivar el crecimiento.
Algunos de los mayores avances del dólar en lo que va del año han sido contra divisas de grandes exportadores de materias primas: 7% frente al real brasileño y el dólar canadiense y 5% ante el dólar australiano.
Para muchas empresas estadounidenses con presencia en el exterior, la fortaleza del dólar es un problema, ya que encarece sus productos para los compradores de otros mercados y reduce el valor de las ventas internacionales cuando se convierten a dólares. Sin embargo, las mineras que de lo contrario podrían verse obligadas a suspender proyectos a los precios actuales de las materias primas están manteniendo sus minas en operación y, en algunos casos, elevando la producción conforme las oscilaciones cambiarias reducen sus costos.
En consecuencia, los suministros siguen aumentando y los analistas proyectan que los precios de los metales caerán más y por un tiempo más prolongado. "Las divisas han sido una válvula de escape", asevera Ben Magara, presidente ejecutivo de Lonmin.
La británica Anglo American PLC, la quinta minera mundial por capitalización bursátil, indicó el viernes que la debilidad de las monedas locales de los países donde opera añadieron US$1.300 millones a sus resultados, si bien registró una pérdida en 2014. Se trata de más de la mitad del perjuicio de US$2.400 millones que tuvo debido al declive de los precios de los commodities. La empresa indicó que planea incrementar su producción de mineral de hierro en Brasil y Sudáfrica en los próximos años, pese a que el precio de este ingrediente clave en la fabricación del acero se encuentra en mínimos de casi cinco años y medio.
Un día antes, Rio Tinto divulgó un alza de su ganancia y atribuyó la mejora de su margen al debilitamiento de los dólares canadiense y australiano. En tanto, Newcrest Mining Ltd. anunció el viernes que pondrá en venta una de sus mayores minas de oro en Australia para pagar deuda, una decisión que ha sido posible gracias a que la depreciación de la divisa australiana hace que el activo tenga un precio más atractivo para los posibles compradores.
De todas formas, algunos analistas dicen que un dólar más fuerte sólo aplazará el momento de la verdad para la industria minera. Al mantener abiertas sus minas, las empresas alimentan un exceso global de metales, carbón y mineral de hierro. La demanda es débil en China, el mayor consumidor de materias primas, cuya economía se expandió el año pasado a su ritmo más lento en décadas. Asimismo, muchas mineras incurrieron en grandes deudas, en dólares, para crecer durante épocas de auge y necesitan que sus ganancias alcancen cierto nivel para pagarles a los acreedores.
"El dólar más fuerte ha estado amortiguando parte del golpe de los menores precios de los commodities (...) pero no todo", dice Daniel Rohr, director de investigación de materiales de Morningstar Inc. "Las mineras necesitan expandir la producción, otorgar efectivo a los accionistas y mantener un fuerte balance, y en un entorno de precios débiles no se puede hacer las tres cosas".
Lonmin se ha visto afectada por una caída de 20% de los precios del platino, su principal producto, desde julio. No obstante, Magara dice que la minera mantendrá la producción este año gracias al alza del dólar frente al rand sudafricano, lo que ha reducido sus costos en ese país. La semana pasada, el dólar tocó un máximo de 13 años frente al rand.
La devaluación "ha sido de gran ayuda", agrega el ejecutivo. "Hemos ganado en torno a 10% gracias a la divisa, por lo que el impacto del precio (del platino) ha sido mitigado".
Lonmin, al igual que muchas otras empresas, sigue enfrentando vientos en contra. Después de un auge de una década en los precios de los metales, la minería ha pasado los últimos tres años adaptándose a un entorno marcado por una menor demanda.
China, que en su ascenso para convertirse en la segunda economía del mundo después de Estados Unidos fue acompañada de una veloz urbanización e industrialización, ha moderado su apetito de materias primas.
Los precios de los metales se han desplomado. En enero, el cobre tocó un mínimo de cinco años y medio y acumula un declive de 7,8% este año. El año pasado, el mineral de hierro perdió casi la mitad de su valor y ha retrocedido más de 10% desde el inicio de 2015.
Lonmin registró una pérdida de US$188 millones en el año fiscal concluido el 30 de septiembre, debido a la caída de los precios del platino y una huelga en sus minas sudafricanas. La semana pasada, el gigante suizo Glencore PLC anunció que venderá su participación de 23,9% en la empresa.
Algunas mineras se han replegado, cerrando minas y deshaciéndose de activos. Además de vender su participación en Lon-min, Glencore advirtió en enero que podría cerrar minas de carbón en Sudáfrica. Otras empresas, sin embargo, han elevado su producción.
En el segundo semestre de 2014, BHP Billiton, el mayor conglomerado minero del mundo tuvo una producción récord en ocho operaciones y cinco commodities. En los dos años previos a junio de 2015, la empresa prevé aumentar su producción total en 16%, pese a la debilidad de los precios. Por su parte, Rio Tinto elevó su producción de mineral de hierro y cobre el año pasado.
Analistas e inversionistas dicen que hay un límite al beneficio que las mineras pueden obtener del avance del dólar.
"La caída de las ventas, la rentabilidad y el flujo de caja afectará la capacidad de las empresas de servir su deuda", advierte Wen Li, analista sénior de CreditSights.
Aun así, algunas mineras ven un aspecto positivo, al menos en el corto plazo.
La estadounidense Freeport- McMoRan Inc., uno de los mayores productores de cobre del mundo, tiene una presencia global que incluye minas en Chile, Indonesia y Congo, lo que ha ayudado a mantener los costos bajo control. La empresa indicó que su costo promedio por unidad subirá sólo 1,3% este año.
Para el sector minero global, los ganadores relativos son empresas con operaciones fuera de EE.UU., afirma Rick de los Reyes, quien gestiona un portafolio de metales de US$1.500 millones para T. Rowe Price Group Inc.
"Si tuviera que elegir entre un productor de mineral de hierro en EE.UU. y uno en Australia, elegiría el de Australia", asegura De los Reyes.
John W. Miller, Rhiannon Hoyle y Tatyana Shumskv