El experimento Truss
La primera ministra británica Liz Truss y su ministro Kwasi Kwarteng tienen dos desafíos: el primero es convencer de que no son unos irresponsables fiscales, que no gastarán más de lo que tienen y que pagarán sus deudas; el segundo es que esos recursos efectivamente vayan a la inversión
- 4 minutos de lectura'
La primera ministra británica Liz Truss, inmediatamente después de asumir, anunció junto a su ministro Kwasi Kwarteng un plan económico que hizo que algunos pensaran que estábamos frente a un cambio revolucionario en la economía mundial. Kwarteng, como Lavagna, dice que hay que poner el foco principal en el crecimiento porque el crecimiento termina generando recursos al fisco y estabilizando la economía; como el kirchnerismo, hizo un programa para limitar durante dos inviernos el precio de las tarifas de luz y gas, y -como Ronald Reagan- implementó una enorme baja de impuestos para generar crecimiento. La mezcla generó un derrumbe del valor de la moneda británica porque los operadores financieros dudaron del mecanismo de aumentar el gasto con los subsidios a la energía y bajar los ingresos reduciendo impuestos. La primera ministra tuvo que dar marcha atrás en la baja del impuesto a los más ricos, que pagan el 45% de sus ganancias, y gracias a eso la libra, que había llegado al 1 a 1 con el dólar, como el peso con Cavallo, subió un poco. ¿Había fracasado la revolución económica?
La verdad es que, por más que muchos economistas esperan todo el tiempo recibir el rayo inspirador que les permita descubrir la rueda y cambiar el mundo, las personas en sociedad funcionan de acuerdo con ciertos parámetros y por eso en economía no hay magia. Algunos conceptos siempre se mantienen. En momentos de confusión como el presente, lo más recomendable es volver a los conocimientos básicos.
Es básico no olvidarse de que el crecimiento es producto de la inversión, que depende de dos cosas: la disponibilidad de recursos de todo tipo (recursos propios o de otros que los ponen o te los prestan) y los animal spirits de Keynes y Schumpeter, que son lo que genera la disposición a asumir riesgos. Entonces no hay política de crecimiento sin construir confianza para obtener recursos y sin bajar el umbral de riesgo, con medidas como la baja de impuestos y el cumplimiento de reglas claras y sencillas. Además, no hay crecimiento posible si el Estado que no produce no le deja recursos al sector privado, que es el que invierte asumiendo los riegos. En la Argentina, si no se baja el gasto público liberando recursos para la inversión productiva no hay posibilidad alguna de crecimiento.
El segundo conocimiento básico es que cuando no hay plata para pagar las deudas sólo hay dos caminos: el decretazo del default (que permite pagar menos) o cambiar deuda por deuda, es decir, una deuda de corto plazo por otra de largo plazo, más cara o barata. A los países les pasa lo mismo: se financian con impuestos, con deuda o con inflación, que es el impuesto a los ingresos quitándole valor a la moneda en la que esos ingresos se pagan.
En definitiva, se puede tener déficit sólo si tenés crédito, pero si querés crecimiento tenés que liberar fondos para aquellos que quieren invertir. No hay inversión sin ahorro. Todos podemos consumir o ahorrar y lo que la política económica debe lograr es que el ahorro público y privado vaya efectivamente a la inversión. Truss y Kwarteng parecen saber esto. Pareciera que creen que Gran Bretaña tiene crédito y que puede usarlo para aplicar esos recursos a la inversión por medio de la baja de impuestos y tarifas de energía. Tienen dos desafíos: el primero es convencer de que no son unos irresponsables fiscales, que no gastarán más de lo que tienen y que pagarán sus deudas, y el segundo es que esos recursos efectivamente vayan a la inversión. Por eso el ministro dijo: “Vamos a hacer que Gran Bretaña se mueva, bajando impuestos para crecer”, pero también que “el gobierno está comprometido con la sustentabilidad fiscal y mostraremos como la deuda bajará en el mediano plazo”. Si no se olvidan de lo básico y generan confianza, pueden tener éxito.
*El autor fue presidente provisional del Senado (2015-2019)
Temas
Otras noticias de Análisis
Más leídas de Economía
Descuentos y promociones. Cuándo es el Black Friday 2024
"Empezamos a sacar la cabeza del agua". Paladini amplía la inversión en Santa Fe para sumar producción
“Mucho interés”. Japón le pidió a la Argentina incluir en una lista un codiciado producto por sus consumidores para su posible exportación
El repliegue del Estado. El Gobierno quiere pasar al sector privado 9000 kilómetros de rutas con 46 obras sin terminar