El dólar sale de su letargo, pero es pronto para festejar
Es posible que el dólar esté disfrutando por fin de un respiro tras una mala racha de meses de duración. Sin embargo, los optimistas no deberían apresurarse a descorchar el champán.
Después de caer el miércoles de la semana pasada a su punto más bajo de este año frente al euro, el dólar se ha recuperado casi 4%, su mayor alza en un lapso de seis días desde noviembre. Por ahora, este repunte, según los corredores, tiene que ver más con un revés en las apuestas excesivamente pesimistas contra la moneda y vaivenes en los mercados de materias primas, que cualquier cambio en la opinión de que el dólar afronta grandes retos. En las últimas semanas, los inversionistas mostraron un pesimismo sin igual contra al dólar, lo que pudo verse en la cantidad de apuestas a su caída. Eso fue especialmente el caso con el euro. A medida que el dólar empezó a subir la semana pasada, muchos operadores se apresuraron a cerrar esas posiciones.
Los corredores aseguran que hubo una especie de espiral de retroalimentación entre las monedas y los commodities, donde los enormes declives en los precios de la plata y el crudo coincidieron con una carrera a corto plazo por comprar dólares.