El Boeing 787 había tenido problemas de confiabilidad
Algunas de las primeras aerolíneas en operar el 787 de Boeing Inc. tomaron medidas inusuales para mitigar los problemas de confiabilidad y mantener el cronograma de los flamantes aviones, incluso antes de que los reguladores estadounidenses ordenaran la semana pasada una amplia revisión del programa Dreamliner, según ejecutivos de la industria y registros de vuelos.
Las aerolíneas recurrieron a medidas creativas como obtener partes de repuesto de la línea de producción de Boeing Co. o utilizar aviones auxiliares para cumplir con el cronograma, tras haber promocionado con bombos y platillos la llegada de lo que algunos ejecutivos consideraban un avión que revolucionaría la industria, pese a su atrasada entrega después de más de tres años de demoras en el diseño y la producción.
Mientras tanto, durante el fin de semana surgieron más detalles sobre las conversaciones entre Boeing y funcionarios del gobierno estadounidense previas al anuncio del viernes de una amplia revisión de la Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés) de cómo se fabrica el 787