El auge bursátil latinoamericano sería fugaz
Tras un primer trimestre estelar, las bolsas de la región enfrentan grandes obstáculos
Los mercados latinoamericanos registraron un primer trimestre estelar, en el que los temores de un colapso financiero en Europa se desvanecieron a la vez que mejoraron las perspectivas de crecimiento de la economía de Estados Unidos. Pero eso no significa que el panorama sea optimista.
El índice MSCI de los mercados emergentes de América Latina de Morgan Stanley, que mide el rendimiento de los cinco principales mercados bursátiles de la región, aumentó 14% en el primer trimestre, superando el avance de 13% de sus pares asiáticos, pero a la zaga del 19,3% de los mercados emergentes de Europa.
Las monedas regionales también se recuperaron en el primer trimestre, con el fortalecimiento del peso mexicano en 9,2% frente al dólar, a 12,798 pesos, tras una caída de 11,5% en 2011. El real brasileño avanzó un modesto 2,2% frente al dólar, a 1,822 reales, luego de una depreciación de 11% el año pasado.
Entre otros mercados latinoamericanos, el índice bursátil chileno IPSA, cerró el primer trimestre con una ganancia de 12,3%, mientras que el peso se apreció 6,2%, ayudado por el alza de los precios del cobre. A su vez, Colcap, índice bursátil de Colombia, avanzó 11% gracias en gran parte al aumento de los precios del crudo y la previsión de un incremento en la producción del petróleo colombiano, en tanto que el peso se apreció 8% frente al dólar. En Perú, el Índice General de la Bolsa de Lima subió 21% en el trimestre y el sol peruano ganó 1% frente al dólar, en medio del fortalecimiento del sector minero y una sólida demanda interna que impulsó al sector industrial.
"El mundo se ve un poco diferente al final del primer trimestre en comparación con finales del año pasado", expresó Brown Brothers Harriman en su informe de divisas del segundo trimestre. "La combinación del fuerte crecimiento de EE.UU. y la agresiva provisión de liquidez por parte del Banco Central Europeo definitivamente sacó a la economía mundial del abismo al que se enfrentaba a finales de 2011", añadió.
Sin embargo, las acciones de la región podrían tener dificultades para acumular más ganancias ahora que comienzan a soplar vientos en contra a nivel global y local. Europa se enfrenta todavía a grandes desafíos fiscales a pesar de haber superado la cesación de pagos de Grecia. Los datos apuntan a una desaceleración en China, que plantea preguntas sobre el apetito del país asiático por los productos básicos de América del Sur. Y aunque una mayor apreciación del peso y del real no sería un factor de riesgo para las acciones por sí mismo, algunos especialistas temen que los gobiernos podrían tomar medidas para revertir la tendencia, como la potencial imposición de controles de capital.
Los inversionistas podrían volverse renuentes a impulsar más a los dos mayores mercados bursátiles de la región —México y Brasil—, al considerar que la relación precio-ganancias de varios componentes clave es demasiado forzada.
El índice IPC de las acciones más negociadas de México cerró marzo con un récord de 39.521,24 puntos, una ganancia de 6,6% para el primer trimestre, borrando su pérdida de 3,8% en 2011. El índice bursátil brasileño Ibovespa cerró el primer trimestre en 64.510,97 puntos, recuperando 14% tras una caída de 18,1% en 2011.
Sin embargo, una mejora de la economía de EE.UU. podría proporcionar más potencia a México, cuya economía, concentrada en gran medida en la manufactura, envía 80% de las exportaciones a EE.UU. Aunque un avance adicional del peso podría representar un elemento negativo para los fabricantes, muchos analistas no esperan una apreciación notable de la moneda mexicana antes de la elección presidencial que el país celebrará en julio próximo (ver nota relacionada).
En general, las acciones mexicanas han sido apoyadas por algunas fuertes ganancias corporativas y la creciente demanda de los consumidores. En tanto, la incertidumbre sobre los problemas económicos de Europa ha hecho de México una "apuesta defensiva" para los inversionistas, según Banco Santander, señalando una baja exposición del país a Europa y sus sólidas finanzas públicas.
Las inversiones en empresas orientadas hacia el consumidor aumentaron durante el primer trimestre, con un alza de 13% para el minorista Wal-Mart de México. Pero Santander dice que esto ha hecho subir la valoración de las acciones de alto nivel, recomendando que los inversionistas reduzcan la exposición.