El aceite de oliva apunta a la alta gama

Consolidado ya el aceite de oliva en la cultura gourmet local, varias marcas han encarado el desafío de imponer su versión premium, como ya ha ocurrido con otros productos. Es así que en los últimos años varias bodegas reconocidas se han volcado a la producción de este tipo de aceite y hasta se animaron a presentar propuestas de lujo para los paladares más exquisitos.

Una de las bodegas precursoras en el mundo de las aceites de oliva es Familia Zuccardi. En 2004 lanzaron su línea de Tres Varietales. Dentro del mundo premium, su apuesta más original es Zuelo Novello. Se trata de un aceite de primera campaña que llega al mercado sin filtrar.

Sólo se producen 3000 botellas anuales de Zuelo Novello, que se comercializan entre los meses de mayo y julio. Pueden conseguirse en puntos de venta exclusivos. La botella de 375 cm3 costaba $ 38 en la campaña anterior. Eso sí, para saborear la nueva partida y conocer su precio habrá que esperar hasta mayo de este año.

"Es un producto que crece a partir del boca en boca", explica Miguel Zuccardi, director del negocio de aceite de oliva de Bodega Zuccardi. "El mercado del aceite de oliva premium en la Argentina tiene mucho potencial. Nosotros apuntamos a educar el paladar de la gente, para que conozca estos productos", dice el productor.

La bodega Dante Robino, de la familia Squassini, comercializa la línea de Aceite de Oliva Extra Virgen Filippo Berio. Lo más novedoso de esta marca es la presentación del producto en spray, algo pensado para condimentar los platos en forma individual. Su envase es de 200 cm3 y cuesta $ 39. Rafael Squassini, su director comercial, ratifica la tendencia. "El mercado de los aceites de oliva premium está en franca expansión. Es un negocio de nicho", explica.

La tradicional bodega Luigi Bosca también incursionó en el mundo de los olivares premium. A comienzos del año pasado presentó su exclusiva marca Essencia Luigi Bosca de aceite de oliva extra virgen de primera prensada. Este producto se obtiene a partir del fruto de olivos cultivados hace más de 50 años en la finca que la familia Arizu, propietaria de la bodega, tiene en Maipú, Mendoza.

Desde Luigi Bosca detallan que se trata de una línea conformada por tres exclusivos blends: Fruttato intenso (80% Frantoio, 15% Manzanilla y 5% Arauco), que tiene un final dulce; Fruttato medio (80% Frantoio, 15% de Empeltre y 5% Arauco), con un sabor final amargo; y Fruttato suave (95% de Arbequina y 5% de Arauco), con un final picante y levemente amargo.

Cada uno de estos blends puede adquirirse en vinotecas y se presentan en botella de vidrio de 250 cm3, con un precio sugerido de $ 50. Además hay otra opción, ideal para regalar, el estuche Essencia de Luigi Bosca, una caja de madera que incluye los tres productos y que cuesta aproximadamente $ 230.

Los más fanáticos de este placer culinario también eligen los blends producidos por María Rávida. Esta enóloga mendocina ha logrado elaborar a partir de sus propios olivares un aceite de oliva que parece un trabajo de autor. " Es un aceite complejo y equilibrado, que revela su carácter potente y gentil al mismo tiempo", explica la experta.

De aroma frutado y con un sabor amargo y picante, estos blends fueron premiados en dos oportunidades. La botella de 500 cm3 tiene un precio de $ 60.

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