Devaluación. El peso argentino es la moneda más golpeada entre las emergentes en el día y lo que va del año
Hay dos hitos monetarios en los que la Argentina salió primera en el último tiempo. El peso argentino no solo es el billete emergente que más perdió frente al dólar desde que inició el año, sino también el que más sufrió hoy un día difícil para monedas similares.
A las 15:00, hora de cierre de la rueda local, el peso argentino está primero en el podio de las monedas de países emergentes que más perdieron contra el dólar (2,48%) en todo el mundo. Le siguen, hasta el momento, la lira turca (1,02%) y la rupia india (0,56%).
Desde el 2 de enero hasta ayer, el dólar se apreció un 16,74% frente al peso; un 8,70% frente a la lira turca; un 5,28% frente al real; un 2,81% frente al won surcoreano y un 1,85% frente al esloti polaco.
Todas esas monedas pertenecen a países clasificados como "mercado emergente " por la calificadora MSCI, y ese es el ránking de las cinco que más perdieron contra el billete estadounidense.
El avance del dólar contra el peso argentino dobla al que tuvo con la peor performance, la lira turca (la misma que generó dolores de cabeza para mercados similares, y especialmente para la Argentina, en 2018).
Para explicar el camino que transitaron las monedas de mercados emergentes desde el 2 de enero hasta hoy, Diego Martínez Burzaco, de MB Inversiones, grafica tres períodos. El primero, en enero, donde se vio un "rally alcista" en bonos y acciones de estos países, con algo de revalorización de las monedas. De hecho, en su versión mayorista, en la Argentina a inicios de mes el dólar cotizaba a $37,64 y, al final, a $37,31.
En febrero y marzo, añade, hubo una corrección que llevó a una "tendencia indefinida". "Después de enero, todo empieza a enrarecerse un poco porque comenzaron los temores de desaceleración de la economía global y la estadounidense. Quizás la única buena noticia para los emergentes fue que la Fed anunció que relajaría su política monetaria", detalla.
En abril la tendencia se define en contra de las monedas de mercados emergentes, según Martínez Burzaco. Los motivos son dos: los datos macroeconómicos de Europa estuvieron por debajo de las expectativas "y eso deja en una posición relativa más débil al euro contra el dólar", pero también las empresas estadounidenses presentaron balances "que están superando las expectativas", lo que hace suponer que la economía del país norteamericano "no está débil".
"Eso hace que el dólar se fortalezca y se empiece a revalorizar contra las principales monedas desarrolladas del mundo y contra las emergentes. Estamos viendo un mundo muy 'vendedor' en mercados emergentes", resume.