Dinero por votos
Un estudio demuestra su relación
A nadie que estudie las cuentas del Estado se le escapa la relación que existe entre el gasto público y su utilización electoral.
¿Es posible que el direccionamiento de fondos públicos influya en el resultado de las elecciones? ¿Está comprobado que el clientelismo político sea efectivo a la hora de contar votos?
Rápidamente, y para despejar la incógnita, la respuesta es que sí.
Esa fue una de las premisas que se propusieron Valeria Brusco, investigadora del Centro de Estudios Políticos y Sociales y del Conicet; Marcelo Nazareno, de la Universidad de Córdoba, y Susan Stokes, de la universidad estadounidense de Yale, cuando iniciaron la investigación "Réditos y peligros electorales del gasto público en la Argentina", estudio subsidiado por la National Science Foundation, de los Estados Unidos, y que aparecerá en el próximo número de la revista Desarrollo Económico.
"Los funcionarios argentinos, en ciertas condiciones, utilizan criterios discriminatorios en el reparto de bienes públicos, con el objetivo de movilizar el apoyo electoral", es una de las conclusiones del estudio.
Además, agrega: "En el caso del Plan Trabajar, esta manipulación se intensificó notablemente cuando se acercaban elecciones".
El estudio -que concluyó a fines de mayo pasado- relevó 1154 municipios ubicados Buenos Aires, Catamarca, Chubut, Córdoba, La Pampa, Misiones, y Santa Fe, incluyó datos electorales de 1995 y de 1999.
"Con los planes Trabajar, hubo una discriminación positiva hacia las provincias peronistas. Había una relación entre ser peronista y tener un plan trabajar", dijo Brusco.
"Ahora vamos a empezar a trabajar con el Plan Jefes y Jefas, que es un monumental programa si se lo compara con lo que en su momento fue el Plan Trabajar", agregó, en diálogo con LA NACION, desde Córdoba.
El trabajo aborda varios aspectos, como el clientelismo político y la falta de igualdad en el momento de repartir los subsidios.
"El hecho de que sean fondos de una jurisdicción, la Nación por caso, distinta de la que los distribuye a las personas los hace manipulables", añadió.
"Pero cuidado -advierte la investigadora-. La actividad de subsidiar por parte de un Estado es una de las funciones fundamentales ya que debe asistir a sectores adonde la actividad privada le cuesta llegar."
Para Brusco, la discusión debería pasar por la forma de subsidiar a algunos sectores para tratar de encontrar fórmulas más horizontales.
"La discusión podría darse si pensamos que otros países optan por subsidiar universalmente a ciertas categorías de personas", sostuvo.
A modo de ejemplo, Brusco apeló a los desempleados. "En otros países, tienen el derecho garantizado a recurrir a la bolsa de empleo y, si no hay ofertas de trabajo, cobrar un subsidio que les permita vivir. Aquí se enfrentó la situación crítica de pobreza con estos subsidios, que quedan a medio camino entre la renta básica y el subsidio por desempleo", finalizó.