Día del Niño: cuotas, descuentos y regalos más baratos, los ardides de la clase media para enfrentar la recesión

Marisa Marastoni (60), vecina de San Antonio de Padua, acostumbra todos los años hacerle un regalo a sus cinco nietos por el Día del Niño. En las últimas semanas, recorrió varios negocios buscando precios que se adecuen a su bolsillo. Pero la búsqueda no fue exitosa: “Es un gasto imposible de afrontar, cualquier cosa sale $10.000 o más, ¿cómo hago para ser justa con todos?”, cuenta a LA NACION. “Solo me alcanza para comprar golosinas”, sentencia, angustiada.

En las vísperas del Día del Niño, casos similares a los de Marisa se repiten entre familias argentinas de clase media. En julio, la inflación fue de un 4%. En lo que respecta al poder adquisitivo, según el último informe de la Secretaría de Trabajo, la capacidad de compra del promedio de los salarios creció 7,5% en el acumulado de los cinco primeros meses del año, pero el salario real medio se encontraba un 4,6% por debajo del observado en noviembre de 2023.

En este contexto, las familias se inclinan por productos de precios accesibles, buscan ofertas y descuentos o, en el peor de los escenarios, restringen por completo la compra de regalos. “Tiene que ver con una contracción fuerte de los ingresos. Si bien es cierto que, mirando el corte de este año, los salarios empezaron a ganarle a la inflación, todavía están atrasados respecto de noviembre. Esto también explica por qué muchas personas eligen diferir pagos con tarjeta de crédito y otras formas de endeudamiento”, indica Sofía Ruano, ingeniera especializada en consumo.

Al respecto, Claudio Caprarulo, director de la consultora Analytica, sostiene que, a pesar de que el financiamiento aparece como una suerte de ayuda para potenciar las ventas, “no es suficiente para revertir la caída del consumo producida por la pérdida del poder adquisitivo”.

Regalos económicos

Para Ana, psicóloga de 39 años, este Día del Niño también será diferente. “Con mi pareja acordamos un regalo más modesto para nuestra hija. Estamos tratando de encontrar opciones para compartir en familia, como algún libro o un juego de mesa”, cuenta, y dice que son una “locura” los precios en las jugueterías.

Si bien el sector registró una caída del 20% en las ventas en el primer semestre de 2024, en las últimas semanas se notó una leve mejoría del nivel de actividad, por los pedidos de reposición por parte de las jugueterías a sus proveedores, de acuerdo a un comunicado de la Cámara Argentina de la Industria del Juguete (CAIJ). Para incrementar las ventas, la CAIJ gestionó promociones y descuentos con las principales entidades bancarias, y la expectativa es al menos alcanzar las ventas del año pasado, medidas en unidades. “Sería un logro en función de cómo viene la industria en este contexto”, dice Julián Benítez, gerente de Relaciones Institucionales y Comercio Exterior de CAIJ. Y añade: “Estamos resignando margen de ganancia y achicando gastos”, agrega.

Dados los ajustados bolsillos de las familias, encargados y dueños de jugueterías consultados por LA NACION destacan los juegos de mesa, peluches, masas estirables y pizarras mágicas como algunas de las opciones más económicas. “El ticket promedio viene siendo de $20.000. Hay muchas cosas que la gente dejó de comprar, como los rodados y triciclos, que salen, como mínimo, $50.000″, detalla Ariel Ortín, dueño del negocio.

A su vez, dice que 2024 es el primer año que no tuvieron que reponer mercadería desde Navidad: “Año tras año, la cosa es peor. No logramos repuntar”. En El Mundo del Juguete reconocen que el ticket promedio ronda los $50.000, y que las ventas en general cayeron entre un 8% y un 12% en el primer semestre. “Una buena alternativa son las pizarras mágicas que, dependiendo la marca, se pueden conseguir a $3500 o $4200″, dice Diego Sarago, ecommerce manager de la cadena, quien también observa creciente demanda por peluches, que van desde los $3000 hasta $9500.

Además de recomendar los mismos productos, Cristian Patrignoni, gerente comercial de Kinderland, remarca un cambio de hábito entre consumidores. “Las ventas tienden a bajar cada vez más con el pasar de las temporadas. Antes, la gente compraba los últimos 10 o 15 días a la fecha, hoy tenemos leves repuntes en los últimos días nada más”, precisa.

Formas de pago

Alicia Flores (62) y Alejandro Damore (76), jubilados y vecinos de Saavedra, dicen que los precios de los juguetes “se fueron por las nubes”. “Tenemos cuatro nietos y estamos tratando de no gastar más de $8000 por cada uno”, comenta Alicia. “Regalar un juguete es un lujo hoy”, se lamenta Alejandro. Por eso, planean pagar las compras con tarjeta de crédito en cuotas, un hábito de consumo que viene en aumento en la gran mayoría de los rubros.

Milena Bafico, editora de libros y periodista de 33 años, también piensa usar la tarjeta para el regalo de su hijo, y espera gastar “entre $20.000 y $25.000″. Florencia Cárdenas, responsable de Marketing de Isakito, confirma que los consumidores eligen cada vez más las cuotas y las promociones de bancos o billeteras virtuales. “Viene siendo un medio de pago súper fuerte”, dice.

Compras online

En lo que respecta a las ventas online, en los últimos 10 días se vendieron más de 2,6 millones de productos con un ticket promedio de $71.610, según un informe de la plataforma Tiendanube. Entre las categorías más solicitadas, se destacan los juegos estilo montessori, de encastre y de mesa, pizarras, libretas de dibujo, patadcletas y muñecos. El 86% de las compras se hizo con tarjeta de crédito, dice Franco Radavero, country manager de Tiendanube Argentina. A su vez, detalla que en las últimas dos semanas, el 55% de las ventas tuvo algún tipo de descuento o promoción.

Desde Mercado Libre indican que las ventas crecieron un 9% en cantidad de unidades en comparación con el Día del Niño de 2023. A su vez, la cantidad de productos vendidos aumentó un 37% en las dos semanas previas a la campaña. “Las ventas online vienen creciendo un poco más que en las sucursales, pero en el sector en general está todo bastante paralizado y cada uno va sobrellevando la situación como puede”, dice Sarago, de El Mundo del Juguete.

En la misma línea, Patrignoni, de la cadena Kinderland, resume: “La Argentina es un país donde la crisis es recurrente. Siempre uno tiene que estar adaptándose o reinventarse a lo que demanda el mercado para cada momento”.

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