Deuda en pesos. Refinancian lo que vence, pero cae otra vez la captación extra
El clima de incertidumbre que se reinstaló en la economía tras las últimas medidas cambiarias redujo notablemente el apetito que los agentes económicos locales venían mostrando por la deuda en pesos emitida por el Gobierno en los últimos meses, en especial, cuando dejó en claro su vocación de regularizar ese frente financiero para evitar recaer en episodios de default.
El fenómeno, sobre el que LA NACION viene advirtiendo desde comienzos de mes, quedó confirmado hoy, cuando el Ministerio de Economía recibió -por segunda vez consecutiva- ofertas de compra por los títulos que licitó en el mercado por sólo 1,22 veces el monto que buscaba.
Para tener una relación de la retracción de la demanda hay que considerar que en las licitaciones de agosto había recibido ofertas de compra que duplicaban el financiamiento que había salido a buscar, ya sea para pagar deuda que vencía como para tomar recursos genuinos del mercado. Tanto que, en un comunicado emitido entonces, Economía destacó que había cerrado ese mes logrando un porcentaje de refinanciamiento de la deuda en pesos del 158%, "el mayor del año".
El balance de septiembre marcará una disminución en ese saludable ratio, que implica que cada peso que se pide a los inversores evita que se fuerce más la "máquina" de emisión del Banco Central (BCRA), atenunando el financiamiento monetario espúreo. Si bien el Tesoro logró refinanciar los $232.000 millones en títulos de deuda que vencían (75% de los cuales estaban en manos de inversores privados), apenas logró captar unos $6000 millones en nuevo financiamiento.
El menor interés se reflejó, además, en una nueva reducción en el número de ofertas de compra recibidas: de los 525 pedidos de suscripción promedio recibidos en agosto se pasó a 371, 289 y 267 en las tres licitaciones realizadas en el curso de este mes.
Para los analistas, es muy valorable que el Gobierno haya logrado seguir refinanciando su deuda en pesos en la plaza local sin problemas. Pero destacan a la vez que "el impacto que la crisis de confianza actual tuvo en los precios de los activos tiende a complicar la estrategia de financiamiento del Gobierno o a convalidar tasas de interés algo más altas", explicó Santiago López Alfaro, de Delphos Investment.
"Con los bonos cortos en dólares rindiendo arriba del 14%, llega un momento en que si le decís a un inversor que preferís un bono corto en pesos al 30% o en dólares al 14% (aunque sea a más plazo) elige lo segundo. Ese arbitraje es el que también empezó a impactar sobre la curva de tasas de bonos con CER en el mercado", completó.
En Economía prefirieron valorar la parte llena del vaso. "En la licitación del día el comportamiento del mercado fue satisfactorio y se alcanzó un resultado destacado. Se recibieron ofertas por $61.801 millones, adjudicándose la totalidad de lo ofertado, lo que equivale a captar $60.338 millones", explicó esa cartera en su cuenta de Twitter.
Además destacaron que la operación permitió renovar $45.000 millones en títulos de deuda que le vencen esta semana, "y permite cubrir pagos efectuados desde la última licitación por cerca de 12.000 millones de pesos por intereses de distintos instrumentos de mercado", reportó por separado la cartera de Hacienda.
La estrategia oficial ante el retraimiento que muestra la oferta privada, por el momento, fue pedirles a los entes públicos con excedentes financieros una mayor participación en las últimas subastas. Pero en el mercado creen que esa "manta corta" obligará a que deban replantearse las tasas que ofrecen, en la medida que no haya novedades que traigan calma al mercado.
El detalle de tasas y plazos
Por lo pronto, para la subasta de hoy, a liquidarse el miércoles, el Gobierno había ofrecido reabrir dos Letras y un bono del Tesoro por hasta $50.000 millones y, como se dijo, recibió ofertas de compra por $61.801 millones.
Adjudicó $19.578 millones en una Letra a descuento (Ledes) que vence en 149 días (el 26 de febrero de 2021) al precio de corte previsto de $874,99 por cada lámina de $1000, que representa una tasa nominal anual del 35%. Y captó $26.613 millones en Letras ajustadas por inflación (LeCer) con amortización en igual fecha a $1018,61 pesos y una tasa adicional del 0,65%.
Además, tomó otros $18.611 millones con la reapertura del Bono del Tesoro ajustable por tasa Badlar privada +100 puntos, que vence en 10 meses (en 2021), por el que abonó una tasa del 33,05% nominal anual.