Cuáles serán los sectores que ganarán en 2023, pese a que al país le iría mal

El panorama de 2023 es poco alentador para los especialistas: los análisis anticipan un empeoramiento de las variables que miden la economía. El pronóstico de la consultora Abeceb marca una desaceleración en el crecimiento, que pasará de 5,5% en 2022 a 1% el año próximo; una baja en el consumo, que caerá de 9% a 1,7% y una inflación elevada, por encima del 85%. En este contexto, sin embargo, detectaron que algunos sectores continuarán viéndose beneficiados por distorsiones microeconómicas.

Se trata de oportunidades que se generan a partir de políticas que, de acuerdo con el estudio económico, impactan negativamente en el largo plazo. “Son factores que, en general, terminan restando. Te juegan a favor de actividades determinadas, pero las distorsiones terminan ajustando”, explicó Soledad Pérez Duhalde, directora de operaciones de Abeceb.

Estos sectores fueron “motores de crecimiento” este año. Continuarán siéndolo en 2023, por la configuración de múltiples variables, pero perderán combustible producto de la sequía, las fuertes restricciones a las importaciones, la desaceleración del crecimiento, la reducción de ingresos y, por ende, del consumo. Estas trabas producirán una pérdida de impulso en la economía real.

De igual manera, son tres los factores que podrían ser “oportunidades para actividades determinadas”.

En primer lugar, la escasez de insumos importados, puede generar incentivos –probablemente transitorios– para actividades de sustitución de importaciones como en el caso de la industria automotriz, turismo, textil y confecciones, metalmecánica y maquinaria agrícola, que ocuparon posiciones con la industria nacional por el cepo importador.

Segundo, desde Abeceb destacaron que es posible que la falta de capacidad de ahorro busque nuevas alternativas para conservar valor ante la alta inflación y se refugie en el sector inmobiliario, la construcción y/o la compra de bienes de semi durables”. Además, el turismo y el consumo (HORECA, hoteles, restaurantes) puede encontrarse favorecido por mayor turismo local ante aumentos en los costos de salida.

Por último, por influencia de la situación global, se revaloriza el rol de países con ventajas comparativas en energía y alimentos y “está en marcha una relocalización de cadenas de valor que otorga mayor peso a los criterios geopolíticos”.

Los seis líderes del ranking

En 2022 los seis sectores que más crecieron continuarán siendo líderes, pero su performance ya no será tan vigorosa en 2023. Estos fueron la producción automotriz, con un crecimiento del 24,8%; las exportaciones mineras, con el 18%; la producción de agroquímicos, con 13,8%; las exportaciones agrícolas, con 13%; la producción de aparatos de uso doméstico, con el 12,5% y de petróleo, con un 11,5%.

• Producción automotriz: Abeceb prevé que crezca un 8,3%, frente a un mercado interno “acotado por la escasez de modelos importados”, la pérdida de poder adquisitivo, y mercados en Latinoamérica, que desacelerarían su ritmo de crecimiento. Significa una pérdida de 16,5 puntos porcentuales de crecimiento, frente a 2022, pero 7,3 puntos porcentuales por encima del nivel general de crecimiento de la economía.
• Producción de aparatos domésticos y electrónica de consumo: mostrarán un incremento del 7,6% y 5% respectivamente. “Pese al contexto de pérdida, poder de compra de los salarios y faltas de opciones de resguardo de valor, los consumidores continuarán buscando alternativas de consumo para deshacerse de los pesos, aprovechando las promociones y los programas de facilidades de pago (planes Ahora)”, explicaron desde la consultora.
• Construcción: cerrará 2022 con una mejora del 5,7% y el año próximo desaceleraría al 3%.

• Producción industrial: despide el año con un incremento del 6,3%, y comenzará 2023 con una estimación de mejora del 2,1%, en un contexto de alza de costos y dificultades para importación de insumos, tensiones globales por insumos difundidos y alza inflacionaria.
• Exportaciones mineras: se mantendrán cercana al 4%. El crecimiento de la producción de gas el próximo año rondará entre el 4,5% y 6%, y “encontrarán como limitante la capacidad transporte del sistema”. La variación dependerá de la terminación del gasoducto Néstor Kirchner, en un contexto de precios internacionales a la baja.
• Producción de petróleo crudo: en 2023 crecerá un 13% debido a una mayor exportación y alta productividad en Vaca Muerta.

“No vamos a ver un cambio de rumbo favorable, pero si heterogeneidades. Son experiencias que observamos en los años 60, cuando había inflación acelerada, protección arancelaria, falta de acceso al mercado de capitales y de alternativas de ahorro. Es una desaceleración generalizada con algunos ganadores”, agregó Pérez Duhalde.

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