Cuál es el dato de inflación que los economistas esperan antes de las elecciones
Las consultoras privadas estiman que la suba de precios en octubre superará el 3% y que acumulará un 40% en diez meses; salud, ropa y alimentos, estarían entre los aumentos más importantes del mes
- 5 minutos de lectura'
Pese a mantener pisadas las tarifas de los servicios públicos y el dólar oficial durante casi todo el año, y tras la decisión del Gobierno de congelar desde el mes pasado unos 1500 productos, economistas privados calculan que la inflación de octubre osciló entre 3% y 3,5%.
Si la variación de los precios se mantuvo o no en esas cifras se confirmará el 11 de noviembre, tres días antes de las elecciones, cuando el Indec difunda el IPC oficial.
Un dato por encima del 3%, algo que descuentan prácticamente todas las consultoras privadas, llevaría el acumulado del año al 40%, cerca del 41,5%, la nueva meta prevista por el ministro de Economía, Martín Guzmán para este año en el proyecto de presupuesto 2022. Ese pronóstico reemplazó al 29% esbozado por el titular del Palacio de Hacienda en septiembre de 2020. El Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM) espera una suba de 48,6% este año.
Más allá de una inercia que el Gobierno parece no poder frenar, los analistas privados advierten sobre dos fenómenos que se montan sobre el preocupante avance de los precios y su impacto en los ingresos de los argentinos. El primero tiene que ver con la enorme distorsión de precios relativos en la economía local que dificulta cada vez más futuras correcciones. El segundo es el impacto que un mundo cada vez más inflacionario puede tener sobre la Argentina.
Varias consultoras registraron una aceleración de precios de los alimentos en las primeras semanas del mes. Se dio como anticipo a lo que el sector privado preveía tras las PASO y que se materializó con el congelamiento impuesto por Roberto Feletti. Esas alzas iniciales se ralentizaron, según mostraron algunos relevamientos privados, en la segunda quincena del mes.
Tal visión coincide con la registrada en la Secretaría de Comercio Interior, que informó anteayer que durante los primeros 19 días de octubre los precios relevados experimentaron un alza de 2,1%, mientras que a partir del miércoles 20 los mismos mostraron una caída de 7,6%.
Más allá de esos vaivenes, los economistas privados seguían registrando aumentos en el capítulo de Alimentos y bebidas, el que más peso tiene en el IPC, cercanos al 3%. En septiembre fue de 2,9%. En Comercio Interior esperaban que volviera a la zona de agosto: 1,5%.
La suba más importante del mes pasado, según C&T, fue en Salud. Al alza de las prepagas, se le sumó el de medicamentos. Detrás, como en los últimos meses, apareció la ropa.
“El mes había arrancado con una variación mayor, pero fue perdiendo algo de impulso, sobre todo en la segunda mitad del mes a partir del congelamiento de precios decretado por el gobierno nacional, lo que se vio especialmente reflejado en alimentos y bebidas”, afirmaron en esa consultora privada. “El rubro, que por momentos creció más de 4% con relación a igual período de septiembre, quedó algo por debajo del promedio, en 3,3%”, completaron. En C&T calcularon un alza para el mes de 3,6% y un alza interanual al 52,1%. En FIEL, que veía un índice general cercano al 3%, también habían registrado algunas caídas en alimentos, según contaron.
En la consultora de Orlando Ferreres & Asociados, al cierre de la tercera semana, la suba de los precios rondaba 2,4% con una inflación núcleo –no contempla precios regulados ni estacionales– de 2,7%. “La núcleo da seguro por encima de 3%”, afirmó el economista Fausto Spotorno.
Para la consultora LCG el piso del mes fue de 3,5%, mientras los alimentos mostrarían subas –según sus relevamientos– de cerca de 4%, lejos de la desaceleración captada por algunos. En Equilibra trabajan con un avance de 3,5%, mientras que en GRA Consultores, de 3,3%.
“Hacemos cortes quincenales. En la primera quincena, la inflación tenía un ritmo superior al 3% mensual. Sobre eso vimos que los bienes de consumo masivo aceleraron sus ritmos de aumentos previo al congelamiento”, contó Federico Moll, economista jefe de Ecolatina, que prevé un piso de 3,5% para el mes. Cerca, un poco más abajo, EcoGo estimó un alza de 3,2%.
Tal inercia inflacionaria sumada a la política económica oficial, comenzó a provocar una profundización de la distorsión de precios relativos. “La inflación, al captar la variación del IPC, no refleja completamente los desajustes en precios relativos. El dato de 52,5% interanual se quedó ‘corto’ en rubros puntuales que dependen de insumos dolarizados y del sector de bienes transables”, afirmó el economista Nery Perchisini, de GMA Capital.
“A fines de septiembre pasado, los movimientos anuales en el dólar oficial, el CCL y los precios regulados fueron un contrapeso del resto de los componentes de precios. En las antípodas, la construcción, la carne e indumentaria lideraron las subas. El riesgo de perpetuar y profundizar desequilibrios, en especial el tarifario, es que aumenta la complejidad y la viabilidad política de una corrección posterior”, cerró el especialista con relación a los desafíos locales en el horizonte.
Pero también se acercan peligros que son globales. El economista jefe de Arriazu Macroanalistas, Fernando Marengo, describió el fin se semana el impacto de los planes de estímulo por la pandemia en el consumo en tiempos de una oferta limitada en países desarrollados y describió cómo esa inflación será importada a los emergentes. Incluyó en su columna en Perfil un dato: el petróleo subió 34% respecto de su mínimo reciente, en agosto, y alcanzó su valor máximo en siete años.
Otras noticias de Comunidad de Negocios
Más leídas de Economía
Habrá cambios. Cuánto costará el dólar tarjeta en enero
Advertencia. El CEO de una cadena francesa de supermercados no quiere comprar carne del Mercosur
Excelencia Agropecuaria. A pura emoción, se consagraron los mejores del campo en 2024
Plazo fijo. Cuál es la tasa de interés banco por banco este miércoles 20 de noviembre