Terminal Puerto Rosario busca explotar su privilegiado hinterland
La empresa integrada por Vicentín y el grupo chileno Ultramar opera ya con tres servicios regulares y apuesta a un fuerte desarrollo comercial
Diego Fernández-Querejazu, gerente general de Terminal Puerto Rosario SA -concesionaria de la operación de contenedores, integrada en un 70% por Vicentín y en un 30% por el grupo chileno Ultramar, a cargo del management- puede reflejar un balance operativo con un fuerte incremento de la mano de los servicios que recalan en los muelles.
"Nos preparamos para esto. Lo habíamos proyectado, siempre con incertidumbre, pero los planes se vienen cumpliendo", destacó el directivo de TPR respecto del movimiento de carga contenedorizada, que creció ciento por ciento. TPR está trabajando con tres servicios de línea, dedicados por Hamburg Süd, Maersk y MSC, más un feeder de Nobleza Naviera que conecta Rosario con Montevideo.
Hace un tiempo ya, TPR realizó una serie de trabajos que puso a prueba con éxito su capacidad de diversificación de cargas de la mano de la operación de autos con General Motors. "Se hizo una prueba para la automotriz para resolver un problema logístico puntual que tuvieron en otros puertos. No se están haciendo operaciones regulares en Rosario porque no están dadas las condiciones para hacerlo. El mercado está principalmente en la zona del Gran Buenos Aires y Zárate, en comparación, tiene la fortaleza de una mejor ubicación", reconoció Fernández-Querejazu.
¿Cómo se reparte la actividad en TPRen la actualidad?
-La carga general y los graneles siguen representando el volumen más importante, con el 60% de la actividad (entre sólidos y líquidos) y el resto lo representan los contenedores.
¿Esta es la ecuación ideal?
-Estamos enfocados a la actividad de contenedores. A pesar de la ubicación y del hinterland privilegiado, hay mucha carga que todavía no usa el puerto, pero estamos convencidos del potencial que se va a crear en TPR de la mano de la reactivación económica. Tenemos mucha capacidad. De hecho, según nuestro plan maestro, estamos en condiciones de atender 25 millones de toneladas, y hoy estamos en 3,5 millones. El techo de esta terminal está esta muy lejos.
¿Cómo fue la evolución en el movimiento de contenedores?
-En 2015 operamos 30.000 TEU y para este año proyectamos acercarnos a los 50.000.
¿Cómo es la relación comercial de la terminal con las cargas?
-Es una situación con varios frentes para trabajar. Uno es generar en TPR más capacidad de transferencia, y éste es el proceso en el que estamos invirtiendo en infraestructura para lograr plazoletas y equipamientos capaces de atender hasta 120.000 TEU. La terminal todavía debe terminar de desarrollar la oferta necesaria para captar volumen. En lo comercial desarrollamos un equipo que está dedicado a recorrer el hinterland para reunirse con clientes y despertar el interés en la terminal. Y el tercer factor tiene que ver con el diálogo constante con las líneas marítimas para convencerlas de mover la carga de Rosario.
¿Qué etapas siguen de acuerdo con el plan maestro de la terminal?
-El proyecto íntegramente fue estudiado entre 2012 y 2013, con una proyección a largo plazo para el puerto. Estamos en la etapa de ordenar el proceso de inversiones en infraestructura. Ya cumplimos con la etapa inicial de ordenamiento interno institucional y operativo y arrancamos con la primera gran etapa de inversiones en infraestructura para el desarrollo de la terminal de contenedores, que este año incluye desembolsos del orden de los 13 a 14 millones de dólares.