Logística reversa y tendencia global
Habitualmente, el pallet se consideraba una complicación a la hora de hacer una logística reversa porque se perdían o volvían rotos.
Esta situación también cambia con el ecopallet.
Según su creador, Jorge Torres, "una vez colocado en el circuito de distribución, su logística inversa requiere de menores costos por su bajo peso (3 kilogramos) y pequeño volumen".
En efecto, se entrega a los usuarios en unidades de menor porte por la ventaja de entregarse arrollado, ocupando menos volumen o incorporando casi cinco veces más unidades por vehículo que su equivalente en madera.
Por ejemplo, explica el presidente de la empresa MacPallet, en un ejercicio similar al realizado con el pallet de madera, para iguales despachos de cemento, requeriría un movimiento de carga por pallet de 180.000.000 kilogramos, con un ahorro de 78 por ciento de materiales transportados y otros ahorros similares en los ítem antes mencionados.
Por otro lado, desde sus primeros usos para distribución de suministros durante la Segunda Guerra Mundial, el pallet se convirtió en uno de los aliados clave para las operaciones de comercio internacional.
Y, en ese sentido, la tendencia de la migración de la madera hacia el plástico, que se consolidó a nivel global, juega en favor de este producto para otorgarle una enorme proyección mundial.
"Definitivamente es una herramienta para toda exportación que vaya en bolsas o bolsones, porque baja el costo del flete", señala Torres.
Sería para farináceos, semillas, polímeros, legumbres, materiales que la Argentina exporta habitualmente. En lugar de hacerlo sobre pallets de madera, "se haría con estos, más livianos y que permiten exportar más productos".