China avanza en su desafío por ser un país innovador

Como parte de la transformación de la economía china, atestiguada por muchos elementos de las noticias recientes, China está en rápida transición de la manufactura a bajo costo a una economía de más alto valor encabezada por la innovación. Anticipar los próximos años está lleno de dificultades. China es un país inmenso y diverso que atraviesa transiciones importantes. Luego de un extenso trabajo de campo y mucho tiempo pasado en China para el libro Created in China (Creado en China), está claro que China está en camino de convertirse en una potencia global de peso en la innovación. Esto es debido principalmente a firmas privadas, motores esenciales del proceso de creación de riqueza. Pero estas operan en un ambiente único, en el que el sector público es extremadamente poderoso.

También es un ambiente de innovación que resulta difícil de medir. La innovación tiene que ver con la calidad del producto y no los recursos. Por lo tanto es extremadamente difícil de describir y anticipar. Varias de las métricas utilizadas comúnmente son indicadores interesantes pero no siempre son los más confiables.

Métricas de la innovación china

• Inversiones en I&D: Estas se toman como porcentaje del PBI de un país. En el caso de China, el incremento de esta cifra es espectacular: de 0,5% en 1995 a 2% en 2014. El objetivo es alcanzar 2,5% en 2020, alcanzando así las inversiones promedio de la Unión Europea.

Dado el rápido crecimiento de la economía china, las cifras en términos absolutos son aún más impactantes. Se estima que en 2014 las inversiones en I&D en China totalizaron US$ 270.000 millones. Siguiendo las tendencias recientes, esta cifra puede alcanzar la de Estados Unidos en 2023.

• Patentes: Los principales dueños de patentes en China son las compañías de telecomunicaciones, ZTE y Huawei, así como el fabricante de autos Chery. En cualquier país, la estadística general de patentes es sólo un indicador indirecto de innovación. En 2014 China otorgó 233.000 patentes. Pero la calidad y el potencial para negocios de las invenciones son más importantes que el número de patentes.

En el caso de China, este indicador es cuestionable, ya que el gobierno ha dado incentivos a firmas y académicos para presentar patentes. Además, las "patentes de servicios", válidas por 10 años por oposición a las patentes de inventos, que duran 20 años, son de valor cuestionable. Como resultado de ello es un estimado grueso que aproximadamente dos tercios de las patentes chinas son casi inservibles.

Por el otro lado, está mejorando sostenidamente el manejo de litigios por patentes en las cortes, por lo que firmas no chinas pueden tener creciente confianza en el procedimiento. Actualmente más de la mitad de los casos de litigio se dan entre dos firmas chinas.

• Innovaciones no técnicas: las métricas citadas conciernen a innovaciones técnicas. Muchas innovaciones importantes no tienen nada que ver con tecnología; un ejemplo es el autoservicio, que revolucionó los negocios minoristas en la década de 1950. Por cierto, la mayoría de los avances en los sectores de servicios no son patentables. Así, una firma puede copiar el servicio ofrecido por un competidor.

En China, muchas innovaciones conciernen aspectos específicos del modelo de negocios. Por ejemplo, el modo en que Haier garantiza la entrega de electrodomésticos en un día imponiendo esta condición al subcontratista de transporte. El fabricante de celulares Xiaomi casi no hace publicidad y vende principalmente por Internet. Las innovaciones de productos a menudo son resultado de numerosas adaptaciones muy pequeñas de productos existentes; estos cambios no son patentados, pero son el motivo del éxito de su oferta en el mercado chino.

Otros patrones

Pero estas métricas utilizadas para evaluar el nivel de innovación en China no son extremadamente relevantes. Más bien se debe examinar patrones mayores.

La sociedad china es altamente empresarial, está ansiosa por ganar dinero y es capaz de extraer valor muy efectivamente. Las innovaciones se ven desde un sentido totalmente orientado al mercado y las compañías están dispuestas a experimentar y corregir rápidamente errores. Los aspectos técnicos constituyen sólo una herramienta para ser exitoso en el mercado. Es Internet lo que más importancia tiene, con 800 millones de usuarios estimados en 2016.

Copiar un producto mientras se mejoran muchos elementos diferentes y se lo adapta mejor al mercado chino representa un modo legítimo de operar. Innovar para reducir costos copiando y mejorando explica el éxito de muchas compañías chinas, tales como Baidu (adaptación de Google) o Alibaba, inspirada inicialmente en eBay.

El gobierno chino está obsesionado con proveer un contexto favorable al crecimiento encabezado por la innovación. Al igual que en Japón y Corea, se percibe la innovación como un ingrediente crucial de la creación de riqueza y el desarrollo económico.

Un conjunto de barreras y prácticas no aduaneras favorecen a las firmas locales bajo la protección de una política de promover "innovación local". Esto vale en particular para el sector de la energía renovable.

"Creado en China"

Las firmas chinas ya contribuyen en el rápido aumento de las innovaciones privadas y empresariales. Son muy activas en las tecnologías informáticas y de comunicaciones y en los juegos electrónicos. El peso de las empresas de propiedad estatal está decreciendo tanto como factor del PBI como en la producción de ofertas innovadoras.

Un número reducido de firmas chinas se ha aventurado al extranjero. Huawei, Lenovo y Haier, son ejemplos notables. Esta cifra crecerá teniendo en cuenta que en 2014 las inversiones chinas en el extranjero han equiparado por primera vez el flujo de inversiones que llegan a China. Estamos en el comienzo de un rápido incremento de la salida de las inversiones de China, especialmente hacia Europa.

¿Cuáles son los rasgos básicos de la sociedad china? Un fuerte espíritu empresario, una orientación al mercado decidida, una implementación ágil y rápida en una economía vibrante que reclama tasas extraordinarias de calidad relativas a precios justos.

China es el país fundamental de Internet por el número de usuarios así como la intensidad de su uso. China ya es el mayor mercado en cuanto a compras online y se prevé que pronto será el mayor en servicios financieros.

Combinado con eso hay un gobierno fuerte dedicado a impulsar el crecimiento encabezado por la innovación.

Salvo que haya problemas mayores, se prevé que las firmas chinas convertirán al país en una de las mayores fuentes mundiales de innovaciones, particularmente en los servicios facilitados por la informática. Hay mucho que aprender del "modo chino" de innovar. Que China se esté convirtiendo en una gran fuente de innovaciones es bueno para China y bueno para el mundo.

El autor es profesor de Gerencia de Tecnologíae Innovación de la Escuela de Negocios IMD

Traducción de Gabriel Zadunaisky

Georges Haour

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