En su libro Sinceramente (Sudamericana), Cristina Kirchner dijo: "Esperaba que todos los argentinos y argentinas pudieran seguir gozando de una Argentina que dejábamos con el 5,9% de desocupación, una de las más bajas de la historia". Laura Zommer, directora de Chequeado , verificó si la desocupación era efectivamente de 5,9% cuando Cristina dejó la presidencia.
El tercer trimestre de 2015, en donde se registró ese 5,9% al que se refirió Cristina, fue el último que publicó el Indec hasta el cambio de gobierno. El problema con esta cifra es que no es confiable.
Durante un período del gobierno de Cristina Kirchner el Indec estuvo intervenido. En 2016 la nueva administración del instituto de estadísticas advirtió que las series publicadas entre al primer trimestre de 2007 y hasta el cuarto trimestre de 2015 deben ser consideradas con reservas. Este es la misma postura que tomaron organismos internacionales como la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Lo que dicen los especialistas es que, dentro de la manipulación de los números, este dato tampoco es confiable. Los desocupados son los que no tienen trabajo pero que lo buscan, mientras los inactivos son los que no tienen trabajo pero que tampoco lo buscan. Lo que se hacía era considerar a un grupo de desocupados como inactivos. Es decir, mostrar como que no estaban buscando activamente trabajo. De esta manera la cifra de desocupados parece menor.
La frase de Cristina sobre el desempleo es insostenible. En Chequeado consideramos que una frase es insostenible cuando "la afirmación surge de investigaciones con falta de sustento o graves errores metodológicos, o resulta imposible de chequear". En este caso, se trata de datos elaborados por el Indec durante su intervención y no son confiables.
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