La medida de fuerza del gremio, en rechazo a la Ley Bases, se extenderá hasta el miércoles; en la industria frigorífica dicen que tuvieron una operación normal
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En medio de diversas protestas en rechazo por el tratamiento de la “Ley Bases” en la Cámara de Diputados, la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) hizo hoy la primera jornada de un paro de 72 horas en el Senasa contra el “vaciamiento” y el “desguace” del organismo sanitario. El nivel de adhesión ha sido alto, según dijeron en el gremio, por lo que esto podría afectar la certificación de exportaciones que realiza la Argentina. En la industria frigorífica, en tanto, aclararon que hasta ahora la operación es normal.
Jorge Ravetti, coordinador nacional de ATE-Senasa, dijo a LA NACION que durante la mañana se llevó adelante una asamblea en Uspallata, Mendoza, por donde pasan los camiones con carga que embarcan en el Pacífico. Enumeró que la frontera de Puerto de Iguazú, en Misiones, también está paralizada a partir de esta medida de fuerza: “No se está certificando nada y se comenzaron a registrar colas de camiones”.
Según explicó, el mismo escenario se ve en Ezeiza y en los puertos de Rosario, ya que aseguró que “hay frigoríficos que no están faenando”.
“En otros, por la adhesión al paro de varios compañeros, están ordenando menos de lo habitual porque se tienen que hacer los controles y no alcanza el personal. La adhesión es alta y lo que estamos reclamando es que no se apruebe la Ley Bases pero, de aprobarse, que el Senasa sea incluido en el dictamen de comisión entre los organismos exceptuados -de cualquier disolución- como el Incaa, el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) o el Conicet, porque también es un organismo técnico y de control sanitario que tiene que ver con las exportaciones y el ingreso de divisas al país, y con el control de todos los alimentos que consume la población”, precisó.
El capítulo I de la Ley Bases menciona en el artículo 3°, de “Reorganización administrativa”, que se faculta al Poder Ejecutivo a “la modificación o eliminación de las competencias, funciones o responsabilidades dispuestas legalmente cuyo mantenimiento resulte innecesario”. Sin embargo, allí se aclara que el Poder Ejecutivo nacional no podrá disponer la disolución de varios organismos entre los que está el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas [Conicet], la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) y el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), por citar algunos.
En el Senasa resaltaron que el organismo es el encargado de preservar al país del ingreso de enfermedades exóticas como la gripe aviar y la peste porcina africana, además de jugar un rol clave en la certificación de exportaciones y control de importaciones de alimentos en el país. En el gremio citaron: “Esta medida de fuerza fue resuelta por unanimidad por el plenario nacional de delegados y delegadas realizado el viernes 26 de abril, de ATE Senasa, ante el dictamen del proyecto Ley Bases, que propicia una salvaje reforma del Estado, y el desguace total del Senasa al no estar incluido en los organismos exceptuados puntualmente en dicho dictamen”.
En un video advirtieron que la Ley Bases permite un “vaciamiento y desguace del Senasa”, porque faculta al Poder Ejecutivo a disponer de los organismos públicos para la modificación o eliminación de competencias y funciones, fusión, escisión, centralización, disolución total o parcial o transferencia a las provincias.
“Estas medidas debilitan las capacidades científicas, técnicas, tecnológicas y operativas que son el resultado de muchas décadas de trabajo. Estas decisiones ignoran que la fiscalización de la inocuidad y la calidad de los alimentos, la preservación de los estatus zoofitosanitarios en el país y el monitoreo y el control de plagas y enfermedades no admiten demoras ni excusas y las consecuencias pueden ser catastróficas”, explicaron.
Los alimentos que se exportan al mundo, dijeron, son el resultado de un largo trabajo de diálogo, negociación, compromisos y acuerdos que permiten la apertura de mercados. “Desfinanciar al Senasa, reducir el personal en las barreras sanitarias y en los programas de sanidad en los campos y en los servicios de inspección y delegar funciones no da buenos resultados”, precisaron.
La industria
En ese contexto, fuentes de la exportación mencionaron que la operativa en las plantas frigoríficas es normal hasta el momento. Indicaron que al menos este lunes trabajaron normalmente.
En el Senasa argumentaron que el organismo se autofinancia con el cobro de tasas y aranceles por los servicios que presta, por lo que utiliza recursos propios para el pago de sueldos y los gastos operativos. “El excedente de su recaudación lo aporta al Tesoro nacional. En 2023, el Senasa aportó $1900 millones, que sería mayor si los aranceles se hubiesen actualizado por la inflación”, resumieron.
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