Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) se reunió con el secretario de Comunicación, Eduardo Serenellini, antes de un encuentro con el equipo económico que se realizará el jueves en el que va a participar toda la Mesa de Enlace junto con otros sectores
- 7 minutos de lectura'
El Gobierno busca el apoyo del campo para la aprobación del proyecto de la ley ómnibus y para eso, convocó a los integrantes de la Mesa de Enlace y a la CAME, entre otras entidades, a una reunión que mantendrán pasado mañana con el ministro de Economía, Luis Caputo, y el secretario de Comunicación y Prensa de la Presidencia, Eduardo Serenellini. La última entidad en mantener un encuentro a modo de presentación fue Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), que estaba citada para esta tarde. La entidad ruralista llegó con la idea de plantear su negativa al aumento de las retenciones y la necesidad de que el presidente, Javier Milei apueste al campo en vez de ir en su contra, ya que consideran que son “un freno a la producción”.
A la reunión fueron el presidente de CRA, Carlos Castagnani, y Matías De Velazco, secretario de la entidad, quienes llegaron con la intención de plantearle al Gobierno la necesidad de que se apueste a la producción, y que se convierta en un gobierno pro-productivo y no financiero ni fiscal. Si bien desde la entidad reconocieron que la intención de este primer encuentro era la justificación del Ejecutivo por el proyecto de ley, debido a la crisis económica que atraviesa el país, expresaron que es necesario que “el presidente Milei sea inteligente”, que vea que no le conviene al país avanzar con las retenciones, y que “se apueste al campo”. Coinciden en que a Milei le falta hablar más con los productores. Otro de los puntos que plantea CRA es el de la Upov91 (acuerdo sobre propiedad intelectual en semillas) y la normativa del BCRA que encarece los créditos a los productores que tienen un 5% de stock de soja.
“Las retenciones atentan contra el país, ya se probaron durante 20 años; es necesario que se cambie a una visión proactiva. Fue un montón de plata que se tiró porque no vemos ninguna mejora. Las retenciones son un freno a la producción”, dijo de Velazco a LA NACION, quien mencionó que si bien apoyan al Gobierno, son conscientes de que se necesita un cambio respecto de lo anterior porque “no sirve”, y este proyecto de aumento “va para el fracaso”.
Según la Secretaría de Comunicación y Prensa, en el encuentro que se realizó en la Casa Rosada, Serenellini expresó “el reconocimiento del gobierno nacional a la agroindustria, y la importancia del sector en el desarrollo productivo del país”.
A su vez, en CRA dicen que tienen vocación de acompañar, el problema es que necesitan ver señales. “El mantenimiento de las medidas y peor aún el aumento de las retenciones ya no es un problema microeconómico del productor, sino que ya no le sirve al país tener retenciones. Estamos convencidos de que si sacan las retenciones y les dan las señales correctas a los productores, conociendo la idiosincrasia, van a tapar de carne, maíz y trigo el país, pero necesitamos que el Gobierno tenga otro vuelo, otra impronta. Necesitamos que el Gobierno sea más ambicioso”, precisó el ruralista.
En las bases del proyecto, el Ejecutivo eximió de este gravamen a 35 productos de las economías regionales: allí están los sectores olivícola, arrocero, lácteo, frutícola, hortícola, entre otros. Sin embargo, otras actividades y productos como la pesca, carnes, trigo, maíz y girasol pasarán al 15%. Hasta ahora está firme la decisión de subir del 31 al 33% para los subproductos de la soja.
En el sector entienden que las retenciones no se pueden sacar de un día para el otro, sin embargo, coinciden con otras entidades de la agroindustria en que tiene que haber un cronograma de reducción de las alícuotas que hoy paga el agro en los diferentes rubros. “El Gobierno está encarando mucho la parte financiera del país, pero no encara la parte productiva”, argumentó.
“Estamos viendo con preocupación la permeabilidad que está teniendo el Gobierno ante a unos intereses concentrados y mantenimiento de algunas medidas que nos hacen estar como estamos”, explicó. Recordó que la Upov 91 que está planteada en el megaproyecto merece un debate mucho más amplio que el trato que se le pueda dar dentro de la ley sin un trato acorde. “Meterlo así coarta la libertad de los productores. Estamos de acuerdo con que hay que hacer un cambio, pero tenemos que discutirlo bien y lograr un consenso entre ambas partes: el sector productivo y los obtentores”, puntualizó. Para el directivo, el Gobierno necesita el apoyo del campo, pero advirtió que para que el apoyo sea duradero en el tiempo “necesitan señales”.
De Velazco sugiere que el Presidente debería hablar más con los productores y menos con “los grupos concentrados”, dijo. “El productor tiene la voz muy chica, ya que el sector es muy atomizado, pero cuando sumás las voces se transforma en un vozarrón. Esto le da a la Argentina, el poder económico que tiene. Durante 20 años se probó el tema de retenciones y fracasó. El Gobierno debe dar las señales correctas y, así, el país realmente se va a transformar en uno productivo, si no vamos a estar así navegando dentro de vaivenes”, apuntó.
“Esperábamos que dijera: no puedo bajar las retenciones, pero este es el cronograma de bajas. Eso es lo que el campo vería bien, pero necesitamos que lo haga, no solo de palabra, que lo demuestre con los hechos. El campo tiene paciencia, va a poner el hombro, pero necesita una reciprocidad”, extendió.
Vale recordar que en campaña electoral, Milei había mencionado que para bajar las retenciones primero había que reabrir el mercado de cambios y, a su vez, arreglar el “balance” del Banco Central [BCRA]. Había dicho que estaba dentro del programa avanzar hacia un “proceso de eliminación”. También estaba en el tintero una idea que se había planteado en campaña de dejar las retenciones a cuenta del Impuesto a las Ganancias. De Velazco recordó que el mensaje que se había emitido entonces era “confuso”. Además, recapituló en que Caputo había mencionado en una entrevista que esta vez [por el nuevo gobierno] el campo no iba a ser discriminado, que se “iba a igualar a otros sectores a nivel retenciones”. “Lo que pasó se contradice: subieron las retenciones, hubo sectores que fueron exceptuados, logramos que exceptúen las economías regionales, pero está la discriminación del agro con respecto a los otros sectores”, apuntó.
Esta discriminación, ejemplificó, se expresa en la normativa del Banco Central (BCRA) que fue ratificada por la entidad días atrás que encarece los créditos a los productores que tienen más del 5% del stock de soja. “El Presidente debería hacer un cambio y darse cuenta de la fuerza del sector productivo y no anularla, valerse de ella y sacar al país adelante, sino no lo va a lograr”, detalló. Para la reunión del jueves, dicen que van a plantear “las diferencias” y decirle cuáles son los puntos con los que no están de acuerdo con el proyecto de ley. “La Argentina necesita cambios, que si no se logran con este presidente no se van a lograr más, por eso es importante el cambio en las retenciones, si no lo logra este presidente no lo va a lograr nadie. Milei tiene la oportunidad de pasar al bronce, que no se deje coartar por pequeños intereses”, apuntó para cerrar.
Desde CAME dijeron que al margen del apoyo que busca el Ejecutivo en el proyecto de ley, además, intentan acercarse a los sectores productivos- empresariales, que le permiten a la Argentina estar conectada con el mundo. Antes de asumir, la única funcionaria que mantenía contacto con el campo era la Canciller, Diana Mondino.
Otras noticias de Comunidad de Negocios
- 1
Se vende: un fiscal detectó irregularidades en la inminente subasta de un edificio del INTA y pide evitar “posibles hechos de corrupción administrativa”
- 2
Opinión. Zonas de exclusión: no es el glifosato sino el asfalto el que mata la vida biológica de los suelos
- 3
Recuperación: las exportaciones del principal complejo argentino tocaron en volumen su nivel más alto en cinco años
- 4
Los nuevos desafíos estratégicos que enfrenta la lógica libertaria