Tras dejar las vacas de cría y ganar escala y profesionalismo, el Grupo Bermejo apostó a brindar servicios a medida para frigoríficos; en la recría operan entre 16.000 y 18.000 terneros y desde el feedlot salen novillos pesados para la cuota 481
"La pobres resultados de la cría nos obligaron a vender la mayor parte de las vacas, teníamos más de 17.000 vientres. Además, habíamos crecido mucho en tierras y necesitábamos capital de trabajo para ponerlas en producción. En 2010, empezamos a preparar los campos para recriar y construimos un feedlot para 10.000 cabezas, con la idea de brindar servicios a frigoríficos, integrándonos de distintas formas. Mientras otros salían del negocio, nosotros lo reinventamos", dijo Marcos Pereda, Presidente del Grupo Bermejo que recientemente ganó el premio Oro a la Excelencia Agropecuaria LA NACION-Banco Galicia y la distinción Mejor Ganadero. Y detalló: la industria invirtió mucho en terneros para contar con la materia prima que necesitaba y nosotros poblamos los establecimientos y volcamos nuestro expertise en ganadería. Así, de terminar 20.000 cabezas/ año propias pasamos a 50.000, la mayoría de terceros".
El Grupo Bermejo fue fundado a fines de los años noventa a partir de cuatro empresas de una misma familia dedicadas principalmente a la ganadería, además de la agricultura, a las que luego se incorporó la forestación, apicultura y vitivinicultura. El primer desafío fue profesionalizar la gestión en un sector muy tradicional como es el campo y, en particular, para la familia Pereda con más de 150 años en el rubro.
"Habíamos salido de la industria y compramos tierras para volver de lleno al agro. Con esta experiencia, sabíamos que tomar decisiones con los procedimientos de un management profesional era un salto cualitativo importante", indicó el empresario. En tal sentido, este tipo de esquema se había dado en el país en corporaciones agrícolas de gran tamaño y buena rentabilidad. "Pero para la ganadería, de márgenes acotados, era una novedad. Sí o sí, había que ganar escala", planteó.
Un gran reto fue evitar la fragmentación de las firmas familiares tras los cambios generacionales. "Hubo que dividir tierras un montón de veces y eso siempre era traumático, un desgarre. Entonces, decidimos que el Grupo fuera como un holding que le presta servicios a cada accionista, que es dueño de su propia empresa. El secreto para seguir adelante juntos es que el modelo les resulta más atractivo porque ven que su patrimonio está mejor manejado, con profesionalismo y transparencia", subrayó Pereda.
Para Agustín Dranovsky, CEO del Grupo Bermejo, otra innovación fue transformar una firma ganadera tradicional en una Unidad de Servicios para disminuir la necesidad de capital de trabajo propio y facilitar el acceso a insumos y prestaciones de calidad mediante sinergias con socios estratégicos.
"Encontramos un negocio más atractivo, flexible y menos riesgoso. Además de trabajar con hacienda de terceros, no contamos con maquinarias en ninguna actividad. No sembramos, no aplicamos fitosanitarios, todo se contrata. Lo nuestro es lograr un coordinación muy ajustada entre los distintos actores para producir cantidad y calidad", dijo el joven que está al frente de la corporación desde 2012. Y señaló: "hoy, con esta gestión, además de nuestros 140 empleados, generamos 400 puestos de trabajo indirectos".
Mas allá de lo financiero y comercial, otro aspecto que comparte el Grupo es la visión ambientalista que se fortaleció con la incorporación de una reserva ecológica en Gualeguaychú, Entre Ríos. "Armonizamos todas las actividades productivas con la preservación de los recursos. En cada rubro, controlamos la composición del paquete tecnológico y de los productos fitosanitarios, y medimos su impacto mediante índices específicos", explicó Dranovsky
Ganadería abierta
La Unidad de Servicios Ganaderos del Grupo cuenta con una amplia superficie de recría en Olavarría, plena provincia de Buenos Aires, y un feedlot profesional sobre la ruta que une Bolívar y Pehuajó. Estas capacidades le permiten integrar animales propios con los de terceros, utilizando herramientas como la capitalización y la hotelería, con el objetivo de transformar alimento en carne, terminándolos con 450/460kg.
En el establecimiento de recría se mejoraron los pastizales naturales y se hicieron promociones de raigrás, avenas, verdeos de sorgo y maíces diferidos, con la misma rigurosidad de la agricultura. "Los que quieren volver a recriar en la zona enfrentan la problemática de la falta de campos aptos para ese fin. Vimos la oportunidad, invertimos, y hoy prestamos servicios a unos 16 mil/18 mil terneros, la mayoría de frigoríficos y matarifes", señaló Pereda.
En cuanto al feedlot, se inauguró en 2011 tras una inversión de US$ 4 millones. Fue construido de cero siguiendo normas americanas y canadienses y tiene un patio de comidas automatizado, donde se procesan forrajes y granos de producción propia. "Además de la infraestructura, el establecimiento se distingue por su manejo industrial y su gestión que permiten brindar datos productivos y económicos muy precisos al cliente", destacó Darío Colombatto, profesor de la Fauba y asesor del Grupo Bermejo.
La Unidad de Servicios Ganaderos le facilita a los frigoríficos la operatoria de la cuota 481. "Ya tenían hacienda propia en el feedlot. Pero, les resultaba muy difícil conseguir novillitos bien recriados, clave para cumplir con los requisitos europeos. Entonces, les ofrecemos desde la gestión de compra del ternero de destete al servicio de recría y engorde. Así, llegamos a la exportación conjuntamente. Hoy, de nuestra firma sale la mitad de lo que el país embarca para la 481", detalló Dranovsky.
Los próximos pasos
Alianzas
El Grupo Bermejo se propone avanzar en acuerdos con los criadores para lograr aprovisionamiento de calidad
Terminación
Según explicó Marcos Pereda, presidente del grupo, los productores podrían terminar sus terneros "sin cargar con altos costos comerciales"
Modelos
Con ese esquema los productores se integrarían a los modelos participativos que propone el grupo.
Trazabilidad
"De la mano de la industria se harían productos trazados, plasmándolos en una marca", datalló Pereda
Número 1
"En equipo, estamos mejor posicionados para llevar las carnes argentinas al mundo. Queremos ser los número uno", se entusiasmó Pereda.