Se trata de Vicente Diamante, destacado en esa especialidad, entre otras cosas, por los implantes cocleares; fue productor de la Asociación Criadores de Holando Argentino y fundó cabañas de la raza
- 6 minutos de lectura'
A los 91 años falleció Vicente Diamante, reconocido otorrinolaringólogo y figura influyente de la medicina argentina. Distinguido como Maestro de la Medicina Argentina y miembro de la Academia Nacional de Medicina, su legado abarca tanto la práctica clínica como el ámbito académico. Además, fue un apasionado criador de vacas Holando Argentino y participó en numerosas exposiciones.
Diamante fue fundador y director del Centro de Implantes Cocleares Profesor Diamante (CIC), que funciona dentro del Instituto Superior de Otorrinolaringología (ISO). Este centro, con más de 30 años de trayectoria, realizó más de 2000 implantes cocleares.
A lo largo de su carrera, acumuló numerosos honores, entre ellos el título de Maestro de la Medicina Argentina, otorgado por la Prensa Médica Argentina; Maestro de la O.R.L. Argentina, por la Asociación Médica Argentina; y Profesor Emérito de las universidades del Salvador y de Ciencias Empresariales y Sociales. En 2017, la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires lo declaró Personalidad Destacada de las Ciencias Médicas. También fue Miembro Correspondiente de la Sociedad Americana de Otología.
Publicó más de 200 trabajos científicos y cinco libros, entre los que destacan “Hueso Temporal. Anatomía Aplicada a la Microcirugía e Implantes Cocleares y de Tronco Cerebral”. Además, fue profesor titular de la Cátedra de Otorrinolaringología en la Universidad del Salvador y en la Universidad de Buenos Aires.
“Con nuestra más profunda tristeza despedimos al Prof. Dr. Vicente Diamante. “El Profe” fue nuestro Fundador, nuestro Director, nuestro Guía, nuestro Profe, nuestro Maestro....entre muchas otras cosas... Soñó el ISO, y junto con el Profe Barbon, lo hicieron posible, con la compañía de valiosos colegas que hoy siguen siendo parte fundamental del ISO. Soñó el CIC, y junto con la Prof. Pallares, lo hicieron realidad. Miles y miles de pacientes y familias a quienes brindó todo su conocimiento y toda su calidez humana. Cientos de Profesionales que se formaron a su lado, viéndolo en su trato cálido con los pacientes en consultorio, y en las cirugías más complejas en quirófano, siempre enseñando y compartiendo su saber. Generosidad es uno de los adjetivos que mejor lo describen”, describieron desde su equipo de CIC.
También la Federación Argentina de Sociedades de Otorrinolaringología lamentó la pérdida del profesional, a quien recordaron como un “guía insustituible para generaciones de médicos”. En un comunicado, destacaron: “Su partida deja un vacío en el ámbito académico y profesional que será difícil de llenar. Fue un pionero en la otoneurocirugía y dedicó su vida a la medicina con un compromiso excepcional. Como docente, será recordado por su claridad pedagógica y su vocación apasionada por la enseñanza”.
“Durante varias décadas compartió sus vastos conocimientos y experiencia formando a innumerables médicos que hoy continúan su legado en hospitales y clínicas alrededor del mundo”, expresaron y agregaron: “Su legado vivirá en los cientos de médicos que tuvieron el privilegio de llamarlo maestro, en los pacientes que recibieron su cuidado y en las contribuciones que dejó en la otorrinolaringología”.
Por el campo
La vida profesional de Diamante se combinó con su pasión por el campo. Fue un criador apasionado de vacas Holando y fundador de dos cabañas: “La Cabañita”, que funcionó en Basavilbaso, Entre Ríos, y la “La Vicentina”, en Lujan.
Lisselotte Diz, presidenta de la Asociación de Criadores de Holando Argentino (ACHA), relató: “Profesionalmente era una eminencia, pero sobre todo era una muy buena persona, educada y empática. Trabajar con él era un placer. Siempre se ponía en el lugar de la gente, y todo el mundo lo quería”.
Diz recordó que Diamante comenzó con la cabaña asesorándose con Alejandro Giudice, quien lo acompañó en la compra de vacas en la Argentina, Estados Unidos y Canadá. Aunque tenía un campo en Entre Ríos, instaló la cabaña en Luján. “Fue una cabaña muy importante. Participó en todas las exposiciones relevantes durante muchos años”, agregó.
Aunque decidió cerrar la cabaña hace aproximadamente una década, Diamante mantuvo su relación con la raza y la asociación. Desde ACHA expresaron: “Despedimos con dolor al Doctor Vicente Diamante, criador apasionado de la raza, socio y directivo de ACHA. Acompañamos en este triste momento a la familia y amigos. Recordaremos siempre al Doctor como una gran persona”.
Un empresario agropecuario y antiguo colaborador suyo, llamado Carlos Sanz, lo calificó como un entusiasta de la raza y reconoció su aporte decisivo. “Tito era un hombre de palabra. Entusiasta en todo lo que hacía. Siempre iba a fondo. Se rodeaba de los buenos y de gente buena, fundamentalmente. Tengo muchos recuerdos buenos tales como los viajes a Estados Unidos para conseguir las primeras vacas junto con Alejandro Giudice, las exposiciones y los viajes a Entre Ríos”, expresó. “Fue un hombre que dejó mucho en la raza. Las vacas que mostró siempre fueron pura genética y muy lecheras. Construyó una lindísima cabaña que traccionó mucho en todos los años que estuvo activa. Es una lástima que se nos vayan los grandes, pero han dejado un legado y eso es lo importante. Trato de recordarlo y copiarlo en el futuro tanto en las acciones como en la forma de ver las cosas que él tenía”, agregó Sanz.
Por su parte, el asesor genético de Diamante, el veterinario Giudice, describió su trabajo junto a Diamante. “Con Vicente trabajé más de 25 años y fue un placer porque era un hombre que le gustaban las vacas. Sabía un montón. Había criado desde joven. Sabía de genética. Era un gusto intercambiar conversaciones con él los diez viajes que hicimos a Estados Unidos con ocasión de la principal exposición lechera de Madison, Wisconsin. Durante esas semanas no había un momento de silencio entre nosotros. Aquello era muy constructivo. Llegó a formar vacas de primer nivel como la “Balance”, que fue reservada Gran Campeona y mejor Hubre nada más y nada menos que en Palermo. Tuvo muchas vacas ganadoras. Además, él siempre fue un tipo muy positivo, constructivo y ayudaba muchísimo. Nos acoplábamos de primera y pudimos lograr muchos objetivos. Tengo un gran recuerdo de él. Pienso que su gran cualidad era su lealtad”, finalizó Giudice.
Con información aportada por Alejo Giudice
Otras noticias de Actualidad
- 1
Sin control: por un incendio se queman 8000 toneladas de maní en una empresa de Córdoba
- 2
Fenómeno: la cebolla vive un cambio inédito en una de las mejores zonas del mundo para cultivarla
- 3
“Milei se puso de acuerdo con Insfrán”: por una crisis agónica, en Formosa destruyeron la mitad de las plantaciones de bananas
- 4
Tras el caso Los Grobo: una empresa del agro hizo una capitalización millonaria para dar un “mensaje claro” y asegurar pagos