Según un informe técnico de Coninagro, llamado Semáforo, a enero pasado en ocho producciones la recuperación de precios al productor quedó por debajo de la inflación
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Una vez más el color rojo vuelve a teñir a la mayoría de los casilleros de las 19 economías regionales. Pero esta vez, Coninagro, en su semáforo mensual, además de monitorear estas producciones, puso la lupa sobre precios y costos, dado el significativo salto del mes de diciembre de 2023, con cambio de gobierno y devaluación incluida.
En su estudio, la entidad explicó que en enero pasado las subas de precios (al productor) ocurrieron por encima de la inflación interanual en 11 de las 19 actividades, con un valor promedio (simple) de 326% más, mientras que las ocho restantes, por debajo de la inflación lo hicieron en 163% más, casi a mitad de camino.
“La heterogeneidad es la regla en este comportamiento, con un amplio rango de dispersión, recordando que son precios en pesos corrientes. Si la mirada es entre noviembre y diciembre, los promedios simples de las variaciones mensuales en precios en pesos al productor fueron un 38% más, siendo el mayor salto en el año 2023″, informaron.
Según explicaron los expertos de Coninagro, estas dos variables, precios y costos, conforman el primer pilar del semáforo, al que llamaron “Negocio”. “Los datos se refieren a valores promedio del mes en precios y costos anualizados, es por ello por lo que puede diferir de análisis de fin de diciembre o principios, ya que la devaluación ocurrió a mediados de mes”, aclararon.
En este contexto, mencionaron la contracara de los precios: los costos promedios de las 19 actividades crecieron interanualmente +250% en diciembre de 2023, con un máximo de +334% en el caso de arroz con pozos de gasoil (zona Entre Ríos). La variación mensual de los principales rubros muestra que, por ejemplo labores, urea, glifosato y fletes entre noviembre y diciembre del año pasado tuvo un incremento de más del 100%, incluso algunos alcanzaron casi el 150%, corriendo arriba de la suba del dólar, dejando muy por detrás a la inflación y los salarios.
Para Elbio Laucirica, presidente de la entidad cooperativista, “los primeros datos, los primeros números calculados estarían dando que la situación no se ha modificado sustancialmente a pesar de la devaluación”.
“La información que da el semáforo, que seguimos con prácticamente el 90% de las actividades productivas vinculadas a las cooperativas de Coninagro es de situación crítica, como veníamos diciendo. En realidad, en este semáforo falta todavía ver la incidencia que pudo haber tenido la devaluación, pero también los primeros datos que estamos teniendo nos indicarían que no solamente va a haber un ingreso mayor, sino que también hay mayores costos, principalmente por la alta dolarización de muchas de las producciones y el Impuesto País”, dijo a LA NACION.
Tendencia
Según el informe actual y, continuando el panorama crítico de los estudios pasados, 10 economías se mantienen en rojo, siete en amarillo y solo dos tuvieron algún signo positivo. El relevamiento mostró en crisis a la actividad avícola, con grandes subas de costos y complicaciones en su mercado; a los cítricos dulces, complicados; la de miel, que pese a la suba de precios, no alcanza recuperación; los granos (como el trigo, la cebada y el girasol), donde pese a la suba, los precios suben menos que los costos; la leche, donde se complica la crisis por los costos, falta de reservas y mercados estancados; y la de vino y mosto, con costos por las nubes y esperando la próxima vendimia.
Con signos de crisis, se encuentra el algodón, en proceso de recuperación de su producción y exportaciones; la producción forestal, donde hay suba de costos en labores; la de mandioca (con costos a la par de la inflación); y la actividad ovina, con señales complicadas de mercados.
En advertencia se encuentran el arroz (en recuperación productiva); la producción bovina (cría e invernada viene bien pero con feedlots en complicaciones y vaivenes en los precios y mercados); las hortalizas, con precios en caída en tomates, cebollas y zanahorias; la producción de papa (en recuperación productiva); la de peras y manzanas, que en el último mes antes de la cosecha tuvo un leve repunte de las exportaciones; la de tabaco, donde comienza la nueva campaña el próximo mes y hay bajas exportaciones y; la de yerba mate, con precios de la hoja verde por debajo de la inflación, aunque tiene recuperación productiva.
Por último, mostraron signos de crecimiento el maní, que a mitad de camino en la campaña recuperó exportaciones en diciembre y la actividad porcina, que presentó un mercado más estable, pese a la suba de costos.
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