En Carmen del Sauce, a 30 kilómetros de Rosario, la sequía y las últimas heladas golpearon con dureza la producción de lenteja de Martín Pettinari
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“No muy bien”. Esa es la respuesta del productor agropecuario Martín Pettinari cuando se le preguntan cómo se encuentra. De las 1500 hectáreas de lenteja que sembró en 2022, estima cosechar solo un 20% y obtener de 200 a 300 kilos por hectárea cuando su promedio de los últimos 10 años fue de 1000 kilos.
“Este año el factor Niña, que produce lluvias por debajo de lo normal, se vino con todo y sumado a las heladas tardías nos destrozó todo, no quedó prácticamente nada”, se lamentó el productor. Está a 10 días de la cosecha y “no hay posibilidad de que el cultivo se recupere”.
A sus 45 años, Pettinari señaló que nunca vivió una situación similar, con una sequía tan prolongada. “Mi papá cuenta que en 1982 no se pudo sembrar la soja, pero sé que es porque trata de apaciguar esta desgracia”, indicó el productor, que con su familia arrienda 5500 hectáreas en la localidad santafecina de Carmen del Sauce, a 30 kilómetros de Rosario.
Produce trigo, lenteja, soja y maíz en una zona donde suelen llover de 800 a 1200 milímetros en un año normal. Sin embargo, allí en lo que va de 2022 solo cayeron 300 milímetros.
No solo tiene afectada la producción de la lenteja, sino también de 1400 hectáreas con trigo. En este último cereal estima cosechar 800 kilos por hectárea cuando su promedio es de 4000 kilos y el año pasado sacó 5500.
Sobre el caso de las lentejas, dijo: “La helada del 9 de octubre líquidó lo poco que había y la mayoría de los lotes quedaron destrozados y sin posibilidad de recuperarse”.
Como alquilan la tierra, explicó: “El campo se paga igual, así que eso nos deja sin ningún ahorro y calculo que también nos vamos a endeudar”.
Además, en este contexto, alertó que la legumbre más elegida por los argentinos puede llegar a escasear en 2023: “Seguramente puedan faltar lentejas el año que viene. Hay un remanente del año pasado, pero es muy poco y esta campaña casi no va a haber”. Agregó: “Estimo que, además, el año que viene se va a achicar el área de siembra por la falta de semilla”.
En el ciclo 2021/2022 se sembraron en la Argentina 40.456 hectáreas de lenteja y la producción fue de 72.318 toneladas. Creció significativamente respecto a la campaña 2020/2021, cuando se produjeron 20.206 toneladas tras la siembra de 32.277 hectáreas.
Según estiman en la actividad, por la sequía y las heladas este año habrá fuertes pérdidas productivas. Ambos fenómenos se sintieron con fuerza en Buenos Aires, el centro sur de Santa Fe y Córdoba.
Según datos aportados por la Cámara Argentina de Legumbres de la República Argentina (Clera), el consumo promedio de legumbres en el mundo es de aproximadamente 8 kg per cápita, mientras que el de Argentina alcanza apenas 800 gr por habitante por año. Las lentejas representan el 60% de ese número.
“Es una catástrofe productiva lo que estamos viviendo”, expresó Pettinari, que decidió seguir los pasos de su padre que también es productor agropecuario.
Se inició como contratista para una importante empresa del sector y en 2015 comenzó a arrendar campos y a crecer en área. “Veníamos bien, pero estos últimos años la sequía nos viene tratando mal, con pérdidas totales. Primero se nos complicó la soja y el maíz y ahora el trigo y las lentejas son un desastre”, concluyó.
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