Mario Lubetkin, nuevo representante para América Latina y el Caribe, indicó que para el mundo “el año que viene no está asegurada”; los efectos del Covid y la guerra en Ucrania
- 7 minutos de lectura'
“Este año hay seguridad alimentaria con precios más altos, el año que viene no está asegurada. No se saben aún cuáles serán los efectos de la guerra”. Esa fue una de las reflexiones a las que llegó en diálogo con varios medios, entre ellos LA NACION, Mario Lubetkin, el nuevo Representante para América Latina y el Caribe de la FAO, la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, que afirmó que lo que hoy se está viendo “son efectos del Covid”, antes que del conflicto armado.
En ese sentido, indicó que los primeros datos que dieron, en marzo pasado, después de la invasión de Rusia a Ucrania en febrero, daban un 12% de aumento de los precios de los alimentos en relación con el período de preguerra. Después “no hubo más aumentos” y ahora “los precios se están estabilizando”. Es por ello que indicó: “Hubo un escenario especulativo importante sin que eso determinara una falta de productos. Las reservas todavía existen”.
No obstante, alertó: “No está dicho qué es lo que va a pasar el próximo año y es ahí donde está planteado el problema sobre los efectos de la guerra. Nosotros lo que hoy estamos viendo son efectos del Covid. Tuvimos dos años en los que paralizamos las economías de los países. Por eso los aspectos fundamentales por los cuales los resultados hoy son negativos vienen de ahí, pero quizás el año próximo la acumulación de los dos (pandemia y guerra) va a ser infinitamente más explosiva”.
En rigor, según los datos de la FAO, actualmente 828 millones de personas pasan hambre y 150 millones de ellas son desde antes del Covid hasta finales de 2021. “La pandemia pegó a los sectores más debilitados. Los que en estos países viven del día a día se empobrecieron brutalmente y los afectó desde la seguridad mínima alimenticia”.
Además, Lubetkin remarcó que “nada se puede afirmar contundentemente porque la guerra todavía sigue y hay que ver cómo termina”.
En ese sentido, citó declaraciones del economista jefe de la FAO, Máximo Torero, que en diálogo con el diario El País dijo que cuando empezó la guerra ya se había dado salida al 70% de las exportaciones en Rusia y Ucrania. En tanto, en la misma entrevista, el economista indicó que “el próximo año se espera una reducción de la producción de Ucrania de alrededor del 37% en cereales, y del 6% al 7% en aceite de girasol. Hay que sumar que los ucranios están cambiando el cultivo de cereales por el de girasol, porque es más rentable. Por todo ello, puede darse una caída de las exportaciones de más del 50%”.
Por consiguiente, Lubetkin precisó: “Este año hay seguridad alimentaria con precios más altos, el año que viene no está asegurada la seguridad alimentaria”.
Frente a este escenario, para Lubetkin la cuestión a resolver es dónde se coloca América Latina y el Caribe. “Nuestra sensación es de que los países están resolviendo en forma muy parcial y puntual [el problema]. No diría al estilo Covid, donde cada uno resolvía como podía, pero tampoco en el marco de una integración regional. Es un llamado fuerte que nosotros hacemos para que haya una nueva fase de integración de los temas y urgencias reales”.
En esa línea informó que uno de los temas que habló en la reunión bilateral con el canciller Santiago Cafiero fue que la Celac (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños) tiene que jugar un papel porque es el único órgano de diálogo formal entre todos los países de América Latina y el Caribe. “La presidencia de la Celac, que está en manos de Argentina, tiene que jugar en esa dirección”, comentó.
“Nosotros tenemos una capacidad para producir alimentos para 1300 millones de personas, o sea el doble de lo que necesitaría América, y lo podríamos hacer, pero es potencial. Pasaron muchos trenes y no tuvimos la capacidad de subirnos a ellos en el proceso de transformación. Creo que tenemos una oportunidad extraordinaria”, dijo.
En el caso de la Argentina, Lubetkin remarcó que “el país tiene un rol clave que jugar, como el gran productor de alimentos que es”. Aunque reconoció que tiene que “lidiar con los efectos de la crisis”. Dio como ejemplo los altos precios de los fertilizantes, dado que, como muchos otros países, entre enero y septiembre de 2021, el país importó más de 1,1 millones de toneladas de fertilizantes.
Sin embargo, en este contexto, según el uruguayo, “la Argentina es un país que cuenta con la posibilidad de producir fertilizantes diferentes”.
Para ello, sostuvo que “es necesario aumentar la inversión pública y privada en biotecnología y acelerar los procesos de innovación agrícola actuales para aumentar la producción nacional de insumos biológicos, como biofertilizantes, controladores biológicos de plagas y enfermedades en cultivos y disminuir la dependencia de fertilizantes sintéticos y agroquímicos importados. Además, recuperar la capacidad productiva de los suelos degradados por malas prácticas agrícolas”.
También, manifestó que “es fundamental mejorar la eficiencia en el uso de los fertilizantes, facilitando que todos los productores tengan acceso a servicios de laboratorios de suelos, de tal manera que sólo se apliquen las cantidades estrictamente necesarias de acuerdo con la disponibilidad de nutrientes en el suelo y los requerimientos de los cultivos. Eso es necesario para disminuir el impacto del incremento del precio de los fertilizantes y otros insumos agrícolas”.
Desde que se desencadenó la guerra, indicó que desde la FAO dieron un conjunto de propuestas puntuales que iban desde una acción social diferente, un llamado a los países para que no cierren sus mercados y fronteras, de que no aumenten los precios. También sobre la transparencia de los datos y políticas.
Hay dos factores que, según Lubetkin, causan la situación de inseguridad alimentaria en un país y que no se han corregido, al contrario, con la guerra se han agudizado: la recesión económica y el cambio climático.
Por eso, alertó que “es urgente mantener abierto el comercio de alimentos y fertilizantes, evitando que estas situaciones afecten negativamente a las actividades productivas y de comercialización y asegurar que las cadenas de suministro sigan funcionando”.
“Tiene que haber otra fase de escuchar y escucharnos, para no partir de cero continuamente, sino que haya niveles rápidos de cooperación porque el tiempo va contra nosotros y necesitamos una inversión de tendencia”, aclaró.
Al respecto, detalló que los números de la FAO muestran que, si el escenario no cambia y estas tendencias no se modifican y no empieza a reactivarse la economía, en 2030 va a haber 640 millones de personas que pasen hambre. “Eso va a significar que desde que se lanzaron los objetivos del desarrollo del 2015 con 60/70 jefes de Estado de Gobierno, donde se creó la plataforma internacional de los próximos años, significa que no se avanzó una coma porque esos eran los números del 2015. O sea, 15 años después, la comunidad internacional demostrará que fracasamos de la peor forma, en el hambre.
Visita a la Argentina
Durante su visita oficial a la Argentina, el subdirector General y Representante Regional de la FAO para América Latina y el Caribe, firmó un memorándum de entendimiento con el gobernador de la provincia del Chaco, Jorge Capitanich, para mejorar la seguridad alimentaria de la provincia.
De esta manera acordaron que contribuirán al fortalecimiento de los sistemas agroalimentarios de dicha provincia y al incremento en la disponibilidad y el acceso a alimentos sanos, seguros y saludables, producidos con una perspectiva de sustentabilidad y respeto al medio ambiente.
“Firmamos este acuerdo con el Gobierno del Chaco para fortalecer las políticas públicas de la provincia orientadas a erradicar la pobreza y el hambre y a fortalecer los sistemas agroalimentarios”, destacó Lubetkin. “Es vital tener una medición adecuada de la pobreza rural para el diseño y ejecución de políticas públicas. Por eso será imprescindible fortalecer la información que brinda el Instituto Provincial de Estadísticas y Ciencias de Datos”, amplió sobre el convenio.
Otras noticias de Comunidad de Negocios
- 1
“Sin novedades”: desvela a los empresarios de la carne aviar una demorada falta de definición de China
- 2
Fuerte retroceso: la soja en Chicago quedó en el nivel más bajo desde finales de agosto de 2020 y hay una tendencia que golpea a la Argentina
- 3
“A la vanguardia”: científicos argentinos lograron el nacimiento de los primeros cinco caballos editados genéticamente del mundo
- 4
“A oscuras”. En pleno día se hizo de noche en una región por una impresionante tormenta de tierra